¿Cómo le dicen a los calamares en España?

Con el tiempo, la palabra "chipirón" se impuso en toda España, siempre para designar al calamar pequeño, hasta que, últimamente, a todo calamar se le llama indistintamente calamar o chipirón.

En España son conocidos como calamares fritos, calamares a la romana, rabas o calamares a la andaluza.

El término chipirón solo hace referencia a aquellos calamares de pequeño tamaño y ha acabado imponiéndose para referirse a estos moluscos jóvenes.

No hay diferencia, se trata del mismo animal, de la misma especie, solo que el calamar es de mayor tamaño que el chipirón. En ambos casos, calamar o chipirón, estamos hablando de un molusco cefalópodo alargado con dos tentáculos y ocho brazos.

Si observamos un calamar entero crudo, sus aletas forman un rombo que ocupan prácticamente la mitad del cuerpo del calamar. En cambio, la pota tiene las aletas de un tamaño bastante más pequeño y con forma de corazón. A nivel visual se distinguen también por el color.

La diferencia entre las rabas y los calamares es que las primeras tienen forma alargada y quedan mucho más crujientes que los calamares que tienen forma de círculo. No en vano, las rabas son las patas del calamar en sí, que se preparan rebozadas y posteriormente fritas.

En Madrid hacen sándwiches de rabas y los llaman bocadillos de calamares - Info Viajera.

España: Calamar, chipirón (Andalucía), chipirón (Asturias), calamar (Baleares, Cataluña, Valencia y Murcia), magano o ji- bión (Cantabria), lura (Galicia), calamars (Cataluña), txipirón (País Vasco), etcétera.

También llamado Jibión o Chipirón. Es un molusco cefalópodo, decápodo. Vive cerca del litoral, entre profundidades de 15 a 600 metros, prefiriendo aguas abiertas al ser un animal de movilidad permanente.

Pota o lura

Mucha gente confunde el calamar con la pota cuando no son lo mismo. La pota es más dura al morder y tiene un sabor más fuerte que el calamar. Económicamente hablando, es bastante más barata la pota que el calamar, por lo que se utiliza en muchas recetas como un sustituto perfecto.

Existen más de 300 especies distintas, entre las cuales si hablamos de los que puedes encontrar en tu plato los calamares más comunes son: el veteado-loligo forbesi, el calamar patagónico- loligo gahi y el calamar pálido-loligo pealei.

El calamar es el cefalópodo más consumido en nuestro país y el calamar de potera es sin lugar a dudas el de mejor calidad, ya que se pesca a anzuelo y en su época de apareamiento, lo que hace que su textura se transforme y sea mucho más sabroso.

Las propiedades nutricionales de ambos son similares. Son bajos en calorías, su contenido en grasa es inapreciable y tienen bastantes proteínas. Además, la sepia tiene propiedades saludables al contener vitaminas B3, B12 y E; mientras, el calamar las tiene por su contenido en vitaminas A, B3 y B12.

El calamar tiene un sabor más suave y mucho más dulce además su textura es mucho más tierna. Por el contrario la pota tiene una textura más dura y su sabor es más intenso.

La pota es mucho más barata y esto se debe a que su sabor y textura no están tan valorados como los del calamar. Desde el punto de vista de la nutrición, estos dos animales también son similares.

Son dos moluscos muy similares, bajos en grasas, altos en proteínas y con un contenido en hierro y vitaminas parecido. La diferencia está en el sabor: la pota tiene una textura más basta que el calamar, de ahí que su precio sea más bajo.

El Calamar de Potera recibe este nombre por el arte de pesca que se utiliza. La potera es un arte de pesca tradicional, donde los calamares (moluscos) se cogen uno a uno por los tentáculos y cuando suben a bordo de la embarcación están vivos.

Según algunos diccionarios, el rejo es un tentáculo de los moluscos cefalópodos, lo cuál es aplicable a calamares, pulpos y sepias. Por ello, los rejos son conocidos también como patas de calamar, aunque exactamente son potón del Pacífico.

El rejo, es como se denomina al tentáculo del calamar. El cual es muy similar a la pata de un pulpo, de hecho, podríamos decir que el rejo es la pata del calamar, la pota y el poton del pacifico.

Pero el origen del bocadillo de calamares, tan popular hoy, se remonta al siglo XVIII. En ese momento empezaba a haber demanda de pescado en la capital, especialmente durante la Cuaresma, una época en la que se imponía la privación de comer carne. Así, había que reemplazar la carne por pescado y otros alimentos.

Aunque es común la idea de asociar las rabas a los calamares, la realidad es que, en Cantabria, se le denomina raba a la tira, independientemente del cefalópodo del que proceda.

Los calamares fritos pueden prepararse de varias maneras y en España son un aperitivo de consumo habitual. Las rabas son las patas del calamar que se rebozan y se fríen posteriormente.

Los calamares de potera son considerados como lo más exquisito de los calamares. Son especialmente famosos en Barbate, Tarifa y Conil aunque es posible encontrarlos en restaurantes de prácticamente toda la provincia que saben que son muy apreciados por los clientes.

… Jibiones: conocidos, en otras localidades por calamar, chipirón y/o magano.

El calamar colosal (Mesonychoteuthis hamiltoni), también llamado cranquiluria antártica, es considerado la especie más grande de calamar, y el único miembro del género Mesonychoteuthis.

La pota se conoce también como calamar gigante, luras en Galicia o jibia en Latinoamérica, aunque la jibia en España es la sepia, que se llama choco en función de su tamaño.

¿Sabes que es la pota o potón? Se trata de un cefalópodo pescado en zonas costeras y con un tamaño mayor al calamar. Normalmente suelen confundirse con otros octopodos, pero tiene un sabor característico.