¿Cómo planchar sin plancha con secador de pelo?

Con un secador Simplemente, humedece la prenda en su conjunto echando, además, unas gotas de agua extras allí donde estén los dobleces más marcados. Cuélgala y pasa el aire del secador a unos centímetros por toda la pieza. Hazlo a baja potencia para que el calor no resulte excesivo ni acabe dañando la ropa.

¿Cómo tener la ropa planchada sin plancha? El secador aporta un elemento fundamental para eliminar las arrugas de la ropa: el calor. Coge esa prenda que te quieres poner, cuélgala en una percha y pasa el aire del secador por toda la superficie, apuntando especialmente a las zonas en las que se concentren las arrugas.

El secador de pelo

Para este truco primero debés humedecer un poco las partes en las que encuentres la textura, luego, colgala en una percha o en algún lugar en el que no haya peligro de que se caiga la prenda y encendé tu secador en su máxima temperatura.

Plancha la ropa sin plancha usando cubos de hielo

¿Ya habías escuchado este truco para planchar la ropa sin plancha? Solamente debes arrojar un par de cubos de hielo a la secadora con tu ropa y poner el ciclo rápido por 15 a 20 minutos. El hielo se derretirá y creará un efecto de vapor que quitará las arrugas.

Sin salir del baño, otro truco sencillo es utilizar el secador. Como en el caso anterior, basta con humedecer las áreas más arrugadas y colgar la prenda de una percha. Después, dirige el calor del secador hacia esa zona a una distancia prudencial. Eso sí, hay que insistir hasta que desaparezcan las arrugas.

Calienta agua en una tetera y espera hasta que hierva. Sostén la parte arrugada a unos 30 centímetros de la salida del vapor de agua y verás cómo poco a poco van desapareciendo los pliegues. No pienses que es magia, se trata de reproducir el tradicional gesto de vaporizar la prenda con la plancha, pero sin ella.

Una de las formas más accesibles para desarrugar la ropa es aprovechar el vapor producido por el agua caliente en la ducha. Para ello, cuelga tu prenda en una percha cerca de la ducha mientras te duchas. El vapor generado por el agua caliente ayudará a suavizar las arrugas en la tela.

Por ello, el uso de un vaporizador es la mejor, y más segura, opción. Tan solo cuelga tu camisa de poliéster todavía algo húmeda y pasa el vaporizador, evitando el contacto directo con la tela: el flujo de vapor caliente quitará las arrugas y acabará de secar la prenda en tan solo unos minutos.

Cómo preparar la ropa para planchar menos

Separa la ropa

Cuando metas la ropa en la lavadora, sepárala. Y lo mismo si vas a usar la secadora. Pon por un lado los tejidos más ligeros y por otro los más pesados, como las toallas. Esto evitará que las prendas livianas se arruguen aún más.

MANGAS: Para planchar las mangas sin que queden rayas, extiéndela sobre la tabla, pasa las manos sobre ellas para estirarlas y desliza la plancha, desde los puños hacia los hombros, sin pasar por los bordes para que no queden marcas.

A pesar de que lo más común es encontrar precios por prenda o por kilo, hay algunos profesionales que prefieren establecer precios de plancha a domicilio por horas. En estas ocasiones, el precio suele oscilar entre $100 MXN/hora y $300 MXN/hora.

Utilizar el secador o la plancha del pelo.

Es el truco más fácil para quitar las arrugas de la ropa. Sólo tienes que colgar la prenda en cuestión en una percha y dirigir el calor a una zona arrugada. Para las marcas muy pronunciadas debes usar la plancha del pelo; será más efectiva que el secador.

Frota una barra de jabón a lo largo de la línea de la arruga y luego plancha. Emplea movimientos largos y uniformes con la plancha caliente para distribuir el calor uniformemente. Lava los pantalones de nuevo para ver si la arruga desapareció.

¿Cómo quitar las arrugas de las cortinas? Si tienes cortinas arrugadas, una posible solución es usar un rociador de agua y dejar que luego se sequen. Lo mismo que si estuvieras planchando la ropa, pero con las cortinas colgadas, así se adaptarán mejor a la forma en la que tienen que caer.

Por otro lado, también puedes aplicar un truco o remedio bien sencillo que consiste en colocar papel de aluminio sobre la tabla de planchar, luego colocas encima la prenda con el dobladillo marcado, y cubres este con un pañuelo que esté humedecido con agua y un poco de amoniaco.

Sólo tienes que hacer una mezcla de agua y unas gotas de suavizante. Pulveriza esta combinación sobre tu ropa antes de plancharla y verás como te resulta mucho más sencillo y, además, olerá estupendamente.

La lana, el tejido natural que no se plancha

La lana es un tejido orgánico, por lo que tiene una buena transpirabilidad y no necesita planchado, al tener una estructura muy firme.

El lino es una de las prendas que más se arruga, al igual que el algodón 100% o la seda. «Cuanta más fibra natural tiene una prenda, más tiende a arrugarse.

La sobrecarga de la lavadora hará que la ropa se mueva en una gran masa que aumentará la presión en el tambor, lo que contribuirá a la formación de arrugas en la ropa, especialmente a altas velocidades de centrifugado.

Planchar con agua

El agua también te puede servir para dejar tu ropa lisa y perfecta para su uso. Sólo tenés que rellenar un spray de agua y rociar la zona de la prenda llena de arrugas a una distancia de 30 centímetros. Cuando la ropa se seque, las arrugas deberían ser cosa del pasado.

Cómo planchar una camisa en sencillos pasos

Antes de empezar, debemos poner la plancha con agua destilada a máxima temperatura. Una vez tengamos la plancha caliente, lo primero que debemos planchar es el cuello y los puños de la camisa. Los plancharemos del revés para no dejar marcas.

Tres ideas para planchar cuando no hay luz en el hogar

Descubre cuál es el salario medio para Planchado

¿Cuánto gana un Planchado en España? El salario planchado promedio en España es de € 19.500 al año o € 10,00 por hora.

¿Cuáles son los precios de lavado o qué costo tiene el servicio de lavandería? El precio regular es de $55 pesos por kilo. El pedido mínimo para la recolección es de 5 kilos de ropa, es decir $275 pesos.

Pueden afectar al manto lipídico propio de la piel presentando escamas, piel seca o afectando por planos al conjunto de las capas que forman nuestra piel como puede ser escoriaciones, erosiones, maceración e incluso la ulceración(1).