¿Cómo se le llama a la maicena en España?

Almidón de maíz, también conocido como fécula de maíz.

La maicena es el almidón del maíz desprovisto del germen y salvado y se usa en repostería y en otros platos salados, como la bechamel, incluso para espesar salsas. La harina de maíz, en sus diversas variedades, se emplea para las tortitas, arepas y tamales.

La maicena es una harina sin gluten 'almidonada', mientras que la harina de maíz es una harina sin gluten 'proteica'. Por tanto, cumplen funciones muy diferentes en la repostería sin gluten. Eso significa que no puedes sustituir la maicena por harina de maíz ni el almidón de maíz por harina de maíz o viceversa.

Los 10 mejores sustitutos de maicena

La diferencia entre la maicena y la harina de maíz a nivel nutricional es que la segunda aporta más proteínas, grasas y fibra, mientras que la maicena aporta más calorías y carbohidratos.

Almidón de maíz, también conocido como fécula de maíz.

Maizena no aporta cantidades significativas de proteínas ni aporta grasas, y tiene un bajo contenido en sodio. Resulta muy útil en la industria alimentaria, Entre sus funciones se destaca la capacidad de retener agua, provocar la formación de geles, espesar líquidos, aportar textura y actuar como anticoagulante.

La maicena se utiliza para hacer pan, pastas, bizcochos, bases de pizza, etc., y como espesante para sopas, chocolate caliente, crema pastelera, y helados, entre otros. Maizena fue registrada como marca comercial en el año 1856 y adquirida por Corn Products Refining Co. en el año 1900.

Y esto es lo que pasa precisamente con el almidón de maíz: APORTA VOLUMEN pero no esponjosidad. El pan SIN almidón de maíz es más esponjoso. En cuanto al sabor, el pan con almidón de maíz es ligeramente más suave.

La mezcla de agua y maicena actúa justo al revés: cuando se le aplica presión se hace más viscoso, y no menos. En los lugares donde se ejerce fuerza, las partículas de la harina se compactan, atrapando moléculas de agua entre ellas, y la mezcla se convierte transitoriamente en un material semisólido.

— Para Espesar: Para que tus preparaciones tomen la consistencia deseada, disuelve en leche o agua fría 2 cucharadas de Maizena® y luego agrégalo a la cocción. — En Papillas: Mezcla 2 cucharadas de Maizena® con una taza de leche fría y luego agrégalo a la preparación.

La maicena, por su parte, es harina de maíz sin germen, desgrasada, molturada y muy fina. Se utiliza en la elaboración de salsa bechamel y para hacer bizcochos, mezclada con harina de maíz entera.

Sobre su contenido calórico, la página Engorda.org señala que la maicena , si bien contiene vitaminas , hierro, calcio y yodo, ofrece 355 calorías por cada 100 gramos, mucho más que el almidón de trigo que tiene 348 y que el de arroz con 343.

Las harinas de trigo, quinoa y arroz son las que contienen un menor aporte calórico por 100 gramos.

Harina de maíz

Es una de las más completas. Contiene vitaminas A, K, E y B; aporta fibra y proteína vegetal. Además cuenta con varios minerales como magnesio, cobre, fósforo, potasio, sodio, hierro y calcio. ¡Indudablemente esta es de las harinas saludables más nutritivas!

¿ Cuál es la diferencia de la Maizena® regular y la Maizena® saborizada? La Maizena® regular es fécula de Maíz tal cual, mientras que la Maizena® saborizada está compuesta por fécula de maíz, saborizantes, colorantes, además de otros ingredientes funcionales.

Como la maicena no se disuelve en agua caliente, es necesario usarla fría o al clima para poder aprovecharla correctamente.

Ingerir almidón de cocina puede causar un bloqueo en los intestinos y dolor en el estómago. Si el almidón se inhala, puede causar sibilancias, respiración rápida, respiración superficial y dolor torácico. Si el almidón hace contacto con los ojos, puede causar enrojecimiento, lagrimeo y ardor.

Información Nutricional y Alérgenos

Fécula de maíz (contiene dióxido de azufre), mezcla de vitaminas y minerales (vitamina C, hierro, zinc, niacina, vitamina A, vitamina B6, vitamina B12, tiamina y ácido fólico) trazas de trigo, huevo, leche y soya.

— En preparaciones con carne picada: El secreto para que tus hamburguesas y albóndigas te salgan más suaves y doradas está en agregar dos cucharadas colmadas de Maizena® cada 500 g de carne picada. ¡Probalo también en tus rellenos para empanadas para que queden bien jugosas!

O sea, si usaste una cda. de maicena, la disolvés en unas 3-4 cdas. de agua, esto hace más o menos medio vaso, que es lo que yo utilizo. Que el agua en la que disolvés la maicena no esté ni tibia ni caliente. Sino no espesará.

Esto se debe a que el almidón sufre un proceso de fragmentación y se forman pirodextrinas.

La maicena, o harina de maíz, puede durar de forma indefinida en tu cocina por su bajo contenido en agua, para lo que es fundamental mantenerla en un lugar fresco y seco y en un contenedor cerrado y hermético para que no le entre humedad.

La maicena y la harina de maíz aportan diferente grosor a las recetas, por ello, la maicena es recomendada para espesar cremas, mientras que la harina se utiliza con mayor asiduidad en la repostería.

La historia de Maizena

Maizena nació en Estados Unidos, en 1856 creada por los hermanos Duryea, quienes la vendían en nombre de su compañía llamada Glen Cove Starch Manufacturing.

Su consumo aporta prácticamente las mismas calorías que la harina de trigo (cerca de 350 Kcal por cada 100gr) pero tiene una mayor concentración de grasas y menor de proteínas y vitaminas.

En resumen, la avena integral no engorda, ya que estimula el “sentirse lleno” debido a la acción del beta-glucano; por lo anterior, el supercereal forma parte de la alimentación saludable.