¿Cómo se llaman los lentes que te protegen del sol?

Filtro ultravioleta y la categoría de las gafas de sol Su presencia protege de la radiación ultravioleta la cuál es nociva para los ojos. De hecho, el filtro ultravioleta se encuentra presente en todos los tipos de gafas de sol adquiridas en las ópticas.

Los filtros UV protegen los ojos de los rayos ultravioleta del sol, que pueden ser dañinos a largo plazo, mientras que las gafas polarizadas reducen el deslumbramiento y mejoran la claridad de la visión. Por lo tanto, es recomendable elegir gafas que tengan tanto filtro UV como polarización.

Elija un par con clasificación UV 400

Las mejores gafas de sol para la protección de los ojos son las que tienen una clasificación UV 400. Estos filtran entre el 99% y el 100% de los rayos UV, lo que los convierte en los mejores anteojos de sol para proteger sus ojos.

También son ideales para personas sensibles al exceso de luz o con dolencias oculares. Para los deportistas también son recomendadas, ya que la práctica deportiva supone mucho tiempo expuesto al sol y eso puede afectar la visión y el rendimiento.

Identificar si unos lentes de sol cuentan con protección UV400 es sencillo. Si posee la etiqueta ''UV400'' o ''Bloquea el 100% de los rayos UV'' en la montura de tus gafas, significa que sus lunas pueden absorber hasta el 99% de rayos ultravioleta.

Debes colocar ambos lentes en posición horizontal como se ve en la figura y luego gira uno de ellos entre 60º a 90º, si se bloquea el paso de luz y no ves nada hacia el otro lado, entonces los dos lentes son polarizados!

La exposición prolongada puede afectar la córnea, el cristalino y la retina, además de los párpados, donde podría ocasionar cáncer si no existe la protección necesaria. Asimismo, aumenta en un 20% el riesgo de sufrir cataratas y quemaduras en el órgano de la visión.

Las gafas polarizadas tienen la ventaja de filtrar la luz reflejada y reducir el deslumbramiento en superficies como el agua, la nieve o la carretera, lo que las hace especialmente útiles para actividades al aire libre, como la pesca, el esquí o la conducción.

Existen cristales para gafas de sol de varios colores: Se recomiendan los cristales de color gris porque se ven muy bien los colores y ofrecen una buena protección de los ojos en caso de fuerte luminosidad. Los cristales de color amarillo se utilizan en días nublados.

Gafas Filtro UV 400

Este filtro suele ser una capa adicional que se pone en el cristal y cumple la función de bloquear o absorber los rayos ultravioleta (UV) provenientes del sol con longitudes de onda de hasta 400 nanómetros. Este filtro, por lo general, protege de los rayos UVB y UVA.

Los lentes polarizados producen siempre mayor claridad y nitidez, agregando más naturalidad a los colores y el contraste de las imágenes; los fotocromáticos mejoran la nitidez y claridad en entornos oscuros, para evitar molestias en el ojo cuando hay mucho sol.

¿Cuál es la vida útil? Dependerá de la calidad de los pigmentos y de las horas de uso que le demos. Unas lentes fotocromáticas baratas no suelen durar mucho más de 1-2 años, mientras que las lentes de calidad más del doble de tiempo.

Transitions vs fotocromáticos

Realmente no existe como tal una diferencia en estos términos, ya que los lentes transitions usan tecnología fotocromática. Es decir, fotocromático, es la tecnología que se emplea en los lentes transitions para que los mismos reaccionen antes los rayos UV.

Las gafas de sol marcadas con protección UV400 bloquean entre el 99 y el 100% de la luz ultravioleta. Filtran y bloquean los rayos de luz con longitudes de onda de hasta 400 nanómetros, incluidos los rayos UVA y los UVB.

Estos filtros solares actúan absorbiendo la radiación UV del sol y convirtiéndola en inocua. Hay más de veinte, con autorizaciones que varían según el mercado. La ventaja es su textura líquida. No son pegajosos y no dejan marcas blancas en la piel.

Se aconseja cambiar de gafas de sol cada 2 a 3 años, dependiendo de cuánto estén expuestas al sol, porque los rayos del sol degradan mucho el material polarizante. Por lo demás, si los usas solo como accesorio, no hay mucho de qué preocuparse.

Los filtros UV protegen los ojos de los rayos ultravioleta del sol, que pueden ser dañinos a largo plazo, mientras que las gafas polarizadas reducen el deslumbramiento y mejoran la claridad de la visión. Por lo tanto, es recomendable elegir gafas que tengan tanto filtro UV como polarización.

Beneficios de las gafas polarizadas

Minimizan el deslumbramiento del reflejo de los rayos del sol sobre determinados objetos o superficies. Aumentan la alta definición de los detalles. Ofrecen una excelente protección solar. Protegen al 100% de los rayos UV.

A los lentes polarizados se les aplica un químico especial para filtrar la luz. Las moléculas de la sustancia química están alineadas específicamente para bloquear parte de la luz y evitar que pase a través del lente.

Las gafas de sol proporcionan una protección esencial para los ojos contra los rayos nocivos del sol. Los rayos del sol emiten radiación ultravioleta, y la exposición prolongada puede provocar diversas afecciones oculares, como cataratas, degeneración macular y fotoqueratitis (quemaduras del ojo por el sol).

Proteger protegen por igual las lentes polarizadas y sin polarizar, la única diferencia entre ambas es el filtrado de la luz para conseguir evitar reflejos y destellos.

El filtro permanece habitualmente toda la vida del lentes, por lo tanto se recomienda cuando se encuentren en mal estado o se ha decidido modificar la receta de los con aumento. Para más información ingrese a Clínica Alemana.

Las lentes polarizadas son lentes de sol que contienen un filtro especial que bloquea la luz reflejada y sólo deja pasar la luz útil, permitiendo una visión sin reflejos y con un color y contraste naturales.

Los lentes polarizados y los lentes no polarizados protegen sus ojos de los rayos UV si están etiquetados como "bloqueadores de rayos UV". Si no están etiquetados como tales, entonces, si están polarizados o no, no importa. No protegerán sus ojos de los rayos ultravioleta.

Si elegimos el color erróneo, nuestra percepción de los tonos exteriores se ve alterada, lo que podría llegar a causar un accidente de tráfico. Por esta razón, los colores más recomendados para conducir son los más neutros: grises y verdes.

Los lentes deben ser casi tan anchos como tu cara y llegando de tus cejas (no arriba de ellas) hasta un poco más de la mitad de la nariz, que es lo que te va a dar la protección que necesitas, sin incomodar. Debes cuidar que no sean muy grandes, ya que el punto no es ocultar tu cara detrás de ellos.