¿Cómo atraer a las mariquitas?

Lo único que va a atraer a las mariquitas es la comida. Ellas se alimentan de polen y de insectos plagas, con lo cual no será tan difícil de conseguir. En primer lugar, necesitas plantas que den flores llenas de polen.

Las flores blancas y amarillas atraen especialmente a las mariquitas, ya que suelen acudir a los girasoles por sus pétalos amarillos y brillantes. Igualmente, también les gusta las zinnias por sus colores vivos.

De este modo, las mariquitas viven en diferentes tipos de plantas, como árboles, arbustos, pastos, hierbas, hojas de plantas y plantas con flores. Ciertas especies, buscan refugio en zonas vegetales protegidas por setos o pastos densos y cubiertas rocosas, para entrar en la diapausa.

Coleópteros, como las mariquitas, son atraídos por los colores rojo y verde.

Las más populares son: hinojo, eneldo, cilantro, zanahoria (en flor, así que puedes dejar algunas sin cosechar para atraerlas y después recoger semillas), geranio y diente de león.

La mayoría de las mariquitas comen con voracidad insectos que se alimentan de plantas, como los pulgones, por lo que ayudan a proteger las cosechas. Las mariquitas dejan cientos de huevos en las colonias de pulgones y otros insectos parecidos. Cuando eclosionan, las larvas comienzan a alimentarse rápidamente.

Las más comunes y fáciles de tener en tu jardín son: caléndula, angélica, cebollino, comino, cilantro, cosmos, eneldo, hinojo, manzanilla, aliso y milenrama.

Hábitat de las mariquitas

Las mariquitas son muy útiles en el jardín porque comen plagas de jardín como los áfidos que pueden destruir otras plantas. La mayoría de las mariquitas viven alrededor de 1 año y pueden comer hasta 5,000 áfidos en su vida.

La creencia popular es que son mensajeras de buenas noticias, éxitos, positividad, salud y romances. La mariquita trae buena suerte, según la tradición popular.

Lo único que va a atraer a las mariquitas es la comida. Ellas se alimentan de polen y de insectos plagas, con lo cual no será tan difícil de conseguir.

Las mariquitas necesitan agua para sobrevivir. Por eso, podrías colocar un plato poco profundo con agua en el jardín. Pon piedras dentro del plato para que tenga un lugar en el que aterrizar y beber agua tranquilamente.

Las mariquitas son voraces consumidores de pulgones, ácaros y cochinillas de las plantas, por lo que se ha potenciado su uso como insectos “controladores biológicos de plagas” en jardines y cultivos.

Crea refugio para las vaquitas para protegerse de sus depredadores. Algunas plantas sirven para este uso. Un gran ejemplo es La Chilca que además de ser una planta nativa es un refugio natural. También les gustan las plantas bajas y laberínticas como el orégano o el tomillo, así como hojas o mantillo.

Las mariquitas de dos y siete puntos (Adalia bipunctata y Adalia septempunctata) son las más conocidas, pues se alimentan de hasta 28 especies diferentes de pulgones.

Coccinellidae

Generalmente habitan en plantas donde se encuentran sus presas, como los pulgones, pulgas, moscas o áfidos.

A su vez, las mariquitas cuentan con depredadores naturales como pájaros, arañas, libélulas, diversos anfibios, etc. A manera de curiosidad, la mayoría de las mariquitas emiten una sustancia de olor bastante desagradable que usan como mecanismo de disuasorio de defensa antes sus depredadores naturales.

Aquellas con los colores más vistosos y llamativos frente a la vegetación natural donde viven son también las más venenosas. Las mariquitas rojas son las más comunes.

Hábitat de las mariquitas

Plantas y flores

Las más populares son: hinojo, eneldo, cilantro, zanahoria (en flor, así que puedes dejar algunas sin cosechar para atraerlas y después recoger semillas), geranio y diente de león.

A las catarinas les encanta esconderse al abrigo de las hierbas bajas, los arbustos y las flores en forma de copa para evitar el calor del sol. Las plantas bajas que cubren el suelo, como el orégano, el tomillo, el cilantro, etc., protegen de depredadores como los pájaros.

En nuestras latitudes, cuando llega el frío, hibernan (bajo las cortezas de los árboles por ejemplo).

Las larvas tienen mucho apetito y comen muchos insectos. En cuanto crecen, las catarinas comen menos porque se vuelven más selectivas: escogen presas de mayor tamaño; aunque hay catarinas vegetarianas, la mayoría son carnívoras: se alimentan de pulgones, cochinillas, ácaros y larvas de moscas.

Pueden alimentarse de las hojas, las semillas o frutos de muchas especies vegetales, como por ejemplo las lechugas.

Alimentación. Las mariquitas son muy apreciadas ya que son depredadoras naturales de los áfidos (pulgones), cocos o cochinillas, ácaros, larvas de moscas y otras plagas de la agricultura. Generalmente, los adultos tienen la misma alimentación que las larvas, pero algunas también comen polen, néctar, hongos, o huevos.