¿Cómo funciona una luz nocturna?

El circuito funciona gracias a una fotocelda, LDR, o fotorresistencia, que al dejar de recibir luz, polariza la base de Q1 y por intermedio del colector conduce y deja pasar corriente a través de la resistenciaR6, encendiendo el LED LA1.

Este circuito nos ayudara a encender una lampara por la noche, o sea automático , y así evitaremos de encender o apagar nuestra luz externa del patio , jardín,etc... cuando llegue la noche el foco se encenderá y al amanecer se apagara, y así ahorraremos energía.

El modo nocturno reduce el excesivo contraste entre la pantalla y la habitación oscura y puede reducir parte de los síntomas que contribuyen a la sensación de ojos cansados.

¿Cuánto gasta una luz encendida toda la noche? - Quora. Suponiendo que sea una bombilla de 100 w (cien vatios) y la noche sea de 8 horas, consumirás 800 Wh (watios-hora), o lo que es lo mismo 0,8 kWh (o 0,8 kilovatios-hora).

La iluminación nocturna interrumpe la polinización nocturna al atraer a las polillas hacia arriba, alejándolas de los campos y de los setos para que pasen menos tiempo alimentándose y, por lo tanto, polinicen.

Se sabe que la luz afecta la calidad del sueño. Para la iluminación del dormitorio, los expertos recomiendan luces de baja temperatura de color en tonos cálidos como rojo, naranja y amarillo. Esto es lo opuesto a los verdes y azules fríos recomendados para los tonos de pared.

La luz blanca hace que el ojo humano vea mejor debido a su elevado índice de reproducción cromática.

¿Sabes cuál es el electrodoméstico que más consume en tu hogar? Sí, has acertado: el frigorífico. Pero hay otros que pueden hacer bastante daño a tu bolsillo, como el televisor, la lavadora o la secadora.

En general, algunos de los electrodomésticos que más consumen son la nevera (662 kWh/año), el congelador (563 kWh/año), la televisión (263 kWh/año), la lavadora (255 kWh/año), la secadora (255 kWh/año) y el lavavajillas (246 kWh/año).

En este ranking, lavadora y secadora ocupan las primeras posiciones, con un consumo anual que puede alcanzar una media de 255 kWh.

Estudios han demostrado que la luz roja tiene un efecto relajante en el cerebro, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad, lo que a su vez facilita el sueño. Además, la luz roja no interfiere con la producción de melatonina, por lo que es ideal para usar antes de dormir.

Azul. Los tonos azules son los que aportan un mejor descanso, según expertos del Edinburgh Sleep Centre. En especial el aguamarina y el azul cielo aportan una gran sensación de calma, por la asociación que tienen con el cielo y el mar.

La luz fría es una luz de tonos azulados y es la que más luminosidad aporta. Es la luz que está por encima de los 5.000 grados Kelvin, la medida que se usa para medir la tonalidad de la luz. Esta luz se asemeja a la luz del día, que estaría alrededor de los 7.000K.

La iluminación fría:

Tiene intensidad más del doble de la que tiene la iluminación cálida, y la diferencia de tonalidad es realmente notable. Su alto nivel de luminosidad y tonalidad azulada, se emplea para avivar y activar a la gente, produciendo en ella un estímulo a la acción.

Los azules claros son relajantes, mientras que el azul brillante puede ser refrescante. El uso de tonalidades más pálidas de azul puede hacer que una habitación parezca más espaciosa. Por su naturaleza relajante es un color que funciona bien en espacios como baños o dormitorios.

Si quieres crear una ambiente cálido y confortable tenderás a la elección de una bombilla o LED que emita hasta 3000ºK (luz cálida), ideal para espacios como el salón, dormitorio, restaurante, bar, hotel, etc. En cambio, para generar una iluminación fría, usaremos bombillas o LED superiores a 6000ºK (luz fría).

El consumo de un microondas es inferior al de una vitrocerámica. Evidentemente, si utilizamos más fuegos, la diferencia se hace mucho más visible. Mientras que la potencia máxima de un microondas son los 800W, pudiéndose gastar a menos rendimiento, el consumo mínimo de una vitrocerámica, siempre serán 1200W.

Las bombillas.

Las bombillas LED, son sin duda, los aparatos eléctricos que menos consumen. Su consumo es de entre 4W y 5W por hora. Ojo, deben ser LED. Las tradicionales, tienen un consumo mucho más elevado, unos 25W/hora.

Si se toma como medida un foco incandescente de 60W, una laptop consume menos de la tercera parte de lo que consume un televisor. (BBC Mundo).

Los ventiladores son dispositivos más simples que mueven el aire para generar una sensación de frescura. Su consumo energético es mucho menor que el de los aires acondicionados, ya que no utilizan sistemas de refrigeración.

Seleccionemos un secador de alta gama y última tecnología, con una potencia de 1.600 W. Si lo utilizamos una media de 15 minutos cada vez que nos secamos el pelo, estamos hablando de 0,4 kWh de consumo. Si te secas al pelo 3 veces a la semana, supone un gasto mensual de 4,8 kWh.

Consejos prácticos para reducir el consumo eléctrico

Para averiguar si un electrodoméstico consume demasiado compara el consumo real con lo que especifica el manual del fabricante. Si lo supera con creces, es que presenta alguna anomalía y no está funcionando como debería. Seguramente necesitarás hacerle un buen mantenimiento.

Así, los tonos amarillos favorecen el descanso y la relajación, mientras que la luz blanca y azul activa el cuerpo y lo mantiene concentrado y alerta. Por lo tanto, es indispensable que durante la noche se utilice luz tenue y cálida: eso le indicará a nuestro cerebro que ha llegado el momento de preparase para dormir.

Al dormir con la televisión encendida, el cerebro fabrica menos melatonina. Este déficit provoca trastornos como depresión, insomnio, aceleración del envejecimiento, e incluso vulnerabilidad frente a varias enfermedades.