¿Cómo pedir deseos a la vela?

Procedimiento: Visualiza tus deseos, mírate con esos deseos cumplidos, cómo se ve tu vida y lo feliz que te hacen. Una vez que los tengas claros, escríbelos sobre la vela, puedes tallarlas con la aguja o bien usar un marcador. Puedes escribirlos todos en una vela o usar una vela por deseo, dependerá de ti.

Colocación y encendido: coloque la vela sobre un platillo blanco sin dibujos y enciéndala en el día correspondiente al color superior. Visualice sus deseos conectados con la energía del color. Se enciende en días específicos de la semana según su color, siguiendo una tradición que potencia su efectividad.

Toma tu vela apagada entre tus manos y medita unos minutos con ella. Deja tu mente en blanco y sólo armoniza con el presente. Ahora sigue activar tu velita. Para esto, debes decir en voz alta tu intención, mantra o afirmación.

Toma tu vela entre tus manos y mentalmente consagra tu vela, puedes hacerlo a través de palabras sencillas como: “Yo consagro esta vela para……y tu propósito. Si te resulta extraño oírte diciendo estas palabras, hazlo mentalmente.

Amarillo: este color es usado para los deseos que tengan que ver con confianza o cuando se quiere persuadir a alguien.

Las 6 claves para escribir tus peticiones y conseguir el sí son:

Pedir al universo implica tener una intención clara y positiva. Puedes hacerlo a través de afirmaciones, visualizaciones o simplemente diciéndolo en voz alta. La clave es comunicar tu deseo con confianza y creer en lo que quieres. Recuerda que el universo responde a tus pensamientos y emociones predominantes.

No dejar velas encendidas en lugares con corrientes de aire, podrán producir mucho humo y no se consumirán de forma uniforme. Nunca situar las velas encendidas cerca o próximas a cortinas y otros materiales o elementos de decoración del hogar que puedan arder.

“El mejor horario para éso son las mañanas, porque están las mejores energías”, apuntó.

Las velas de intención se utilizan para manifestar tus deseos y anhelos más profundos. Cuando las enciendes, se iluminan tus intenciones y cuando meditas con ellas se abren portales a nuevas realidades, puentes de luz conectando el cielo con la tierra, es Luz que ilumina abriendo caminos.

Volviendo al norte de Europa, en Escocia y en el sur del País de Gales se ha documentado la tradición de que cuando moría un pobre se colocaba sobre su cuerpo un plato con sal y se clavaba sobre ésta un cerillo o bujía encendida con la creencia de que así se prevenía la mala suerte15.

Cuando quedan muchos residuos de cera, simboliza que hay bastantes energías negativas a nuestro alrededor y trabas en torno al deseo que pedimos. En general, cuando los residuos forman figuras simétricas representa un buen augurio. Pero, si son formas desagradables o burdas es un signo de mala suerte.

Pon la vela Abrecaminos sobre un platillo en el centro del altar o superficie que hayas destinado al ritual. Rodea la vela haciendo un círculo alrededor de la misma con sal gruesa. Si eres meditador habitual, siéntate en tu cojín y adopta la postura de meditación que mejor te parezca.

Las velas más poderosas para atraer el dinero

Para atraer la abundancia, uno de los colores más recomendados es el verde. ¿Por qué? Porque remite al color del billete del dólar. El color verde es un símbolo de crecimiento, esperanza y dinero, describe el sitio Esencia mística.

Llama de la vela se mueve mucho

Puede ser un recordatorio de que estás rodeado de energías superiores y que hay un mensaje o guía que debes prestar atención. Observa con atención y siéntete abierto a recibir mensajes sutiles o señales del universo.

Así, si este color es blanco, debemos prenderla un lunes; si es rojo, un martes; si es amarillo, un miércoles; si es azul, un jueves; si es violeta o morado, un viernes; si es verde, un sábado; y si es naranja, un domingo.

Al fuego, generalmente se le pide con otras intenciones, ya que es un elemento que aleja y que trae consigo el poder de sacar las cosas malas de tu vida, por eso si quieres comunicarte con él deberías: Encender una vela.

Frases para pedir al universo y atraer cosas positivas

Quema la hoja de laurel: Sujete la hoja de laurel con cuidado y acérquela a la llama de la vela. Mientras se quema, repita su deseo en voz alta o en su mente. Meditación: Cierre los ojos nuevamente y medite durante unos minutos, manteniendo la imagen de su deseo en tu mente.

Aquí tienes 8 consejos prácticos para comenzar:

¿Cuándo y cómo utilizar tu diario de manifestación?

Mantenga la actitud de concentración y pregunte a Dios qué es lo que realmente quiere y desea ver manifestado en su vida. No se presione, sea sincero consigo mismo. Escríbalo y reflexione acerca de lo que pide y las implicaciones que esto tiene. No piense tanto al hacerlo, dé rienda suelta a sus deseos de corazón.

Las velas ofrecen calidez, buen aroma y un ambiente acogedor a tu hogar. También se usan para darle un toque romántico y relajante a una habitación y son perfectas para regalar a alguien especial. Además, una vela, puede ayudarte en un momento de estrés y cambiar tu mood con solo encenderla.

De acuerdo al feng shui, la orientación de las velas en tu casa atrae diferentes energías dependiendo de dónde estén: Sur: Atraen el éxito, la fama, reducen la angustia y también la ansiedad. Este: Fomentan armonía y además logran energías curativas en caso de enfermedades.

El Feng Shui establece que debes ubicar las velas en la parte sur de la casa, si bien dependerá de cuáles son tus objetivos. Además, los mejores lugares para colocar las velas según esta técnica milenaria son las habitaciones de invitados, las zonas comunes o los rincones dedicados al descanso.

Vela Blanca

Aportan sensación de protección y ayudan a atraer las energías positivas aclarando cualquier emoción y/o pensamiento. Tiene un inmenso poder depurativo, proporciona mucha calma y bienestar, elimina toda energía negativa que pueda existir en el ambiente.

El sábado se enciende la vela verde, que está estrechamente relacionada con temas de salud. Por último, la vela naranja es la del domingo; atrae sabiduría, al igual que las velas amarillas o doradas.