¿Cómo saber si una empresa está generando valor?

El proceso de cálculo del valor contable de una empresa es bastante simple, solo es necesario tomar el saldo total de los activos de la empresa y restar los pasivos. Una vez que se conoce el valor contable se puede determinar el valor de cada acción o participación.

Una empresa crea valor, si el retorno sobre la inversión es mayor que el costo de capital, si por el contrario el retorno de la inversión es menor que el costo de capital, se destruye valor.

La medición de la creación de valor en una empresa tiene como punto de partida tres conceptos básicos: capital empleado, costo de capital y utilidad neta de operación después de impuestos.

Una forma común de valorar una empresa privada es utilizar el flujo de caja descontado (DCF) o un análisis de empresa comparable (CCA) y tener en cuenta factores como el desempeño financiero, las perspectivas de crecimiento, la dinámica de la industria y los factores de riesgo.

Uno de los principales causantes de la falta de valor es la sobreproducción, que puede resultar en exceso de inventario y mayores costos de almacenamiento. Además, los defectos en la producción generan retrabajos, aumentando tanto los costos como el tiempo dedicado a corregir errores.

Es una forma de calcular el beneficio residual o rentabilidad neta, que deduce el coste de todos los recursos empleados del beneficio operativo generado por el negocio.

os indicadores de valor desempeñan un papel fundamental en una empresa por varias razones importantes: Toma de decisiones estratégicas: Los indicadores de valor proporcionan información clave que ayuda a los propietarios y gerentes a tomar decisiones estratégicas fundamentadas.

5 estrategias para generar valor en las empresas

Análisis de empresas comparables

El método de valoración “comps” proporciona un valor observable para el negocio, basado en lo que valen actualmente otras empresas comparables. Comps es el enfoque más utilizado, ya que los múltiplos son fáciles de calcular y siempre están actualizados.

Cómo prepararse para la valoración de una pequeña empresa

Compilando todos los datos de transacciones de empresas publicadas vemos que en torno al 90% de las operaciones caen dentro de un rango de 4 – 6 veces el EBITDA. Si los beneficios de tu empresa son bastante estables, ese rango te puede dar una idea razonable de valor.

Crear un negocio rentable es un proceso gradual. En promedio, las empresas tardan entre dos y tres años en volverse rentables. Sin embargo, muchos factores determinan la rentabilidad: mientras que algunas pequeñas empresas fracasan durante el primer año, otras con bajos costos iniciales pueden incluso ser rentables durante el primer año.

Las señales de que una empresa está fracasando incluyen niveles bajos o falta de efectivo, incapacidad para pagar los préstamos a tiempo, incapacidad para pagar a los proveedores a tiempo, clientes que pagan tarde, pérdida de clientela y una estrategia comercial poco clara.

En el valor del negocio se incluyen aspectos como los activos de la empresa, el patrimonio, la capacidad de crecimiento y de generar valor para el mercado, entre otros. Los aspectos a incorporar, así como la preponderancia que se le dé a cada uno, dependerá del método de valoración que se utilice.

Para medir la confianza en la marca, las preguntas están relacionadas con la satisfacción del cliente, la imagen de la marca (por ejemplo, el empaque y los logotipos), el uso del producto, las comparaciones con la competencia así como para conocer la opinión en general.

El EVA es una medida absoluta de desempeño organizacional que permite apreciar la creación de valor; al ser implementada en una organización hace que los administradores actúen como propietarios y además permite medir la calidad de las decisiones gerenciales.

Generar valor es el método a través del cual una compañía acrecienta sus utilidades en un período de tiempo; tiene que ver con la imagen pública de la empresa, la percepción que los consumidores tienen de la misma y la efectividad de sus productos y servicios.

En conclusión, existen varios tipos de indicadores utilizados en el seguimiento y la evaluación, incluidos indicadores de insumos, productos, resultados, impacto, eficiencia, eficacia y sostenibilidad .

A continuación, se exponen los principales tipos de indicadores de proceso que pueden adoptar las empresas:

A las empresas les interesa medir muchos aspectos: sus resultados económicos, su rendimiento, sus beneficios, sus pérdidas, entre otras muchas variables. Un aspecto importante y que a día de hoy empieza a medirse por parte de las organizaciones es la productividad y el desempeño de sus empleados.

Una propuesta de valor es la promesa de valor que un cliente espera recibir por parte de una empresa. Es más que una simple descripción del producto o servicio: es la solución específica que tu empresa brinda a un cliente, y que un competidor no puede ofrecer.

Los valores fundamentales de la empresa son los principios que guían y, a menudo, impulsan la misión y los objetivos de una organización . Guían acciones y comportamientos cruciales, como la forma en que se toman las decisiones comerciales y se forman relaciones exitosas. Informan la cultura de la empresa, las prácticas de contratación y la ideación de productos.

Respuesta: La fórmula para calcular el patrimonio neto de una empresa es identificar la cantidad de activos financieros que posee la empresa. El valor total neto se calcula restando el activo del pasivo. Como resultado, la fórmula es: Activos menos pasivos es igual al patrimonio neto .

La razón por la que estas cuestiones son importantes es que el EBITDA elimina los gastos reales en los que una empresa realmente debe gastar capital (por ejemplo, gastos por intereses, impuestos, depreciación y amortización). Como resultado, utilizar el EBITDA como métrica de rentabilidad independiente puede resultar engañoso, especialmente para empresas con uso intensivo de capital.

Múltiplos comunes

Empresas de servicios: 1,5 a 3,0 (es decir, flujo de caja x 1,5-3,0 múltiplo) Empresas de alimentos: 1,5 a 3,0 (es decir, flujo de caja x 1,5-3,0 múltiplo) Empresas manufactureras: 3,0 a 5,0+ (es decir, flujo de caja x 3,0-5,0 + múltiplo) Negocios mayoristas: 2,0 a 4,0 (es decir, flujo de caja x 2,0-4,0 múltiplo)

Estas empresas privadas suelen valorarse en función de la última ronda de financiación o mediante el uso de DCF (flujo de caja descontado). Por ejemplo, una empresa privada estaría valorada en 7 veces su EBITDA y, por lo tanto, si su EBITDA LTM ​​es de 50 millones de dólares, entonces el valor de la empresa sería de 350 millones de dólares.

La conclusión es que tener un conocimiento profundo de su mercado objetivo y de sus clientes, desarrollar un plan de marketing eficaz y administrar las finanzas son sólo algunas de las cosas que los propietarios de pequeñas empresas deben saber para tener éxito en sus esfuerzos.