¿Cómo regar el aguacate?

Un método simple, pero efectivo, para determinar cuándo es necesario el riego es realizando un pequeño agujero entre 15 y 20 centímetros bajo la copa. Después, se toma tierra del fondo y se aprieta con la mano, si se mantiene unida, hay humedad suficiente, si se desmorona, se debe regar.

En los días más cálidos del verano, se debe regar cada 7 ó 10 días y con un sistema de goteo, el árbol puede necesitar de 45 a 60 galones de agua por día dependiendo de la zona climática y de las características del suelo.

Se puede usan ambos sistemas de riego en aguacate, pero el más recomendado por Netafim es el goteo. El riego por goteo permite mantener una humedad óptima, uniforme y una excelente aireación, justo lo que requiere el árbol del aguacate.

2. Riégalo para que su tierra esté constantemente húmeda pero no empapada. Regar bien tus plantas para que no se ahoguen es fundamental, recuerda que siempre debes esperar a que la tierra se sienta seca al tocarla antes de ponerle más agua. Esto sucederá aproximadamente dos veces a la semana.

Cuando se parte de cero, desde la semilla, es necesario saber que el aguacate puede tardar entre 5 y 10 años en madurar. En el caso de los árboles jóvenes cultivados por injerto, fórmula que se utiliza para que produzcan más frutos, suelen pasar unos 4 años hasta tener los primeros aguacates.

Las naranjas, cuyo cultivo domina el levante y parte del sur peninsular, necesitan algo menos que los aguacates: 560 litros por kilo.

Lo que buscamos en el aguacate es una copa amplia ramificada, evitando que el árbol crezca demasiado en altura, lo que dificultaría su cuidado y cosechado. La primera poda debe realizarse cuando el árbol tiene una altura de unos 80 cm.

Si en el lugar donde está la maceta del árbol de aguacate hace mucho frío lo mejor será que lo lleves dentro del interior de un invernadero (en caso de tener uno) o dentro del hogar cerca de una ventana. Si por el contrario estas en un clima fresco y suave no es necesario que muevas el árbol de lugar.

El riego por goteo está en el número uno de la lista. Para quienes no conozcan muy bien su funcionamiento, se trata de un sistema que cuenta con un conjunto de tubos interconectados que disponen de pequeños orificios y se sitúan justo al pie de las plantas.

Las raíces del aguacate poseen un sistema de raíces pivotantes, raíces secundarias superficiales qué absorben el agua con los nutrientes necesarios para su crecimiento, se debe tener en cuenta que el crecimiento de las raíces del aguacate ocurre en forma de flujos y pueden presentarse varios durante el año (Salazar- ...

El cultivo de aguacate necesita de una buena exposición a la luz solar. Por esta razón, toma en cuenta que la poda permita que los rayos del sol alcancen el interior de la copa. Solo las ramas principales y el tronco deberán permanecer sombreadas.

Una planta de aguacate puede llegar a tener hasta un millón de flores. Y de mil flores solo se alcanzan a cosechar el 0,02% de estas ya convertidas a fruto. La floración en la España penisular se produce en los meses de marzo-abril, mientras que en Canarias se producen varias floraciones.

El árbol de aguacate los puedes plantar al aire libre sin preocupaciones en climas donde no hay heladas, pero elije un lugar protegido de las ráfagas de viento. Los aguacates son árboles de raíces poco profundas a los que no les gusta que los molesten, así que busca un lugar y manténlo allí.

Caída de las hojas

Tanto en el caso de exceso de riego como en el de falta de riego, las hojas se caen. La caída prematura de las hojas jóvenes y viejas, así como la falta de apertura de los brotes, es una indicación de que hay demasiada agua.

Una nutrición balanceada en potasio y Nitrógeno acompañada de micronutrientes importantes como Zinc, Boro y manganeso ayudan a tener una mejor floración desde la formación de meristemos hasta el cuaje y amarre de flores a frutos.

La temperatura para el desarrollo normal del cultivo oscila entre los 17 a 24 °C, donde a una temperatura de 20 °C la planta alcanza su óptimo desarrollo. Asimismo, el árbol de aguacate requiere de 10 °C a 17 °C como temperatura mínima y de 28 °C a 33 °C como máxima para el amarre de frutos.

Se necesitan alrededor de 8 años para que un nuevo árbol de aguacate se convierta en un árbol adulto completamente productivo. Un árbol adulto produce alrededor de 80-100 kg de fruta por año.

La mejor forma de regar tu planta de aguacate es mediante riego por goteo y a menudo. En verano cada día de 30 a 45 minutos. Cuidado con el exceso de agua. Aunque el árbol de aguacate es un árbol tropical, no tolera bien los encharcamientos y agua en exceso.

Sandía. La sandía es la fruta que mayor cantidad de agua tiene, nada más y nada menos que el 92% de su composición es agua. A primera vista, y si alguna vez has probado alguna, se puede observar que tiene mucha agua, así que no es ninguna sorpresa que sea la que más tiene.

Dado que la producción por hectárea de aguacate es aproximadamente de 8.000 kilos por año, esto quiere decir que se necesitan aproximadamente 1.000 litros de agua para cada kilo de aguacate.

Como podar correctamente el Aguacate Hass

Cortando todos los chupones, que son las ramas macho. Estas tienden a crecer en vertical y son ramas poco productivas. Las ramas que tenemos que dejar son las ramas falderas y las que tienden a crecer en horizontal.

La mejor temporada para plantar aguacates es la primavera, antes de que llegue el verano.

La poda en verde o poda de renovación se puede realizar en cualquier época, aunque se aconseja llevarla a cabo a finales de agosto aprovechando la escasa actividad vegetativa del árbol. El objetivo es controlar el crecimiento de los chupones, eliminando aquellos que no son aprovechables para el aguacatero.

Una práctica común es aplicar fósforo en la temprana primavera. No obstante, una carga particularmente grande de frutos puede en manera importante reducir el contenido de fósforo foliar durante la temporada. En esa situación, aplicaciones foliares de fósforo pueden mantener un buen crecimiento de los frutos.

Los periodos de calor y sequía pueden provocar la caída de los frutos, especialmente en las variedades de montaña. Los sitios demasiado húmedos no son apropiados, por la mayor posibilidad de ocurrencia de ciertas enfermedades del suelo, a las cuales la especie es altamente susceptible.