¿Cómo limpiar la plata con Fairy?

En muchos talleres de joyería utilizan lavavajillas líquido para lavar a mano (por ejemplo, Fairy). En un recipiente tendrás que verter agua tibia, colocar la joya que quieres limpiar y echar unas gotas de este detergente, removiendo para se disuelva.

Baño de inmersión Hagerty Silver para limpiar la plata

Si quieres optar por una limpieza profunda de tus piezas de plata, nada mejor que un baño de inmersión, pero esto no lo puedes hacer con cualquier producto. Este líquido está especialmente preparado para lograr una limpieza eficaz.

Añade una cucharada de sal a un recipiente con agua caliente y muévala para que se disuelva. En el fondo coloca unas tiras de papel de aluminio e introduce la plata que deseas limpiar en el fondo del recipiente y déjala unos minutos. Después enjuágalas con agua y sécalas con un trapo limpio con mucho cuidado.

Usa papel de aluminio con bicarbonato

Coloca papel de aluminio en el fondo de un recipiente, llénalo de agua hirviendo y echa dos cucharadas de bicarbonato (20 g). Sumerge los objetos de plata que quieras limpiar y remueve con una cuchara de madera. Enjuaga y seca con un trapo limpio para dar brillo.

Forra el interior de un recipiente con el papel de aluminio y luego llénalo con agua hirviendo con sal. Luego ya puedes sumergir en el líquido los objetos que desees y dejar actuar durante unos minutos. Después, deberás aclararlos y limpiarlos con agua limpia. Seca a continuación con un paño suave para sacarles brillo.

Limpiador liquido de joyería para oro y plata.

¡Se puede limpiar la plata con detergente para la ropa! De nuevo, en un recipiente con agua caliente, añadimos detergente para la ropa y movemos la mezcla hasta que se disuelva. A continuación, metemos la plata y la dejamos dentro durante unos minutos.

Cuando la plata se oscurece al los pocos días de comprar una pieza, no implica que sea de mala calidad, ni que se haya estropeado, es muy normal. Muchos cometemos el error de pensar que la plata se oxida. La plata no puede oxidarse, ya que no reacciona con el oxígeno del aire, sino con el azufre.

Alcohol

Para limpiar y deshacer la capa opaca que recubre tus objetos de plata necesitarás una cucharada de bicarbonato (10 g) y 1/4 de taza de vinagre blanco (62 ml). Vierte el vinagre en un recipiente y poco a poco, agrega el bicarbonato hasta que disuelva. Sumerge tus objetos y deja actuar. ¡Verás qué bien funciona!

Humedecer la bayeta en agua con jabón de ph neutro y frota la superficie que quieras limpiar. También puedes ayudarte de un bastoncillo de oídos para llegar a algunos rincones difíciles. Para todos estos procedimientos te aconsejamos utilizar también guantes desechables para proteger la plata y por supuesto, tu piel.

Es necesario usar papel de aluminio y cubrir un tazón pequeño con papel. Tras llenarlo con agua caliente se debe mezclar con una cucharada de bicarbonato de sodio. Después se deben colocar los complementos de plata en esta mezcla, dejarlas en remojo durante diez minutos y secarlas con un paño suave.

El uso del ácido nítrico es el método más rápido y uno muy eficaz. Consiste en raspar un poco la pieza con un piedra y luego aplicar unas gotas de este ácido. Si se torna de color blanco entonces podemos decir que es de plata. Se recomienda el uso de guantes de protección al manipular este ácido en casa.

Paso 1: Llena un recipiente con agua templada y añade una pequeña cantidad de jabón neutro. Paso 2: Sumerge el cepillo de dientes en la solución y frota delicadamente la pulsera. Paso 3: Enjuaga cuidadosamente y seca meticulosamente utilizando un paño suave.

Con solo una gota de lejía sobre una pieza de plata es suficiente para saber si realmente es de plata de ley, ya que la lejía produce una reacción química en contacto con la plata que provoca que esta se “oxide” rápidamente tornándose en un color oscuro.

Llená un recipiente con agua tibia y echale un poco de detergente de platos para obtener agua jabonosa. Sumergí tus joyas de oro y dejalas en remojo durante 30 minutos para que la suciedad se vaya aflojando. Luego fregalas con un cepillito de cerdas blandas. Mientras más blandas, mejor.

Solución de tiourea al 5 por ciento en solución de ácido fosfórico al 8 por ciento v/v (Wharton 1989:4-5).

Líquido limpiador de oro y plata.

Para limpiar la plata, hay que echar una o dos cucharadas de bicarbonato en un recipiente e ir añadiendo poco a poco el vinagre. Removemos la mezcla hasta crear una pasta consistente. Luego, con la ayuda de un paño, vamos aplicando la solución en el objeto y frotamos bien todas las partes.

Sal y papel aluminio

Coloca papel aluminio en un recipiente, añade agua caliente, una cucharada de sal y una cucharada de bicarbonato de sodio. Sumerge la plata en la solución y deja reposar durante unos minutos. Verás cómo la suciedad se desprende.

Simplemente limpia la cadena. Algunas personas limpian sus joyas de plata con bicarbonato o con un cepillo de dientes, esta es una limpieza más para el día a día. Si vuestra cadena está realmente sucia lo mejor es llevarla a una joyería y os harán una buena limpieza.

La plata dividida finamente en contacto con peróxidos de hidrógeno puede estallar. En contacto con amoníaco puede originar compuestos explosivos en seco.

Añade un poco de sal. Calienta la olla hasta que hierva con esta solución de agua destilada, vinagre y sal. Coloca dentro de los artículos de plata y mantén todo dentro hasta que estén limpios. Sacar con cuidado cada uno de los objetivos (si es necesario utiliza unas pinzas) para aclararlos bien con agua.

Cómo limpiar plata con bicarbonato y agua caliente

Si frotamos la plata con un trapo o algodón que contenga unas gotas de aguarrás quedarán llenos de brillo. Es importante que se aclare con agua una vez limpios. Otra opción eficaz es utilizar pasta de dientes y frotarla por toda la pieza. Una vez hecho, se retira con agua y jabón y dejamos que se seque.

El vinagre de limpieza es un antical conocido es capaz de deshacerse de los restos de cal que suele obstruir los grifos, especialmente en zonas de agua dura.

Bicarbonato con limón

En un recipiente de aluminio, vierte agua caliente y bicarbonato. Coloca los objetos de plata a limpiar y déjalos en remojo unos 60 minutos. Pasado este tiempo, retira las piezas y aplícales un poco de zumo de limón. El sulfuro irá poniéndose verde hasta desaparecer.