¿Cómo se llaman los chipirones en Cantabria?

En Cantabria, por ejemplo, se conocen como maganos . Incluso en el País Vasco, los chipirones de otoño, en realidad ya calamares, que son más grandes y tienen los ojos saltones, se denominan «beguiaundi» , que en euskera quiere decir ojos grandes.

En la mayoría de los bares y restaurantes de Santander la base con la que se elaboran las rabas es el magano o chipirón (que son calamares grandes) o el peludín (que son calamares gigantes).

Las rabas. Son los calamares a la romana de toda la vida, pero en Cantabria se llaman rabas. Si aquí tienen un nombre especial, imagínate por qué será, ¡están buenísimas! Las rabas son el aperitivo más típico de Cantabria y las puedes acompañar de un vermut, un vino o una caña.

Los téutidos (Teuthida) son un orden de moluscos cefalópodos conocidos vulgarmente como calamares (debido a su "hueso" calcáreo, conocido como pluma o caña = calamus en latín).

En resumen, los chipirones son, simplemente, calamares que se denominan de tal modo cuando se hace la elaboración frita tan típica. En cambio, los chopitos y las puntillitas, al igual que los pulpitos o calamaritos son el mismo plato, que proviene de la sepia.

La palabra cachón, que es sinónimo de jibia o sepia, alude a una forma específica de denominar a la jibia o sepia en varios lugares costeros de Cantabria, entre ellos en Maliaño.

También llamado Jibión o Chipirón. Es un molusco cefalópodo, decápodo. Vive cerca del litoral, entre profundidades de 15 a 600 metros, prefiriendo aguas abiertas al ser un animal de movilidad permanente.

Los tentáculos del peludín se sirven en muchos establecimientos de Cantabria con el nombre de rejos. Estos resultan algo más duros a la hora de comer y, por ello, tienen menor demanda. Rabas y rejos suelen combinarse en muchas de las cartas de picoteo, con precios más o menos similares.

Las rabas en Santander y, por tanto, en Cantabria, son tiras o pequeños trocitos de cefalópodos (calamar, pulpo, etc.), enharinados y, posteriormente, fritos en aceite caliente.

Los calamares de potera son considerados como lo más exquisito de los calamares. Son especialmente famosos en Barbate, Tarifa y Conil aunque es posible encontrarlos en restaurantes de prácticamente toda la provincia que saben que son muy apreciados por los clientes.

No hay diferencia, se trata del mismo animal, de la misma especie, solo que el calamar es de mayor tamaño que el chipirón. En ambos casos, calamar o chipirón, estamos hablando de un molusco cefalópodo alargado con dos tentáculos y ocho brazos.

El Calamar de Potera recibe este nombre por el arte de pesca que se utiliza. La potera es un arte de pesca tradicional, donde los calamares (moluscos) se cogen uno a uno por los tentáculos y cuando suben a bordo de la embarcación están vivos.

Pota o lura

Mucha gente confunde el calamar con la pota cuando no son lo mismo. La pota es más dura al morder y tiene un sabor más fuerte que el calamar. Económicamente hablando, es bastante más barata la pota que el calamar, por lo que se utiliza en muchas recetas como un sustituto perfecto.

La puntilla o puntillita es un cefalópodo distinto al calamar, de pequeño tamaño, forma más alargada y puntiaguda y sabor intenso. Disfrutar un plato de puntillas es uno de los pequeños placeres que tienes que darte de vez en cuando. ¡Ya puedes comprar puntillas o puntillitas frescas de Huelva al mejor precio!

La pota es perfecta para guisos que requieren un gran tiempo de cocinado porque adquieren más sabor, pero si vamos a cocinarlo directamente a la plancha vuelta y vuelta, el calamar tendrá un sabor mucho mejor. A nivel nutricional son casi iguales.

Los chipirones, en general, se pescan de junio a enero, pero el verano es la mejor época para el de potera o de ría, que habita en aguas cantábricas y gallegas, y que poco tiene que ver con los que llegan del Índico y del Pacífico pescados con redes, ya que los primeros tienen un sabor más fino y una textura más ...

La Sepia o Jibia es un molusco cefalópodo que posee diez brazos, dos de los cuales utiliza para atrapar a sus presas. Perteneciente al orden de los sepíidos (Sepiida), lo peculiar de su aspecto son sus ojos, en forma de «W» con los que ven en blanco y negro.

¿Qué diferencias hay entre el choco y la sepia? La diferencia que se observa entre estos moluscos se encuentra en el tamaño. Los ejemplares de más jóvenes y de menor tamaño son denominados chocos, mientras que los más adultos y de mayor tamaño se denominan sepias o jibias.

Los sepíidos (Sepiida) son un orden de moluscos cefalópodos conocidos con el nombre de sepia, jibia, choco o cachón. La gran diferencia que se observa en estos moluscos radica en su tamaño, denominándose chocos a los ejemplares jóvenes y sepias o jibias a los adultos, pero realmente estamos hablando del mismo pescado.

La pota, un cefalópodo muy similar al calamar, con unas propiedades muy buenas y un sabor fantástico ¡Te lo contamos todo! ¿Sabes que es la pota o potón? Se trata de un cefalópodo pescado en zonas costeras y con un tamaño mayor al calamar.

La pota o lura (o choupa, como se le conoce en Galicia), es un animal muy similar al calamar, aunque la pota puede llegar a ser un poquillo más grande.

En España son conocidos como calamares fritos, calamares a la romana, rabas o calamares a la andaluza. Se sirven generalmente como una tapa en muchos bares, o como raciones.

No hay que confundir al potón con la pota, porque esta se denomina Illez argentinus y sus brazos están en la parte superior de su cuerpo. En cambio, el potón es un molusco cefalópodo que ha venido recibiendo el nombre de jibia gigante o calamar de Humboldt.

Principales diferencias entre rejo y pulpo

Mientras que el rejo pertenece a la familia Sepiidae, con una forma ovalada, concha interna y ocho brazos, el pulpo es parte de la familia Octopodidae, con un cuerpo redondeado, sin concha interna, ocho brazos y dos tentáculos distintivos.

Según algunos diccionarios, el rejo es un tentáculo de los moluscos cefalópodos, lo cuál es aplicable a calamares, pulpos y sepias. Por ello, los rejos son conocidos también como patas de calamar, aunque exactamente son potón del Pacífico.

La diferencia entre las rabas y los calamares es que las primeras tienen forma alargada y quedan mucho más crujientes que los calamares que tienen forma de círculo. No en vano, las rabas son las patas del calamar en sí, que se preparan rebozadas y posteriormente fritas.

“Las rabas es como le llamamos en Santander al calamar frito”, explica por teléfono Paco Quirós, empresario cántabro al frente del grupo Cañadío, que tiene esta fritura de pescado como uno de sus platos estrella.