¿Cómo afecta el clima húmedo a la salud?

La calidad del aire que respiramos El exceso de humedad ambiental aumenta la posibilidad de contraer enfermedades respiratorias como el asma, sinusitis, e infecciones pulmonares como la bronquitis.

Estudios de investigación han mostrado que la exposición a la humedad y al moho de los edificios se ha asociado a síntomas respiratorios, asma, neumonitis por hipersensibilidad (NH), rinosinusitis, bronquitis e infecciones respiratorias.

La humedad aumenta la sensación térmica del ambiente, haciéndola más incómoda. Uno de los motivos por los que la humedad hace que el clima cálido sea más insoportable es que, mientras mayor es la humedad relativa, más alta se siente la temperatura.

Enfermedades por humedad en casa

Deberías tener en cuenta que unos niveles superiores al 65% de humedad relativa de forma permanente pueden ser perjudiciales para las personas que permanezcan en estos espacios.

Debido a la humedad relativa en el ambiente, podemos notar los siguientes efectos: Mayor sensación de calor en verano. Dificultad de refrigerar naturalmente una estancia. Sudor muy habitual, ya que el vapor de agua en el ambiente no permite la sudoración de manera eficiente.

A mayor grado de humedad en el ambiente, menor presión atmosférica, una bajada que afecta a la presión intraarticular de las articulaciones enfermas y hace que se incremente la percepción de dolor en los huesos al estimularse sus receptores.

Con una humedad alta en el aire (superior al 65%) al cuerpo se le hace más difícil regular su temperatura y la aparición de fatiga se da de manera más temprana, además de que nuestras pulsaciones serán más altas que en otras condiciones.

Al dormir en un cuarto con humedad se está expuesto en el ambiente ideal donde surgen ácaros y moho, lo que resulta nocivo para la salud debido a que pueden provocar alergias y problemas respiratorios como bronquitis, sinusitis, irritación en los ojos, congestión nasal, estornudos, secreción y complicar síntomas en ...

La Agencia de protección ambiental de Estados Unidos (EPA) recomienda un nivel de humedad entre el 30 y el 50 por ciento en el interior de la casa, en función de la temperatura exterior: más humedad cuanto más calor hace y menos cuanto más frío.

Las zonas costeras son las que más padecen la alta humedad, debido a la cercanía del mar. En particular, es alta la humedad en el norte de la península, la costa cantábrica y Galicia. La humedad relativa suele ser superior al 80%, alcanzando con facilidad más del 90% durante las noches más húmedas.

La temperatura ambiente ideal para un buen sueño es entre 16 y 21 grados. Además, el contenido de humedad debe ser del 40% al 60%. Los humidificadores y deshumidificadores de aire son buenas herramientas para regular la temperatura y humedad correctas en su hogar.

▶️ Cómo reducir la humedad en casa

Un 60% de humedad relativa es lo máximo a lo que habría que llegar dentro de casa para evitar la aparición de ácaros y hongos perjudiciales para la salud.

Según los parámetros establecidos en el RITE, el Reglamento de instalaciones térmicas en los edificios, las condiciones interiores en invierno se deben situar entre 21-23 ºC y un 40-50% de humedad relativa. Mientras que en verano, la temperatura se situará entre los 23-25 ºC y la humedad relativa en 45-60%.

Si la humedad es excesiva se condensa en forma de agua perjudicando a los habitantes por la formación de mohos y la proliferación de bacterias y virus. También deteriora el mobiliario, la pintura y los tabiques de la vivienda.

¿Cómo reducir la humedad en casa?

La humedad relativa es la relación porcentual entre la cantidad de vapor de agua real que contiene el aire y la que necesitaría contener para saturarse a idéntica temperatura, por ejemplo, una humedad relativa del 70% quiere decir que de la totalidad de vapor de agua (el 100%) que podría contener el aire a esta ...

Los países menos soleados y con mayores precipitaciones tienen un número comparativamente más elevado de personas que sufren enfermedades reumáticas, como por ejemplo, Bélgica. Por lo tanto en los meses más húmedos y sombríos, otoño e invierno, existe claramente una mayor incidencia de dolores articulares.

En general, el calor es más beneficioso en la artrosis. Se puede aplicar de forma casera, con la esterilla eléctrica o la bolsa de agua caliente colocadas sobre la articulación dolorosa. Alivian el dolor y relajan la musculatura.

Pese a que el mito de que cuando hay humedad duelen las articulaciones está muy arraigado en todo el mundo, un estudio científico asegura que nada tiene que ver el clima con la aparición del dolor.

El ser humano puede llegar a soportar hasta 55º de temperatura máxima. A partir de esa cifra, disminuye progresivamente el tiempo de supervivencia. El calor es uno de los elementos que acompañan cada año al verano.

100% de humedad relativa significa que está a punto de formarse niebla o rocío a medida que el vapor se condensa. Cuando la temperatura desciende por debajo del punto de rocío, el vapor de agua se convierte en precipitación como lluvia, nieve o rocío.

La resistencia eléctrica del cuerpo humano. El valor máximo de resistencia se establece en 3000 Ohmios y el mínimo en 500 Ohmios. La piel seca tiene una gran resistencia, del orden de 4.000 Ohmios para la corriente alterna.

De acuerdo con los especialistas, la humedad relativa del aire en una habitación no debería estar por encima de 40% y no superar el 60%. La humedad demasiado baja o demasiado alta puede ocasionar problemas.

La discusión se suele solventar arguyendo preferencias personales pero lo cierto es que la ciencia no deja dudas al respecto: el calor húmedo es peor y el porqué está directamente relacionado con el sudor (ver gráfico).

Cómo evitar que el frío y la humedad entren en tu casa en...

El mejor clima de Europa está en España. La localidad malagueña de Torrox es la zona con mejor clima de Europa debido a su geografía.

Arica se encuentra en el desierto de Atacama, considerado el desierto más árido del planeta. Esta ciudad experimenta una escasez extrema de precipitaciones, con un promedio anual de lluvia que no supera los 0,76 l/m².