¿Cómo hacer que madurar el chicozapote?

Cuando envuelves las frutas o verduras en periódico o las pones dentro de una bolsa de papel, este aumenta la temperatura y favorece el proceso de maduración.

Patrón de maduración. Los frutos de chicozapote se colocaron a temperatura ambiente, 21±2°C y 60-65% H.R. durante nueve días.

La clave está en el gas de etileno que desprende la fruta. Para concentrarlo, solo tienes que meter las frutas en una bolsa de papel y cerrarla bien. De esta manera el gas etileno de la fruta se concentrará y acelerará el proceso de maduración, estando lista para consumir en su punto perfecto mucho antes.

El zapote cuando se produce por semilla comienza su cosecha generalmente a los 7 años. Cuando el árbol es injertado inicia la producción a los 3 años.

Aumentando la temperatura se promueve la maduración y por ende la degradación de la clorofila y la reducción de °h de la epidermis en feijoa (Amarante et al., 2008), la cual no cambia de color debido a la genética de la fruta, variando solamente la tonalidad del verde.

Su pulpa es blanca y es un fruto que se agrieta cuando ya está maduro, se aprieta con los dedos para comprobar si ya está listo para comerse.

La piel es café áspera cuando está verde y lisa al madurar, la pulpa suave, carnosa y jugosa es de sabor muy dulce que desprende una fragancia suave y agradable (Mickelbart, 1996). El fruto es consumido fresco cuando está totalmente maduro siendo una fruta postre en muchas áreas.

La fruta necesita oxígeno para producir etileno y madurar, por lo que al mantener los niveles de oxígeno en un 2%, en lugar del 21%, concentración en la que se encuentra el aire normalmente, y aumentar los niveles de dióxido de carbono, esta tecnología puede retrasar el proceso de maduración, y esencialmente, poner las ...

Cada vez que compramos alimentos es fácil distinguir a simple vista entre un fruto firme y maduro y uno “envejecido”, incluso reconocemos las diferencias entre ambos en cuestión de sabor y textura. Un elemento clave en la maduración de los frutos es el etileno(C₂H₄).

Las frutas climatéricas más comunes en los establecimientos españoles son: aguacate, albaricoque, chirimoya, ciruela, kiwi, manzana, melón, melocotón, pera, plátano, tomate y sandía.

Cuando envuelves las frutas o verduras en periódico o las pones dentro de una bolsa de papel, este aumenta la temperatura y favorece el proceso de maduración.

Las variedades de zapote que se cultivan en México son el amarillo, negro, el chicozapote y blanco, aunque ¿sabías que el mamey es considerado un tipo de zapote? La palabra zapote, del náhuatl tzapotl, es el nombre usado para varias frutas tropicales comunes, algunas no provenientes de la familia botánica Sapotaceae.

Se cultiva en abundancia en tierras bajas y zonas tropicales. De origen americano, el zapote es de apariencia esférica y alargada, cuya textura dura es de color marrón o verde rojiza.

Cuando aún está verde, esta fruta se puede conservar a temperatura ambiente (entre 16 y 20 °C) durante varias semanas. Para saber si está madura, basta con observar si el color de su piel tiende al amarillo y si la fruta cede levemente a la presión con el dedo.

La feijoa esta emparentada con la guanábana, que también tiene infinidad de beneficios medicinales . Esta fruta tiene su pulpa es gelatinosa, por lo que la convierte en una fruta ideal para elaborar mermeladas, jaleas y compotas, pero también se puede consumir cruda, cocinada, con cascara o extrayendo su pulpa.

Se recogen en octubre y noviembre. Cuando están maduros ellos solos se desprende del árbol. Su carne es muy perfumada y jugosa y muy rica en vitamina C y minerales como el yodo.

Se usa como materia prima para fabricar goma para mascar (marqueta). El árbol se sangra cada dos o tres años. El fruto, llamado chico chicozapote es muy apreciado y con éste se elaboran mermeladas y jarabes por su agradable sabor dulce. Por este uso es objeto de comercio en los mercados regionales.

En México, los frutos son comunes en los mercados desde agosto a enero. Ciertos árboles, sobre todo los tipos de frutos grandes, regularmente entran en la temporada en junio, otros en julio y agosto. Otras variedades del fruto son: zapote blanco, negro, verde, amarillo, chicozapote o zapotillo, mamey y chapote.

Si al rascar la superficie de la fruta se ve marrón en lugar de verde, entonces la fruta está lista para cortarse y madurará fuera del árbol. La fruta inmadura no madurará en el árbol.

El chicozapote es un fruto de pulpa suave color café rojizo y de sabor muy dulce, es originario de América. tropical pero su nombre proviene del náhuatl. tzictzapotl; tzictli que quiere decir chicle y tzapotl, fruto.

Las decocciones hechas con las hojas y semillas se toman como té para tratar la hipertensión arterial, ansiedad, insomnio y los calambres. Las hojas, corteza y semillas poseen una acción sedante y ligeramente narcótica (hipnótica). Adicionalmente, éstas poseen actividades anti-espásticas y anticonvulsivas.

Produce frutos a los 3 ó 4 años. La producción es de 2,000 a 4,000 frutos por árbol por año. La producción del látex varía de 2 a 10 Kg, aunque existen árboles capaces de producir más; la mayor producción se da durante los meses de lluvia (octubre a diciembre).

Las frutas climaterícas, las que maduran fuera del árbol, son: Manzanas, plátanos, peras, mango, kiwi, melocotón, albaricoque, sandía, ciruela, aguacate, chirimoya,… Las frutas no climatéricas: Los cítricos, piña, uvas, aceitunas, cereza, granada, fresas,… Y también frutos como el pimiento o pepino.

El proceso de maduración es un despliegue de las fuerzas intrínsecas del propio organismo que van apropiándose y utilizando elementos exteriores necesarios para la subsistencia y el desenvolvimiento del propio ser.

Así, la temperatura influye en la velocidad en la que respiran las plantas (cuanto mayor es, más se acelera el proceso de maduración). El dióxido de carbono hace más lenta la respiración y, por tanto, más lento el proceso de maduración.

Frutas no climatéricas

Su maduración es muy lenta y apenas observamos cambios bruscos en su aspecto.

Finalmente, se concluyó en que una temperatura baja (2℃) es la más eficiente para ralentizar el proceso de maduración. Según Romojaro, el ciclo biológico de cualquier vegetal o fruto consiste en 3 etapas: crecimiento, maduración y senescencia (2006.