¿Cómo saber si mi pisada es correcta?

Descalzo y con los pies un poco separados, flexione las piernas tres veces. Si en la última flexión las rodillas están pegadas, usted tiene una pisada tipo pronador. Si no se pegan, pero están muy próximas, su pisada es neutra. Y si las rodillas terminan muy separadas, su pisada es tipo supinador.

Mirar los pies por detrás para observar si el tobillo se mete hacia dentro, si tenemos el pie plano o con puente, si hay alineación con la tibia, etc. Puede ayudarnos a saber si caminamos bien.

Desde la vertical, observa la inclinación natural de tus pies. Si ves que basculan ligeramente hacia adentro, podrías tener pisada pronadora. Por el contrario, si tienden a inclinarse hacia afuera, es probable que tengas pisada supinadora.

Neutra: Es la mejor pisada. Las piernas, al caminar, realizan el movimiento de forma recta, por lo que las lesiones se reducen de manera considerable.

En la mayoría de las ocasiones se puede solucionar a través de plantillas independientes que corrijan ese exceso de presión en determinadas zonas. Las plantillas deben ser diseñadas por podólogos profesionales después de practicar un estudio de la pisada, a esta práctica se le conoce como Estudio biomecánico del pie.

El médico ideal para realizar esta valoración y si hay alguna alteración indicar el tipo de calzado e incluso plantillas, de ser necesario es Médico Ortopedista. Puede ser un Ortopedista, Podólogo o un fisioterapeuta.

El análisis de la pisada o estudio de la pisada también llamado estudio biomecánico de la marcha es una evaluación que tiene como objetivo conocer cómo se encuentra una persona de forma estática (de pie), y cómo y dónde reparte sus fuerzas de forma dinámica (caminando y/o corriendo).

La imagen no puede ser más explícita. Se aprecia claramente cómo las zapatillas están totalmente giradas hacia dentro, y con el desboque normal de cuando unas zapatillas neutras son usadas por un pronador sin ser las adecuadas, quedan como agrandadas. Es la consecuencia de estar rotando constantemente el tobillo.

Un podólogo deportivo puede prescribirte unas plantillas que te acompañarán durante algunas semanas o meses. El cuerpo necesita al menos 3 semanas para poder adaptarse a nivel fisiológico. Tras un período de tiempo, podrás retirar las plantillas de forma progresiva, al mismo tiempo que fortaleces los músculos del pie.

La pisada pronadora (pie en valgo) es un término que se utiliza para referirse a la pisada que incluye el mayor contacto de la parte interna del pie con el suelo. Es decir, el tobillo se mantiene hacia afuera y la bóveda tiende a disminuir debido a la desviación de la pisada.

El tipo de pisada de pronador es la más común entre los corredores, aunque hay que vigilar para que no se convierta en un problema y se produzca una sobrepronación.

Una mala pisada puede provocar la sobrecarga de los tobillos, así como de otras zonas del cuerpo, como las caderas, las rodillas y la espalda. El uso continuo de tacones altos, o zapatos demasiado planos, también perjudica la salud de los tobillos. Esto provoca hinchazón en la zona, dolor y cansancio articular.

Entre un 50 y un 60 % de los corredores padece sobrepronación. Supinador: Suele correr con las piernas separadas y apoya la parte exterior del pie. Son muy poco frecuentes ya que solo el 10% del total de corredores son supinadores.

¿Qué es la pisada pronadora? Este tipo de pisada se identifica cuando “se pisa hacia adentro”, ya que es normal que se apoye primero el talón y después el pie gire (ya en el suelo) hacia la parte interna del pie.

El tratamiento inicial para la pisada supinadora (pie en varo) debe ser dictado por un especialista del pie y puede consistir en lo siguiente: ◉ Plantillas ortopédicas especializadas. ◉ Ejercicios para entrenar la marcha. ◉ Ejercicios de fortalecimiento de los músculos supinadores.

El pie supinador y sus afectaciones pueden ser reducidos mediante la aplicación de ejercicios orientados a fortalecer los tejidos distendidos, disminuir la tensión muscular, estiramientos para tratar el acortamiento de los músculos, uso de calzado adecuado, así como plantillas y actividades.

¿Qué cuesta el estudio de la pisada? El precio del estudio biomecánico de la pisada es de 25,00 €, pero si compras calzado te saldría GRATUITO.

ESTUDIO DE LA PISADA? El estudio biomecánico de la pisada tiene un precio aproximado de 50 euros.

No obstante, de forma general, el estudio biomecánico de la pisada precio puede ir de los 100 a los 150 euros. En algunos lugares, incluyen dentro de este coste la fabricación de plantillas especiales. Esto es algo que te recomendamos seguir en caso de que ya padezcas un tipo de pisada específica desde hace tiempo.

Una cierta cojera o un desgaste extraño de las suelas de los zapatos pueden ser señales de que algo no va bien y, por tanto, será muy recomendable hacerse un estudio de la pisada.

El análisis de las pisadas y de las huellas de zapato es una especialidad de las ciencias forenses. Las pisadas pueden también permitir al detective deducir la altura aproximada por el tamaño del zapato. El zapato tiende a medir aproximadamente el 15% de la estatura de la persona.

Guía de desgaste

Desgaste de los pronadores: Se encuentra sobre todo cerca del dedo gordo, en el interior del talón y debajo de la bola del pie.

Un zapato neutro tendrá más flexibilidad en general, especialmente en el talón, y generalmente será más liviano . Los zapatos de estabilidad pueden sentirse diferentes debido al peso adicional y tienden a tener un ajuste más restrictivo porque están diseñados para corregir su forma de andar cuando camina.

La pisada supinadora es aquella en la que el corredor, o deportista, distribuye la mayoría del peso del cuerpo sobre el exterior del pie, provocando una separación perceptible de las piernas. Este tipo de pisada se da en una minoría de corredores, en torno a un 10%.

Para mejorar la pronación, las personas con pies planos o arcos altos pueden necesitar usar un dispositivo ortopédico o elegir un zapato con más amortiguación. Además, los ejercicios de estiramiento y fortalecimiento de los músculos que rodean el tobillo pueden ayudar a mejorar la pronación.

Los zapatos y las plantillas de buena calidad pueden ayudar a controlar la sobrepronación . Podrías considerar hacerte un análisis de la marcha para determinar exactamente cómo te mueves cuando caminas o corres.

La pronación es un movimiento normal del pie cuando éste gira o se inclina hacia adentro . Este movimiento ocurre poco después de que el pie entra en contacto con el suelo y hace que los músculos se relajen y las articulaciones se aflojen. Tiene que suceder para que tu pie se adapte a diferentes terrenos y para absorber los impactos.