¿Cómo limpiar los cristales y que queden brillantes?

Para un resultado deslumbrante puedes usar limpiador de cristales tipo Cristasol y mezclarlo con tres partes de vinagre y un chorro de zumo de limón. Rocíalo sobre las ventanas y espejos y frota con papel de periódico. Verás como tus cristales quedan más brillantes que nunca.

Limpia siempre de arriba a abajo.

Rocía el limpiacristales directamente o si lo prefieres en un paño o esponja. Para evitar que queden marcas en los cristales limpia el interior y el exterior con distintos movimientos: uno en vertical y el otro en horizontal.

Un remedio casero para devolver el brillo a la cristalería consiste en mezclar en un recipiente agua tibia con cinco cucharadas de vinagre blanco. Sumerge la copa y deja que la mezcla actúe durante una hora para que los ácidos del vinagre hagan su efecto. No te olvides de enjuagar bien para eliminar el olor.

Para quitar manchas en cristales opacos, mezcla una taza de agua caliente con 3 cucharadas de bicarbonato y revuelve. Con ayuda de un paño, limpia los cristales y las ventanas con esta solución y ya verás lo relucientes que quedarán. Recomendamos secar la superficie con un trapo de microfibras para un mejor resultado.

Como limpiar cristales con amoníaco

Diluye en un cubo medio vaso de amoníaco por cada vaso de agua. Coge papel de periódico y mójalo un poco en la mezcla. Aunque si eres de los que hacen las cosas BIEN, puedes hacerte la vida más cómoda metiendo la mezcla en un vaporizador, y usándolo a modo de limpiacristales.

Una forma sencilla de limpiar ventanas es llenar un balde con agua tibia y agregar unas cuantas gotas de detergente líquido común (no pongas demasiado para evitar que se formen rayas). Si usás una esponja o paño de microfibra, sumergilo en la solución de agua jabonosa y limpiá bien las ventanas, de arriba para abajo.

1. Utiliza una bayeta adecuada para limpiar los cristales. Para empezar, necesitas usar una bayeta adecuada. Las bayetas de microfibra son los más apropiados para la limpieza de cristales.

Mampara de cristal

Vierte en un cazo un poco de vinagre y antes de que hierva, sácalo y mételo en un bote con spray. Rocía ese contenido en la mampara y deja que actúe al menos cinco minutos. A continuación, con un paño húmedo, frota la mampara. Verás cómo las manchas de cal y el resto de suciedad desaparecen.

El vinagre de limpieza es un antical conocido es capaz de deshacerse de los restos de cal que suele obstruir los grifos, especialmente en zonas de agua dura.

Cómo quitar el blanco de los vasos del lavavajillas

Consiste en introducirlos en un barreño con agua tibia y vinagre blanco y dejar que la mezcla repose unas 3 horas. A continuación, tendrás que aclararlos usando agua tibia y un jabón detergente suave.

Usa periódico: otra forma de limpiar las ventanas sin rayarlas es usar papel de periódico viejo, nunca uses papel nuevo. El papel te permite limpiar sin preocuparte por rayar los cristales. Además, el periódico dejará una pequeña capa invisible para que tus vidrios sean más resistentes a las manchas.

Para limpiar la molesta gota seca, una buena opción es colocar bicarbonato de sodio espolvoreado en la superficie, cubrirlo con toallas de papel y mojar con agua caliente. Dejar reposar unos minutos y frotar con las mismas toallas para retirar el bicarbonato.

Añade en una pistola pulverizadora partes iguales de agua y vinagre. Pulveriza sobre la superficie de cristal que quieras limpiar y con la ayuda de una bayeta de microfibra (no deja rastros ni pelusa) limpia el cristal.

Una manera fácil de limpiarlo es rociando la zona con agua oxigenada. Dejas actuar unos minutos, frotas con una cepillo y enjuagas con agua. El agua oxigenada tiene el poder de devolverle el brillo a los cristales que han quedado opacos por efecto de la cal.

Necesitarás: 2 tazas de agua (½ litro), ½ taza de vinagre blanco (62 ml), 1 cucharadita de bicarbonato (5 g). Mezcla los ingredientes en un recipiente y con una esponja esparce la mezcla por el cristal. Deja actuar durante 5 minutos y limpia el cristal con agua.

Vinagre. Es un producto que, por sus ingredientes, puede eliminar toda la suciedad acumulada, proporcionando así un brillo y transparencia espectacular. Para logar esto tienes que mezclar medio litro de vinagre en 5 litros de agua. Después de aplicar la mezcla se puede enjuagar con agua simple.

Mezclá en un balde agua y detergente lavavajillas hasta lograr una solución jabonosa. Sumergí una esponja para cristales en la solución y pasala por el vidrio hasta cubrir toda la superficie. Luego limpiá con un escurridor de goma.

El jabón líquido es un limpiador eficaz, y perfecto para eliminar la suciedad del vidrio.

Un truco muy recomendado es esparcir el producto limpiacristales directamente en la bayeta en vez de en el cristal. De esta forma, ahorras producto y conseguirás humedecer la bayeta y tenerla manejable para poder limpiar cómodamente. No te olvides de escurrir la bayeta bajo el grifo cuando notes que está sucia.

Calcula una taza de vinagre por una taza de agua caliente. Añade una gota de lavavajillas o de detergente líquido y agita bien la mezcla. Luego, solo tienes que pulverizar la mampara por la parte exterior y por la parte interior y dejar que el líquido haga efecto durante unos 5 minutos.

CIF limpia el bronce, las superficies cromadas y los metales en general, dejándolos brillantes.

Vinagre blanco y Bicarbonato de Sodio

La mezcla de ambos ingredientes combinan sus propiedades para quitar las manchas de cal, eliminar el sarro y tiene un potente poder antifúngico.

Utilizar vinagre para la limpieza del hogar es muy sencillo y para hacerlo correctamente solo debes recordar que no es indicado para limpiar:

Las superficies de plástico y vidrio en la mayoría de los pequeños electrodomésticos de la cocina, como licuadoras, cafeteras y tostadoras, son seguras para limpiar con vinagre, pero debes evitar cualquier pieza de goma o metal que el vinagre pueda corroer.

Qué no limpiar con vinagre de limpieza

Algunos ejemplos son: Mármol y granito. Evita limpiar con vinagre las superficies de piedra natural debido a su alta concentración de ácido acético. El vinagre puede corroer estas superficies y dejar marcas permanentes.

Para mantener los vasos brillantes después de lavarlos en el lavavajillas, es aconsejable utilizar las pastillas de detergente Care+Protect all-in-one: se trata de detergentes especiales para lavavajillas con acción salina que pueden proteger incluso la vajilla más delicada.