¿Cómo dar calor a una contractura?

Cuando la contractura se encuentra en los primeros estadios, se puede aplicar calor seco en la zona afectada. El calor seco lo producen las mantas eléctricas o las almohadillas terapéuticas y hará que los músculos se relajen porque tiene un efecto suavemente analgésico.

Aplica calor seco en la zona, con una almohadilla terapéutica. Puedes hacerlo en varias sesiones cortas al día, de entre 10 y 30 minutos de duración, con intervalos de 2 o 3 horas entre sesiones.

Al igual que con el uso del frío para aliviar las molestias, se recomienda aplicar en periodos cortos de tiempo, alrededor de 15 minutos, cada dos horas a lo largo del día mientras sea necesario. No aplicar más calor antes de que haya pasado ese tiempo de descanso ya que podría ser contraproducente.

Para tratar las contracturas musculares, se recomienda la aplicación de calor o frío en la zona afectada, estiramientos suaves, masajes y, en algunos casos, la toma de medicamentos antiinflamatorios o relajantes musculares.

¿Cómo aplicar el calor?

No tratar las contracturas conlleva riesgos.

La experta, que distingue que "en función de la musculatura afectada los riesgos varían", avisa de que puede cronificarse la lesión, aumentar la zona de la contractura e, incluso, implicar "ausencia de movimiento del segmento corporal afectado".

La aplicación de calor puede ser local o de cuerpo entero. La terapia local está indicada en las contracturas musculares, por ejemplo. Es tan sencillo como poner sobre la zona un pack de gel calentado o una bolsa con agua caliente.

A causa de esto podemos sentir dolor, inflamación e incluso un mal funcionamiento del músculo. La duración de una contractura puede ser de entre cinco y diez días.

Cómo aplicar calor

Se recomiendan dos o tres aplicaciones diarias de 15 – 20 minutos de duración. Se ha de vigilar siempre la piel para evitar la producción de quemaduras. La termoterapia está contraindicada en lesiones agudas, ya que aumentaría la inflamación.

Las causas de aparición de las contracturas musculares son muy variadas pero entre las más usuales encontramos: el haber realizado deporte de forma inapropiada o tras una lesión grave. Asimismo, existen varios tipos de contracturas musculares pero las más repetidas son las de la zona cervical y en la espalda.

Tipos de contracturas

Contractura capsular : respuesta del sistema inmunológico a materiales extraños en el cuerpo humano. Contractura de Dupuytren: una condición en la que uno o más dedos quedan permanentemente doblados en una posición flexionada. Contractura muscular: una contractura muscular es un endurecimiento o acortamiento de los músculos.

El tipo más común de contractura es la deformidad por contractura , que es el término general para la contractura de los músculos. Además, existen algunas formas más raras, que incluyen: Contractura de Dupuytren: esta es una condición progresiva que afecta los dedos. Síndrome de Marden-Walker: provoca múltiples contracturas articulares.

Las contracturas son una complicación común de afecciones neurológicas y no neurológicas y se caracterizan por una reducción de la movilidad articular. El estiramiento es muy utilizado para el tratamiento y prevención de contracturas .

Toalla de vapor.

Sumerja una toalla en agua y escúrrala. Coloque la toalla mojada en el microondas por aproximadamente 30 segundos. Si la toalla está muy caliente, déjela enfriar por algunos minutos. Revísela de nuevo antes de usarla.

El calor aumenta el flujo sanguíneo y la extensibilidad del tejido conectivo; también disminuye la rigidez articular, el dolor y el espasmo muscular y ayuda a aliviar la inflamación, el edema y los exudados.

Principales síntomas

Normalmente, una contractura muscular suele desaparecer por sí sola en unos 4-5 días siguiendo algunas pautas sencillas.

Aplicar calor si tenemos un dolor crónico que no ha sido originado por un traumatismo. Ej: lumbago, contractura, … Se ha demostrado que la aplicación de calor local reduce el dolor también en dolores no musculares como: dolor menstrual, dolor por cólico renal, …

Los aumentos inducidos por el calor en el flujo sanguíneo muscular ayudan en la recuperación del ejercicio intenso y dañino para los músculos a través de varios mecanismos posibles diferentes: primero, se mejora la entrega de sustratos (p. ej., glucosa, aminoácidos) que se requieren para repostar y remodelar los tejidos debido a aumento de la perfusión tisular (52) ...

Efectos del calor

Está indicado para tratar el dolor de las inflamaciones no traumáticas de las articulaciones y relaja la musculatura contraída. De igual manera que el frío, puede administrarse el calor de forma húmeda, con compresas o un baño, o bien de forma seca con bolsas de agua caliente o sacos de semillas.

Los fármacos más eficaces con que se cuenta para el control de la espasticidad incluyen el baclofeno, el diazepam y el dantroleno.

El reumatólogo es el médico internista del aparato locomotor, es decir, el especialista que diagnostica y trata las alteraciones que se han producido sin la existencia previa de un traumatismo de músculos, tendones, ligamentos, huesos y articulaciones.

Brooks. “Antes del ejercicio o actividad, use calor para reducir la rigidez de las articulaciones y mejorar su flexibilidad. Después de la actividad, usa hielo para reducir la incomodidad o el dolor posterior al ejercicio”.

Eso sí, es importante que se vigile constantemente la temperatura de la compresa o bolsa de agua porque, una vez fría, perderá el efecto. Se recomienda una aplicación del calor de unos 15 minutos seguidos de un descanso.

Una investigación reciente de la Clínica Mayo, de Estados Unidos, recomienda la fórmula general de optar por la terapia fría primero y luego por un tratamiento con calor.

La contractura muscular causa dolor de espalda por varios mecanismos: La contractura de un músculo activa directamente los nervios del dolor que están en él, desencadenando dolor de espalda. Además, el músculo contracturado puede comprimir la arteria, disminuyendo su riego sanguíneo.

Se trata de una lesión poco grave pero molesta, que puede empeorar si no se trata debidamente. Si se retrasa excesivamente puede ser muy complicado recuperar el rango de movimiento normal.