¿Cómo funcionan las cerraduras con clave?

Las cerraduras electrónicas funcionan a través de un código que se introduce en el teclado que presentan y que permite abrir la puerta sin utilizar llaves. No obstante, también es posible encontrar modelos en los que el mecanismo de apertura se acciona con un mando a distancia o por medio de una tarjeta magnética.

Las cerraduras digitales cuentan con un sistema de apertura y cierre electromecánico, contando con un pequeño motor que es controlado mediante el impulso eléctrico, este motor, puede activarse de distintas formas según sea la función de los tipos de cerraduras: Teclado para marcar número.

La cerradura digital con tarjeta, funciona con un sistema de comunicación inalámbrico que reconoce el código de la tarjeta asociada a una habitación y a una reserva concreta, y permite abrir la puerta cuando el huésped acerca la tarjeta a la cerradura, sin necesidad de insertar ni utilizar ninguna llave.

Este sistema funciona por medio de señales Wifi, Bluetooth, asistentes de voz o dispositivos biométricos, lo que convierte nuestro dispositivo móvil, huella dactilar o nuestra voz registrada, en las únicas llaves capaces de abrir la puerta.

Además del coste, tienen dos inconvenientes adicionales: si se va la luz del edifico, no puedes entrar y por otro lado, no son las más seguras, ya que normalmente actúan liberando solamente el resbalón, es decir, funcionan si se cierra la puerta “de golpe”, no con llave.

Las cerraduras inteligentes son igual de seguras que cualquier cerradura tradicional de llave. Teniendo en cuenta que la mayoría de las cerraduras inteligentes actúan a modo de cierre motorizado para un sistema de cierre idéntico al de las cerraduras convencionales.

La principal ventaja es que no necesitamos llevar una llave encima para abrir la cerradura. Dicho esto cabe señalar que la mayoría de ellas también presentan la alternativa de abrirse con llave, pues en caso de que nos falle la conexión a internet o nos quedemos sin luz en casa, no nos quedará otra alternativa.

La solución principal para evitar ataques de tarjetazo es simple y está también al alcance de cualquiera: cerrar con llave. De esta forma, la lámina hará tope y será imposible acceder al resbalón con ella.

Usar una tarjeta que no valga para nada. Lo más seguro es que la dañemos cuando queramos abrir la puerta. Introducimos la tarjeta de forma vertical por encima de la cerradura, entre el marco y la puerta. Bajamos la tarjeta con fuerza y con la otra mano haremos presión para abrir la puerta.

Carecen de llaves y abren o cierran la puerta mediante lectores de huellas dactilares, teclados de códigos, tarjetas electromagnéticas o mandos a distancia. Incluso pueden controlarse cómodamente a través del teléfono móvil gracias a aplicaciones específicas y a la tecnología Bluetooth.

La cerradura inteligente ganadora, debido a su fiabilidad y a su gran variedad de posibilidades, es Nuki Smart Lock 3.0. La hemos probado junto con el teclado Keypad 2.0, que permite acceso con una clave numérica o por huella dactilar.

La cerradura electrónica inteligente recomendada tras nuestro exhaustivo análisis, que incluye la valoración de cerrajeros, es la Tesa Assa Abloy

Las cerraduras magnéticas, también conocidas como electromagnéticas, consisten en tipo de cerradura que permite el bloqueo de la puerta al estar compuesta por un electroimán y una placa inducida. El electroimán está en el marco y la placa a la puerta; ambos componentes contactan cuando la puerta está cerrada.

Herramientas necesarias para instalar una cerradura electrónica

Las cerraduras inteligentes utilizan entre 4 y 8 baterías alcalinas AA de 1.5 V, dependiendo de cada dispositivo. Como promedio, la vida útil de las baterías de una cerradura electrónica tiene una duración máxima aproximada de 10 a 12 meses.

Potencia de consumo 3.3W. Temperatura de trabajo -40ºC a +70ºC.

Como su nombre indica, las cerraduras inteligentes son dispositivos electrónicos que permiten abrir y cerrar puertas sin necesidad de usar llaves.

A continuación enumeramos los principales tipos de cerraduras que hay en todos los contextos y las ventajas e inconvenientes de cada uno de ellos.

Con el Bluetooth la cerradura inteligente se conecta al móvil o la tablet de forma directa, sin necesidad de intermediarios, de modo que podremos abrir la puerta cuando estos dispositivos estén dentro del radio de acción.

Level Home es la firma detrás de este curioso invento.

CVV de tipo 1: es el código que va encriptado en la banda magnética de la tarjeta, por lo que a simple vista no lo podemos observar. Ese tipo de código de verificación lo leen los TPV (Terminal de Punto de Venta) de forma automática cuando hacemos un pago o cuando efectuamos una devolución en un establecimiento.

Se sugiere colocar trozos de cartón para que el movimiento de la puerta cuando se esté presionando no raye la pintura o la calidad del material de la puerta. Colocar una silla pegada a la puerta justo debajo del picaporte para evitar que pueda moverse. Esta es la forma más habitual para bloquear la puerta.

Las tarjetas RFID o tarjetas de proximidad (Tarjetas llave para hoteles ), son una opción segura para reemplazar las arcaicas llaves de hotel.

Abrir una puerta suele costar entre $500 MXN y $1,000 MXN. Este precio hace referencia a una puerta tradicional. En caso de que este sea un servicio de urgencia o que las llaves estén echadas, el precio puede alcanzar los $1,500 MXN.

La electrónica digital, es un campo de la electrónica que involucra el estudio de señales digitales con el fin de procesar y controlar diversos sistemas y subsistemas, en contraposición a la electrónica analógica y las señales analógicas.

Bien fácil, lo que hace especial a la cerradura multipunto lo indica su propio nombre: se anclan en varios puntos. En las cerraduras tradicionales, el bloqueo se centra en solo un punto. De este modo, la llave al girar logra que un pasador horizontal entre en el marco, dejando así la puerta anclada.

Las cerraduras electromagnéticas mantienen cerrada una puerta usando el poder de la atracción magnética. Un electroimán solo se vuelve magnético una vez que se le aplica energía eléctrica. Cuando no hay energía aplicada, no genera un campo magnético. Esto significa que la puerta se puede abrir libremente.