¿Cómo hacer para lubricar a una mujer?

¿Cómo mejorar la lubricación vaginal?

Si sospechas que tu sequedad puede ser causada por bajos niveles de estrógeno, existen varias opciones de tratamiento: humectantes o lubricantes vaginales, crema o tabletas de estrógeno vaginal local, terapia de estrógeno sistémico (y progesterona) o, a veces, moduladores selectivos de los receptores de estrógeno (SERM ...

El estrógeno es la hormona femenina que ayuda a mantener el tejido vaginal sano, así como la lubricación vaginal, la elasticidad y la acidez normales.

Cómo lubricar más de forma natural

En general los más utilizados son los lubricantes a base de agua, que son los más “parecidos” a la lubricación femenina. Importante: los lubricantes caseros como el aceite o la vaselina no deben usarse, ya que pueden causar irritaciones y además pueden dañar los preservativos.

A base de aceite.

Estos lubricantes incluyen aceites vegetales y aceites de nueces, y se consiguen en los supermercados. Pueden ingerirse sin riesgo, obviamente, y también se los puede utilizar sin problemas con anticonceptivos de látex.

Lubricantes caseros de base grasa

Las mantecas, por su solidez (aunque con el calor las grasas se vuelven líquidas –por ejemplo la manteca de coco a partir de 21º), reducen el riesgo de manchas. Y también lo reducen los aceites que penetran en la piel con más facilidad (como el de almendra).

Causas. La vaginitis atrófica es causada por una disminución en los estrógenos. Los estrógenos mantienen los tejidos de la vagina lubricados y saludables. Normalmente, el revestimiento de la vagina produce un líquido lubricante transparente, el cual hace que las relaciones sexuales sean más cómodas.

La falta de lubricación es un síntoma esporádico o permanente, dependiendo de la causa que lo origine. Éstas pueden ser orgánicas o asociadas a determinadas condiciones físicas, pueden estar relacionadas con disfunciones u otros problemas de salud también física, o bien psíquicas.

Una de las mejores formas para recuperar o mejorar la lubricación vaginal es aumentando el consumo de agua. Teniendo en cuenta que el líquido que produce la vagina para lubricarse está compuesto de agua, es lógico que una mayor ingesta de este elemento redunde positivamente en la lubricación.

Sin embargo, algunas opciones, incluido el aceite de oliva, pueden no ser ideales. Este daño puede causar que estos elementos se rompan, lo que aumenta la probabilidad de que una persona quede embarazada o contraiga una infección de transmisión sexual (ITS).

El estrógeno es fundamental en este proceso y como con el paso de los años su producción va disminuyendo hasta casi desaparecer al alcanzar la menopausia, es más que común la consulta en mujeres de aproximadamente 50 años.

Lubricante, la mejor opción

Así pues, aunque la vaselina no es tóxica, no debemos usarla para humedecer las zonas íntimas y sí los productos indicados para ello, como son los lubricantes. Hay cuatro tipos de lubricantes de venta libre en las farmacias, y son estos (luego te decimos cuál te conviene elegir).

Por un lado, sí existen algunas substancias que pueden servir como lubricante - incluyendo aceites como el de coco, de oliva y el aceite de vitamina E. Sin embargo, estos pueden causar irritación o alergia en algunas personas, y no se pueden usar con condones de látex.

El lubricante a base de agua está considerado como una de las mejores opciones para favorecer la lubricación íntima. Este producto es ligero, no causa manchas y, en el caso de la gama de lubricantes Durex, es compatible con los condones.

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Y aunque la mayoría de los aceites naturales de origen vegetal se pueden utilizar de forma segura como lubricantes, "algunos de estos lubricantes a base de aceite pueden ensuciar más, ser más difíciles de lavar y manchar la ropa y las sábanas", dijo el Dr. Ross.

- No se recomienda usar con preservativo ya que puede romperlo. - Necesitas agua y jabón para retirarlos totalmente de la piel. - Pueden aumentar el riesgo de causar infecciones en la mujer debido a que alteran el pH.

Los aceites, de cocina o de masaje, también se utilizan como lubricantes caseros. En este caso, su textura sí es adecuada, no obstante, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) desaconsejan su uso ya que dañan los preservativos de látex.

Cuando cambiamos o rellenamos el aceite, éste se va directamente al cárter, que es el lugar dónde se almacena el lubricante y se encuentra en la parte inferior del motor. Es en este recipiente donde se acumulan los litros del fluido porque es la reserva de la que tira la bomba de aceite y el motor.

Las lociones y cremas se consideran una alternativa ideal a los lubricantes, pero debes tener mucho, mucho cuidado antes de probarlas . Todas las lociones de uso diario contienen esencias y perfumes fuertes, que no son adecuados para la piel sensible de las partes íntimas. También pueden contener parabenos, que pueden provocar un desequilibrio hormonal.

El lubricante a base de agua está considerado como una de las mejores opciones para favorecer la lubricación íntima. Este producto es ligero, no causa manchas y, en el caso de la gama de lubricantes Durex, es compatible con los condones.

Lubricante, la mejor opción

Así pues, aunque la vaselina no es tóxica, no debemos usarla para humedecer las zonas íntimas y sí los productos indicados para ello, como son los lubricantes. Hay cuatro tipos de lubricantes de venta libre en las farmacias, y son estos (luego te decimos cuál te conviene elegir).

Mejor a base de aceite: Bloomi, lubricante personal a base de aceite Delight , $12. Mejor a base de silicona: Jo, lubricante personal híbrido clásico, $15. Mejor orgánico: Sliquid Organics, Natural Lube, $16. Lo mejor para la sequedad vaginal: Lola, lubricante personal, $14.

Para el sexo: pegajoso y no divertido. " Se debe evitar la miel y cualquier cosa que contenga azúcar como lubricantes ", dice Caitlin V.. Al igual que las sustancias a base de petróleo, dice, "el azúcar puede provocar un desequilibrio del pH en la vagina, lo que puede provocar irritación e infección".

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Desde la masturbación frecuente hasta varias técnicas de meditación pueden ayudarnos a estar más preparadas para el coito, y disfrutarlo como nunca lo habíamos hecho.

1. Mantén una vida sexual activa.
2. Apuesta por una alimentación sana.
3. Haz algún tipo de meditación.
4. No laves nunca la vulva con jabón.
5. Usa lubricantes sin reparos.