¿Cómo aislar el calor de una habitación?

10 consejos para aislar tu casa del calor del verano

Cómo puedo aislar mi casa del calor

Principalmente, puedes reducir la temperatura en una vivienda si tratas muros y losas con materiales aislantes. Algunos productos como los paneles aislantes son funcionales para evitar que se genere una sensación térmica alta, pues se colocan en las zonas que más llegan a calentarse.

También para aislar térmicamente las paredes se suele recurrir a la instalación de paneles, fijados a la pared y recubiertos posteriormente con placas de yeso o con otro tipo de revestimiento. Los materiales pueden ser de tipo sintético: paneles de poliestireno expandido, pladur, o de tipo ecológico como el corcho.

Los aislantes naturales más comunes son:

Celulosa. La celulosa es quizás uno de los materiales aislantes más económicos y ecológicos. Está fabricada de cartón, papel y otros materiales similares desechables y es suministrada como material suelto. La celulosa tiene un valor de aislamiento de R-3.1 hasta R-3.7.

La superficie en la que se vaya a colocar el corcho debe estar perfectamente lisa y si es porosa debe imprimarse previamente. Si el material escogido son las losetas se trazan líneas para dividir las paredes en cuatro partes. La primera loseta se colocará en el centro de la pared y el resto de forma sucesiva.

Cómo aislar el techo del calor

Aquellos materiales que ofrecen una resistencia alta, se llaman aislantes térmicos específicos o, más sencillamente, aislantes térmicos. Ejemplos de estos aislantes térmicos específicos pueden ser las lanas minerales como la lana de roca, la fibra cerámica o la fibra de vidrio.

5 trucos para aislar las paredes del calor

Conductividad térmica 10ºC: >35 mW/m.K. Resistencia a la compresión 10%: >100 kPa. Tracción: >150 kPa. Flexión: >150 kPa.

El Código Técnico de la Edificación (CTE) establece unos valores mínimos de espesor para el aislamiento térmico de los edificios en función de la zona climática en la que se encuentren. En la zona climática A, que comprende el norte de España y las zonas de alta montaña, el espesor mínimo del SATE debe ser de 60 mm.

Una de las características del corcho proyectado, es el aislamiento. Aislar térmicamente con este material está limitado por su espesor ínfimo (estamos hablando de 1-3 milímetros) y la probada capacidad aislante del propio corcho, que se ve algo menguada por la componente de resina.

el corcho acústico constituye el material más efectivo para el control de la transmisión del ruido. Gracias a sus 200 millones de celdas de aire completamente cerradas por metro cúbico, supone un eficaz corrector de los ruidos.

Investigadores mexicanos encontraron un sustituto que proporciona un valor agregado a los desechos. El clásico tapón de corcho de las botellas puede ser reemplazado por uno de bagazo y de agave, según demostraron investigadores mexicanos.

5 trucos para aislar las paredes del calor

La lana de vidrio retiene muy bien el calor evitando pérdidas hacia el exterior. Es importante cubrir completamente el espacio entre vigas y sofitos. También se pueden inyectar materiales aislantes a granel en la cavidad del techo, como copos de celulosa o espuma de poliuretano expansiva.

Poliuretano expandido para techos: se trata de uno de los materiales más eficientes para aislar a los ambientes de la temperatura exterior.

Para aislar térmicamente un piso, una opción eficaz es rehacer la hoja interior de la fachada y cubrir con paneles la cámara de aire. Un buen aislamiento térmico proporciona una temperatura agradable dentro de casa durante todo el año y contribuye a reducir el consumo de calefacción y aire acondicionado a largo plazo.

Inconvenientes de utilizar bovedilla de poliestireno en una estructura

El poliestireno, a pesar de también ser un polímero, ostenta un coeficiente de aislamiento más bajo.

Para superficies poco porosas se recomienda aplicar la primera capa diluida con un 15-20% de agua. La pintura térmica, se conserva durante 12 meses en su embalaje de origen, perfectamente cerrado. Resguardar de las heladas y temperaturas superiores a 30ºC.

Si se tienen en cuenta las indicaciones mencionadas hasta ahora, el SATE protegerá como poco por 20 años. Sin embargo, si a esto se le suma un programa de conservación, como el que mostramos a continuación, la duración se extenderá hasta los 40 o 50 años.

Precio: La fachada ventilada es el sistema más caro, superando el coste del SATE en más de un 50%, al colocarse el SATE directamente sobre la fachada sin necesidad de perfilería se reduce mucho su coste respecto al de la fachada ventilada.

Durabilidad: la vida útil del SATE es muy superior a la del corcho proyectado, siendo de 20 años sin mantenimiento y llegando a los 40 o 50 años si se sigue un programa de conservación adecuado. Por su parte, la garantía del corcho proyectado es de 10 años.

Un corcho tarda en degradarse 100 años.

Es un buen aislante térmico

Su principal ventaja es que consigue que tanto el frío y el calor se queden fuera, y de hecho se calcula que se ganan de unos 8 a 10 grados cuando se pone en fachadas o tejados.