¿Cómo se congelan las cigalas?

Congelar langostinos, camarones y cigalas Los envolvemos en un film ajustado o en una bolsa con cierre hermético. Para terminar, es importante tener en cuenta que para degustar los mariscos congelados en óptimas condiciones, recomendamos no conservar los productos más de tres meses.

«Se recomienda envolver el marisco en un paño empapado con el mismo agua de la cocción y después cubrirlo en papel film o meterlo en una bolsa de congelación», explica la nutricionista.

Gambas, langostinos, cigalas, carabineros, camarones…

El resto, puede congelarse indistintamente crudo o cocinado, pero como comentábamos, si se desea disfrutar del marisco a la plancha o con una cocción similar, habrá que congelarlos crudos.

Hay especialistas que consideran que, de hecho, es mejor congelar las almejas luego de cocinarlas, ya que así mantienen su sabor por más tiempo.

Cuando estén cocidas y antes de entrar el arcón, hay que poner en práctica el primer truco: se debe empapar un paño de cocina con el agua de la cocción y envolver con él al animal. Después todo se enrolla con papel film y de ahí al congelador, siempre con las patas arriba para que los jugos no salgan.

Los langostinos, gambas y cigalas podríamos meterlos en el mismo grupo de mariscos, siendo el tiempo máximo de congelación de estos crustáceos 3 meses.

Una vez comience a hervir el agua, añadiremos las cigalas y en cuanto comience a hervir de nuevo, dejaremos cocer unos 3 minutos aproximadamente para retirarlas. Para terminar, colocaremos las cigalas en un bol con agua fría y hielo durante un minuto para que así su carne quede tersa.

En caso de que decidas congelar estos mariscos se deben realizar cocidoss. Primero, una vez muerta, se cuece y se deja enfriar. Una vez a temperatura ambiente, se envuelve en un paño humedecido con el agua de la cocción (o agua marina) y se envuelve de nuevo en film transparente, o se guarda en una bolsa al vacío.

El marisco sólo debe descongelarse si se va a cocinar a la plancha o al horno. Para cocerlo en agua o al vapor, es mejor hacerlo con el producto directamente congelado. Para descongelar el marisco crudo con cáscara (gambón, cigala,..) la mejor opción es sumergirlo en agua fría unos minutos, justo antes de cocinarlo.

En general, el marisco congelado bien almacenado puede durar de 3 a 6 meses, y algunos productos incluso hasta un año, manteniendo un nivel aceptable de calidad.

Los bivalvos, tales como berberechos, almejas, navajas y longueirones los debemos congelar crudos, envueltos en un film bien apretado, o si disponemos de máquina, los podremos envasar al vacío antes de meterlos en el congelador.

Ponemos las almejas en un bol y las cubrimos con el agua con gas. Las dejamos en remojo entre 45 minutos y 1 hora. Veremos cómo se abren y sueltan la arena.

Mete los mejillones cocidos en un envase que pueda sellarse herméticamente, ya sea tipo fiambrera o una bolsa para congelar con cierre o zip. También puedes congelar el jugo de los mejillones en una cubitera para hielo para que lo puedas dosificar cuando quieras consumirlo.

Es importante saber cómo conservar el marisco cocido en la nevera. Tras la cocción se deben envolver en un paño húmedo o papel apto para uso alimentario y guardar en un recipiente hermético. Si necesitas congelarlos, usa papel film para envolverlos.

El pescado fresco y el marisco crudo aguantan sin problemas dos días en la nevera una vez comprado. Si piensas que no lo vas a cocinar en ese tiempo, será mejor que lo congeles para disfrutar de todo su sabor y sus propiedades.

Si ya has cocinado el pescado o el marisco, pueden aguantar en la nevera perfectamente hasta tres días si lo almacenas en un recipiente hermético.

El tiempo de cocer cigalas frescas o congeladas si son de tamaño mediano suelen ser unos 3 minutos aproximadamente. El tiempo de cocer cigalas congeladas o frescas si son de tamaño grande puede ser de 4 o 5 minutos.

Hay que prestar especial atención a las cigalas, que es un marisco muy delicado y para su conservación es mejor hacerlo en un recipiente con agua y mucho hielo, ya que este producto pierde muy rápidamente sus propiedades si no lo conservamos bien.

Cigalas: 4-5 piezas por persona del tamaño 11-15 piezas/kg. Si es para hacer un arroz, 3-4 piezas por persona del tamaño 16-20 piezas/kg.

Cigalas: 4-5 piezas por persona del tamaño 11-15 piezas/kg. Si es para hacer un arroz, 3-4 piezas por persona del tamaño 16-20 piezas/kg.

Si las cigalas se encuentran vivas, debemos introducirlas en un recipiente con agua tibia hasta que mueran. Así evitaremos que pierdan sus patas. Una vez comience a hervir el agua, añadiremos las cigalas y en cuanto comience a hervir de nuevo, dejaremos cocer unos 3 minutos aproximadamente para retirarlas.

Precio 27 €/kg (IVA incluido). Nombre científico: Nephrops norvegicus.

No se debe lavar el pescado antes de congelar; ya que al lavarlo , aunque luego se seque muy bien, siempre conservará cierta humedad que se hará escarcha en el congelador, perdiendo por tanto , sabor y aroma. Lo que si debemos hacer es eviscerarlo muy bien.

Trocea el pescado utilizando el corte que desees. Este método será ideal si planeas cocinar el pescado a la plancha, ya sea lenguado, merluza, lubina u otros. Guarda los trozos de pescado en bolsas de plástico o tuppers. Ciérralos y mételos al congelador en la misma temperatura del método anterior.

Todos los mariscos congelados se pueden cocer directamente sin descongelar dando un lavado de agua previamente, pero es recomendable descongelar en frigorífico lentamente o a temperatura ambiente, si no hay una temperatura alta y si inmediatamente se cuece.

«Se recomienda envolver el marisco en un paño empapado con el mismo agua de la cocción y después cubrirlo en papel film o meterlo en una bolsa de congelación», explica la nutricionista.

Calentar. Como el calor inactiva las enzimas, si adquirimos crustáceos crudos, podemos cocerlos (o someterlos a otros tratamientos con calor) para impedir la melanosis.