¿Cómo identificar el modo indicativo subjuntivo e imperativo?

Los modos verbales expresan la actitud o el enfoque de la persona hablante. Por lo general, decimos que el indicativo expresa información real; el subjuntivo, información más subjetiva (de ahí el nombre); mientras que el imperativo se usa para hacer peticiones.

El modo indicativo se usa cuando la acción es regular o se ha producido, mientras que el subjuntivo se utiliza normalmente si esta no ha tenido lugar aún: Mario esperó hasta que viniste frente a Mario debería esperar hasta que vengas.

Modo verbal indicativo

Se caracteriza por expresar acciones reales, afirmaciones o narrar sucesos del pasado, presente o futuro. Su enfoque no está en el yo, ni en el tú, sino en la tercera persona “él o ella”. Por ejemplo: Todas las mañana Daniel hace ejercicio.

El modo subjuntivo es uno de los modos gramaticales del verbo y se utiliza para expresar acciones posibles, deseadas o hipotéticas, es decir, que no están ocurriendo efectivamente. Por ejemplo: Queremos que confíen en nosotros. / Esperamos que hayan escuchado el reclamo.

Modo verbal imperativo

Este modo verbal se enfoca en la segunda persona: “tú”, es decir, en quien escucha o recibe una petición u orden. Por ejemplo: ¡David, necesito que estudies matemáticas!

El modo indicativo incluye una sola forma de presente (amo). Pasado. El modo indicativo tiene cinco formas de pretérito o pasado: pretérito perfecto simple (amé), pretérito imperfecto (amaba), pretérito perfecto compuesto (he amado), pretérito pluscuamperfecto (había amado), pretérito anterior (hube amado).

Los modos verbales son tres: indicativo, subjuntivo e imperativo. Definitivamente suprime, pues, el modo potencial o condicionado, cuyas formas simple y compuesta (amaría, habría amado) se añaden al indicativo.

Hay tres modos verbales: indicativo, subjuntivo e imperativo. § El modo indicativo expresa acciones reales. La niña juega al fútbol. § El modo subjuntivo expresa deseos u órdenes negativas.

Modo verbal que sugiere una actitud subjetiva del hablante respecto a lo expresado por el verbo, la cual incluye posibilidad, expectativa, contingencia o deseo en contextos que varían de lengua en lengua. Sus contrapartes en español son el modo indicativo y el modo imperativo.

Indicativo: Describe acciones reales y concretas que están ocurriendo (presente), ocurrieron (pasado) o van a pasar con toda certeza (futuro). “Yo como cada día comida saludable”.

A la raíz del verbo se le añaden las terminaciones siguientes: -o, -as, -a, -amos, -áis, -an. A la raíz del verbo se le añaden las terminaciones siguientes: -o, -es, -e, -emos, -éis, -en. A la raíz del verbo se le añaden las terminaciones siguientes: -o, -es, -e, -imos, -ís, -en.

El imperativo es el modo verbal que sirve para dar órdenes, ruegos, consejos e incluso deseos de forma directa. Dado su uso, en imperativo no existe la primera persona o yo, ya que no nos podemos dar órdenes directas a nosotros mismos.

Imperativo. ama (tú)ame (Ud.) amad (vosotros, -as)amen (Uds.)

Se forma tomando como raíz el infinitivo del verbo sin -ar, -er o -ir y añadiendo las terminaciones “-ad” (para los verbos acabados en “ar”), “-ed” (para los verbos acabados en “-er”) e “-id” (para los verbos acabados en “-ir”): Hablar: ¡hablad! Comer: ¡comed!

En gramática tradicional se dice que es el modo de la oración adjunta cuya acción, mediante el contenido de la oración principal o el tipo de nexo con ella, toma el carácter subjetivo de posible, probable, hipotética, creída, deseada, temida o necesaria.

El subjuntivo se usa para expresar deseos, órdenes, posibilidad, opiniones, ambigüedad y para describir situaciones que no han ocurrido todavía. ¿Para qué se usa? El modo subjuntivo se usa para entender y expresar mejor lo que queremos decir.

Presente: El niño juega todos los días al fútbol. Pretérito perfecto simple: Ayer se corrió la última carrera del circuito. Pretérito imperfecto o copretérito: La calle estaba completamente vacía. Pretérito perfecto compuesto: Hemos tenido muchas dificultades para llegar hasta aquí.

Los verbos son aquellas palabras que expresan una acción, existencia o estado (de ser) en una oración. Son las palabras que nos dicen qué está haciendo el sujeto de una oración y funcionan como núcleo de la oración. De hecho, no puedes crear un pensamiento u oración completa sin usar un verbo.

Las formas no personales del verbo (también llamadas no conjugadas, no finitas, derivados verbales o verboides) se dividen en infinitivo (bailar), participio (bailado) y gerundio (bailando); estas carecen de flexión de persona, de tiempo, de modo y de número, con la excepción del participio en este último morfema ...

Para conjugar un verbo en presente de subjuntivo hay que eliminar las terminaciones de infinitivo (-ar, -er, -ir) y añadir -e, -es, -e, -emos, -éis, -en, a los verbos acabados en -ar y -a, -as, -a, -amos, -áis, -an a los verbos que acaben en -er/-ir.

El modo subjuntivo se utiliza para expresar duda, incertidumbre, subjetividad, posibilidad, hipótesis, etc. -Si hay certeza, se utiliza el modo indicativo: Mañana voy a nadar. -Si hay duda, se utiliza el subjuntivo: Pude que mañana vaya a nadar.

El pretérito imperfecto de subjuntivo se utiliza en las oraciones condicionales imaginarias o improbables. Estas oraciones imaginan un escenario en el presente o en el futuro y la condición que lo haría posible. Ejemplo: Si trabajara desde casa, viviría en una casita en el campo.

A la raíz del verbo se le añaden las terminaciones siguientes: -o, -as, -a, -amos, -áis, -an. A la raíz del verbo se le añaden las terminaciones siguientes: -o, -es, -e, -emos, -éis, -en. A la raíz del verbo se le añaden las terminaciones siguientes: -o, -es, -e, -imos, -ís, -en.