¿Cómo saber si un carro es de alquiler?

La clave está en el historial de propietarios y usos del vehículo, donde los coches de alquiler tienen marcadas tres siglas que determinan su pasado: A.S.C, que significa 'Alquiler Sin Conductor'. Si aparecen estas tres siglas en la ficha técnica del coche, significa que es un vehículo de una empresa de alquiler.

El alquiler de automóviles es un contrato por un período de tiempo determinado a una cantidad acordada de dinero para la renta. Una agencia de alquiler de coches, rent-a-car o car hire es una compañía que ofrece automóviles de alquiler para cortos o largos períodos de tiempo.

En consecuencia, el propietario del bien objeto del renting es la compañía de renting, quien recuperará la posesión del bien al termino del contrato, salvo que se llegue a un acuerdo respecto de la compraventa del bien.

El cliente no compra el coche, sino que lo alquila por periodos de tiempo que van de dos a cinco años. A cambio, cada mes va pagando unas cuotas mensuales cuya cuantía varía en función del modelo de vehículo, que lo habitual es que sea de gama alta.

Se conoce con las siglas R.A.C. al club británico del automóvil, cuya denominación exacta es el 'Royal Automobil Club', fundado en 1897.

Si no fuera el caso o se quiere comprobar si el coche estuvo en alquiler o no, siempre tiene que constar en Tráfico, donde se almacena el historial del vehículo. Si el coche reza como ASC, significaría que era un coche destinado al Alquiler Sin Conductor (en inglés sería un RAC, por Rent A Car).

En caso de que cometas una infracción de tráfico, aunque la matrícula esté registrada a nombre de la compañía de alquiler, será el arrendatario en caso de multa quién deba abonar la cantidad obligada o hacerte cargo de la sanción.

¿Qué es la franquicia? Esta se define como el importe máximo que tendrás que pagar en el caso de que el vehículo haya sufrido daños o averías importantes. Funciona de la siguiente manera: Se tiene que hacer frente a ella en caso de que el coche haya sufrido daños o desperfectos.

El alquiler sin conductor nos permite conducir el vehículo, sin embargo, nos hace responsables de lo que pudiera suceder durante el trayecto con el coche de alquiler. En este tipo de servicio de alquiler de vehículos es muy importante disponer de un seguro que cubra cualquier eventualidad que pudiera suceder.

¿Qué tipos de renting existen?

La principal diferencia entre el renting y el alquiler de coches es la duración del contrato. Con la primera opción, es posible reservar un vehículo incluso desde un par de horas hasta incluso un mes. Sin embargo, el de renting puede extenderse desde los dos hasta los cinco años. ¿Es necesario pagar una fianza?

¿Cuál es la duración de los contratos de renting? Los contratos de renting estándar suelen ser de entre 36 y 60 meses. Existen también contratos de renting más flexibles donde puedes usar un coche sin ningún tipo de atadura, aunque eso repercute en un aumento de la cuota del vehículo.

El límite depende de cada empresa de alquiler. Puede variar entre los 30 km y los 400 km al día. Para saber cuántos kilómetros incluye tu reserva, consulta los Términos y condiciones antes de viajar. Deberías poder ver esta información antes y después de hacer tu reserva online.

¿De qué cantidad estamos hablando? El depósito por un vehículo de alquiler puede oscilar entre los 600 y los 3.500 euros, o incluso más en algunos casos. La cantidad puede depender de la compañía, el tipo de vehículo o el país en el que desarrolle el alquiler.

La cilindrada de un auto puede ser una referencia sobre las prestaciones del motor, en lo que se refiere a su potencia, torque y consumo. Eso sí no es lineal; es decir, no siempre un auto 1.6 va a ser más ágil o veloz que uno 1.0 litros; la diferencia puede estar en la relación peso/potencia y en el caballaje en sí.

Son coches nuevos sin matricular que el concesionario tiene adquiridos y a los que desea dar salida cuanto antes. El comprador debe amoldarse al motor, carrocería y a un determinado equipamiento, y ha cambio obtiene un coche nuevo pero con un gran descuento.

¿Mi primo puede conducir el coche que yo he alquilado? No, solo tiene la posibilidad de conducir el coche la persona que lo ha alquilado, sin embargo, se puede pagar un cargo extra por un conductor adicional.

Cuando alquilamos un vehículo nos puede surgir la duda de quién se hace cargo de la multa si se da el caso. La respuesta rápida es que debe pagarla quien es responsable de la infracción.

Las agencias de alquiler de coches no se hacen responsables de las sanciones y, además, pueden cobrar un recargo por la gestión.

¿Qué significa la franquicia en un seguro? La franquicia es la cantidad de dinero que un asegurado asume en caso de siniestro. En función de la aseguradora y las condiciones firmadas en la póliza, esta cuantía aumentará o disminuirá.

La cantidad concreta es la que marcará la franquicia. A modo de ejemplo, una franquicia de 150 euros implica que tú pagarás de tu bolsillo los primeros 150 euros de la reparación. El resto, en caso de superarse esa cifra, correrá a cargo de la aseguradora.

El cliente solo debe pagar la franquicia cuando sea el responsable de un siniestro o cuando, sin serlo, no exista un tercero al que reclamar. Por ejemplo: si tengo contratada una franquicia de 150€ y me doy un golpe contra una columna, deberé abonar esa cantidad y la aseguradora el resto de la reparación.

Actualmente, la mayoría de las compañías de alquiler sólo aceptan un método de pago y es la tarjeta de crédito. Este medio de pago es tan común, debido a que una tarjeta de crédito también sirve como garantía para la empresa de alquiler de coches.

Uno de los requisitos más comunes para alquilar un coche es el tipo de tarjeta que uses para recoger el vehículo. La mayoría de compañías de alquiler piden una tarjeta de crédito, cuyo titular debe ser el conductor principal de la reserva, para poder recoger el coche de alquiler sin problemas.

El renting es una operación por la que realizamos un pago por el uso temporal de un bien. Su principal diferencia con el alquiler es el tiempo de utilización, ya que puede contemplar el uso puntual del bien durante varios meses hasta un renting de larga duración de hasta cuatro años.