¿Cómo nace el elefante para niños de preescolar?

El parto comienza cuando la madre elefante rompe aguas, pues el saco amniótico en el que se encuentra la cría se rompe, siendo expulsado al exterior todo el líquido que este contenía. Cuando la cría sale a través del conducto vaginal, la madre la limpia con ayuda de su trompa, soplando sobre ella y dándole calor.

Los elefantes son animales vivíparos placentarios, de forma que las crías se desarrollan en el vientre de su madre. La gestación de los elefantes es muy larga, de 22 meses, nada más y nada menos. Por lo general, las hembras paren de noche.

Se alimentan exclusivamente de leche materna durante tres meses. Y siguen mamando hasta cumplir diez años, aunque el nacimiento de nuevos hermanos puede adelantar el destete. La vida en la manada matriarcal es su escuela de vida. Las crías aprenden pautas de comportamiento y destrezas de otras madres y otras crías.

Los animales vivíparos son los que nacen del vientre de su madre, por ejemplo: nosotros los humanos, los delfines, las vacas, caballos, becerros, ballena, gato, jirafa, león, perro, elefante, conejo, etcétera.

Al nacer, los elefantes bebés ya pesan unos 90 kilogramos y miden un metro de alto. La mamás elefantes amamantan a sus crías durante cuatro años, y aunque éstos pueden comenzar a alimentarse de plantas con uno año, necesitan el valor nutritivo de la leche para crecer de manera óptima.

Y aunque los elefantes son originarios de África y Asia, tienen un importante significado cultural y simbólico alrededor del mundo.

El embarazo del elefante africano dura 22 meses y es el más largo de todos los mamíferos. “El bebé elefante nace muy completo y puede caminar distancias largas”, dice Thomas Hildebrandt, veterinario del Instituto Leibniz de Investigación de Zoológicos y Vida Silvestre de Alemania (Leibniz-IZW).

Tener un bebé elefante es un compromiso muy serio. El embarazo de las elefantas dura más que el del resto de mamíferos, casi 22 meses. Las elefantas suelen dar a luz una cría cada dos o cuatro años. Al nacer, los elefantes ya pesan unos 90 kilogramos y miden un metro de alto.

Un único elefante nace de una hembra una vez cada 4-5 años Permanecen años con la madre, y también pueden ser atendidos por otras hembras en el grupo.

Otros animales son ovovivíparos. Ocurre cuando el huevo se mantiene dentro del cuerpo de la hembra hasta el final del desarrollo embrionario. Es el caso de la serpiente cascabel, en el que una de las funciones del huevo es nutrir al embrión.

El Rinoceronte Entre cada parto pueden transcurrir entre dos años y medio y cinco años. La única cría resultante no se independiza hasta que tiene cerca de tres años.

La zarigüeya es un mamífero marsupial del continente americano. Es el animal con el período de gestación más corto del mundo, solo una semana y media.

Las especies de mayor inteligencia y vidas más longevas suelen tener embarazos largos, lo que les da un amplío periodo de tiempo para el desarrollo fetal. El elefante africano tiene el embarazo más largo, 22 meses.

El elefante es una especie de crecimiento lento; su periodo de gestación varía entre 19 y 21 meses. Se estima que en condiciones de vida óptimas, el intervalo entre dos crías es de unos cuatro años. Por otra parte, es un animal muy longevo. La elefanta suele tener la primera cría en torno a los 14 o 15 años de edad.

Osos, focas, roedores, nutrias, armadillos y osos hormigueros son capaces de detener sus embarazos.

La trompa de los elefantes, tapires y la de algún tipo de monos como es el mono narigudo, también es llamada probóscide.

Los elefantes pueden reconocer diferentes idiomas, reaccionar a los que conocen, diferenciar voces de hombres, mujeres y niños y además pueden comprender cuando una persona señala algo, cosa que muchos primates no hacen.

El elefante africano, que llega a los 4 metros de altura y puede superar los 6.000 kg de peso, es el más grande de los mamíferos terrestres. Vive en grupos que se mueven bajo la dirección de una hembra adulta, tanto en las sabanas como en las selvas de casi todo África en el sur del Sáhara.

Un elefante con la trompa hacia arriba se asocia con la atracción de la buena suerte y la energía positiva. Se cree que esta postura permite que la energía fluya de manera ascendente, llevando consigo bendiciones y fortuna. Por otro lado, un elefante con la trompa hacia abajo simboliza la protección y la estabilidad.

Según el tipo de alimentación, los mamíferos se clasifican en: herbívoros, es decir, los que se alimentan de plantas, como el caballo, la oveja o el elefante; carnívoros – que comen carne animal-, como los leones, los lobos y los osos; y omnívoros, que se nutren tanto de carne animal como de vegetales, como los humanos ...

“Cuando ellos (los elefantes) perciben cualquier tipo de peligro, lo primero que hacen es proteger a sus crías formando una especie de escudo protector. Este comportamiento también lo hacen cuando una hembra va a dar a luz”, comentó.

El bebé nace a través de la vagina de la mamá durante el parto. Cuando han pasado nueve meses también puede ser antes, y el bebé está listo para nacer, la mamá comienza a sentir contracciones, unos dolores que indican que está lista para el parto y que empujan al bebé hacia abajo.

Son animales mamíferos, exclusivamente herbívoros cuya característica principal –además del gran tamaño– es su larga trompa y sus enormes orejas. Se organizan en manadas de unos 20 miembros, miden casi 4 metros los ejemplares más grandes y pueden llegar a pesar más de 6.000 kilos.

Estos son algunos ejemplos de animales ovovivíparos:

El ovoviviparismo se presenta en muchos tiburones y otros peces, en algunos reptiles y en diversos animales invertebrados. Los tiburones y las serpientes son dos grupos entre los que se encuentran ejemplos de los tres modos de desarrollo temprano (gestación y nacimiento): ovíparo, ovovivíparo y vivíparo.

Entre la inmensa variedad de especies que comparten nuestro medioambiente, los animales vivíparos son los que se desarrollan en el vientre materno; los ovíparos lo hacen en un huevo que crece fuera del vientre; y ovovivíparos, en un huevo también, pero dentro del vientre de la madre.