¿Cómo se mide el kilometraje de un vehículo?

El odómetro es un dispositivo que mide la distancia recorrida por un coche. Suele ser un indicador para el conductor o futuro comprador del coche del estado de este, y si es o no necesario realizar labores de mantenimiento. Este dispositivo puede ser mecánico, eléctrico o una mezcla de los dos.

Una de las formas más eficaces para conocer el kilometraje real de un coche es con la ayuda de una máquina de diagnosis en un taller autorizado. Para ello, solo bastará con conectar al puerto OBD2 el equipo de diagnosis y al instante se mostrará el kilometraje real que tiene el vehículo.

En general, los coches modernos están diseñados para durar más que los modelos antiguos. Se estima que la vida útil promedio de un coche es de alrededor de 150,000 a 200,000 kilómetros. Sin embargo, muchos coches bien mantenidos pueden superar fácilmente esta cifra y seguir funcionando sin problemas.

El cuentakilómetros

Si el coche es análogo, debes fijarte en la alineación de los números del cuentakilómetros, especialmente en el primer dígito de la izquierda. Si hay un desnivel en los números, es muy probable que se haya modificado el kilometraje.

Revisá el cuentakilómetros

Si es análogo, centra tu atención en la alineación de los números, sobre todo en el primer dígito de la izquierda. Notar un desnivel en estos es una clara señal de que el kilometraje del auto fue modificado.

Lo que sí que está regulado es la cotización y retención de estos pagos. Existe un máximo, que en 2022 ha sido de 3 € por kilómetro, que están exentos de tributación. Si la empresa paga un precio por kilómetro superior a este, cotizará el exceso. Por ejemplo, en caso de pagar 3,2 €/km, cotizará 0,09 €/km.

0,20€ por kilómetro, el precio medio del kilometraje en España. El “Informe Captio del kilometraje 2021” concluye que el promedio del precio del kilometraje bajó hasta los 0,20 euros/km en nuestro país en 2020. Se trata de una bajada significativa respecto a 2019, cuando el precio fue de 0,28 euros/km.

El kilometraje promedio por año se encuentra entre 10,000 y 15,000 km, es por eso que si adquieres un auto que tenga 3 años de antigüedad y tenga un promedio de 25,000 y 35,000 km se conoce como una buena opción.

¿Cómo saber si el kilometraje de un coche de segunda mano es adecuado? Por norma general, se estima que un kilometraje de entre 15.000 y 20.000 kilómetros al año es aceptable para un coche de segunda mano.

A diferencia de los motores de gasolina, los motores diésel suelen ofrecer una vida útil más larga. Pueden llegar a circular más de 400.000 kilómetros, si lo extrapolamos, podemos decir que los motores diésel pueden llegar a los veinte años.

Cuando estás en búsqueda de un auto usado, el kilometraje es uno de los parámetros más importantes que debes revisar. En este sentido, de acuerdo con los datos que se manejan en Autofact, un promedio normal que se puede esperar del recorrido de un vehículo en un año oscila entre 15.000 a 27.000 kms.

Inspecciona el VIN.

Una forma común de detectar un título falso es buscar la información del vehículo. Puedes solicitarlo en el Sistema Nacional de Información de Títulos de Vehículos Motorizados que es una base de datos del gobierno, que contiene la información del título del auto usado que deseas comprar.

Pide ver el título y compare el millaje con el odómetro del vehículo. Asegúrate de examinar el título detenidamente si la notación del millaje parece oscurecida o no es fácil de leer. Compara el millaje en el odómetro con el millaje indicado en los registros de mantenimiento o inspección del vehículo.

Todas las motocicletas tienen incorporado un aparato llamado odómetro o cuenta kilómetros, que está incluido en el tablero frente al conductor, junto al tacómetro y los testigos.

Por lo general un coche consume un litro de gasolina en 8 - 12 kilómetros, lo que se traduce en un gasto de 4 a 12 litros de combustible cada 100 kilómetros, dependiendo del vehículo, modelo y tipo de motor.

Según la RAE, kilometraje es la distancia en kilómetros. Si aterrizamos esa definición un poco más, podríamos decir que el kilometraje de un coche es la cifra que marca la distancia recorrida en un periodo de tiempo concreto. ¿Dónde se puede ver el kilometraje en un coche?

Por norma general un coche de gasolina consume un litro por cada 12 kilómetros, que se traduce en un gasto de 4 a 12 litros de combustible cada 100 kilómetros. Esas medidas se verán afectadas dependiendo del vehículo, modelo y tipo de motor.

Aunque no exista un documento interno que especifique el dinero a cobrar por kilómetro recorrido cuando un trabajador utiliza su vehículo particular para hacer un desplazamiento laboral, la mayoría de las empresas paga los gastos de kilometraje.

Con nueve años y sobrepasados los 150.000 kilómetros, se considera que un vehículo es viejo y que las reparaciones que exija para su correcto funcionamiento serán poco rentables.

El kilometraje que puede soportar un coche no es exacto. Este varía de uno a otro y va más allá de las marcas o los modelos. No obstante, existen algunos estudios sobre cuántos km dura un coche que cifran el límite en los 320.000 kilómetros. Si hiciéramos unos 20.000 km al año, tardaríamos 16 en inutilizar el vehículo.

El kilometraje y la edad son dos factores esenciales a la hora de comprar un coche de segunda mano. Pero ninguno de estos factores es definitivo. Es mucho más importante el cuidado y el mantenimiento que ha recibido el vehículo.

Los motores diésel son más eficientes que los de gasolina, llegando a consumir de media entre un 15 y 20 por ciento menos de combustible. Además, los vehículos con este tipo de motor suelen estar mejor valorados dentro del mercado de segunda mano.

En general, para automóviles con alto kilometraje, se recomienda utilizar aceites con una viscosidad más alta, como el SAE 10W-40 o incluso el SAE 20W-50. Estos aceites ofrecen una mayor protección y lubricación para motores desgastados.

Los motores diésel suelen tener una vida útil de unos 400.000 kilómetros si las condiciones de mantenimiento y conducción han sido las adecuadas. A pesar de ello, si el vehículo ha sido tratado mal, es muy probable que el motor no supere los 200.000 kilómetros.

Cambiar un motor puede rondar entre 1.000 € y 2.000 €, aunque depende de cada caso concreto que la suma pueda ser mayor o menor: en el precio tienes que incluir tanto el precio del bloque motor como las horas de mano de obra.