¿Cómo tiene la boca la jirafa?

La boca de la jirafa, incluyendo su lengua, tiene una disposición anatómica similar a la que tienen las vacas. Cuando las jirafas están en cautiverio, ocurre cierta modificación de sus dientes, los cuales tienen mayor desgaste, producto de la alimentación muchas veces comercial, que contrasta con la natural.

Los labios estaban bien desarrollados, el superior era el predominante y estaba aplastado dorsalmente cerca de las narinas. La lengua tenía una protuberancia o Torus lingual y rostralmente a él una depresión en forma de surco o Fossa linguae.

Las jirafas tienen la lengua muy oscura, casi negra, porque como la utiliza constantemente fuera de la boca necesita preservarla del sol. Es por esta razón que sus tejidos tienen un alto contenido en melanina, que actúa como protector solar.

Las jirafas tienen una lengua prensil muy larga, de unos 50 centímetros, con la que pueden agarrar algunas plantas. Es de un color azul oscuro y además tienen las papilas engrosadas y mucha saliva con propiedades antisépticas para protegerlas de las espinas y plantas afiladas.

La lengua de las jirafas puede medir hasta 53 cm de longitud, ¡aproximadamente 5 veces más que la de un humano!

Las jirafas pasan mucho tiempo con la lengua fuera de la boca y el color azul actúa como una especie de crema solar. Al nacer, las jirafas miden ya dos metros. Las adultas pueden llegar hasta los cinco metros. La jirafa tiene los ojos muy separados, a los lados de la cabeza, lo cual le permite ver a gran distancia.

Este rumiante africano es el animal más alto conocido, llegando a alcanzar los 6 metros de altura. El largo cuello de las jirafas y las patas delanteras más largas que las traseras les permite alcanzar las hojas más altas de los árboles, evitando la competencia alimenticia con otros herbívoros.

Las jirafas pueden tener la lengua en tonalidades azul, morada y negra. Esto se debe a la melanina, un pigmento con la función de proteger contra los rayos del sol.

2. Su lengua de hasta 50 cm les permite alcanzar las hojas más altas y evitar las púas de las acacias. 3.

Jirafa. El largo y característico cuello que poseen sitúa a estos mamíferos herbívoros africanos como el animal más alto de todo el planeta.

Las jirafas son animales herbívoros y rumiantes. Su dieta fundamental son las hojas de acacia, su plato favorito y uno de los árboles que alcanza más altura.

¡Las jirafas no duermen, solo toman la siesta! Estos mamíferos duermen pequeñas siestas en períodos de diez minutos aproximadamente. La cantidad de horas totales dormidas al día varía entre dos y cuatro horas; sin embargo, hay ejemplares que solo duermen un total de 30 minutos al día.

En: Murciélagos.

Existen además otros cuernos; uno que es llamado cuerno medial y se emplaza en la zona de la frente del animal en forma de quilla. También se presenta un cuerno occipital. Algunos investigadores señalan que también existen unos cuernos menores en la zona orbital, aunque no existe un acuerdo común de esto último.

La jirafa macho. El nombre jirafa no tiene masculino, como la mayoría de nombres de animales con un nombre femenino.

Al nacer, las crías pueden pesar de 47 a 70 Kg y miden de 1.7 a 2 m de alto. Son capaces de sostener a los 20 minutos de haber nacido y son amamantadas en la primera hora de vida. La cría es cuidada aproximadamente 13 meses y es posible que permanezca 2 o 5 meses más.

La jirafa tiene al igual que el ser humano, 32 dientes, mientras que el mosquito, aunque no lo parezca, tiene 47. Igual de sorprendente es que los tiburones lleguen a cambiar hasta 40 veces su dentición, y eso que cuenta con 3 filas de colmillos.

Una curiosidad de las jirafas es que son poco dormilonas: duermen alrededor de dos horas al día en pequeñas siestas de cinco y diez minutos y la mayoría de las veces en posición vertical, es decir, duermen de pie.

Las jirafas duermen de pie, como también pueden hacerlo los caballos, trabando sus patas ya que echadas sólo duermen algunos minutos al día porque esta posición las vuelve vulnerables para sus predadores. Su lengua, de hasta 50 centímetros. les permite alcanzar las hojas más altas y evitar las púas de las acacias.

Tienen cuatro dedos, los laterales no se desarrollan, mientras que los otros dos forman pezuñas. Una jirafa macho puede medir en promedio 5,3 m de altura. Pueden pasar hasta varios meses sin beber agua, ya que la mayoría del líquido lo obtienen con la vegetación de la cual se alimentan.

Las jirafas, para beber agua se agachan abriendo las. patas delanteras situando el corazón a la misma altura. que la cabeza, cerca del suelo, así evitan posibles. mareos.

Además de los sonidos infrasónicos, las jirafas, en circunstancias particulares, pueden emitir una especie de gruñidos, gemidos, ronquidos o silbidos para comunicarse. Estas vocalizaciones les permite lanzar una advertencia en situaciones de alerta. Para ello pueden hacer un gruñido o resoplido específico.

El llamado pez del fango (Periophthalmus barbarus) que tampoco tiene lengua, pero que no se alimenta bajo el agua.

Así, las jirafas tienen que comunicarse por estímulos visuales, olfativos y estos peculiares sonidos. Además, para cortejar a sus parejas, las jirafas lanzan una especie de canto, parecido a la tos humana.

La jirafa se puede limpiar las orejas con su propia lengua. Llega a medir entre 60 y 65 centímetros.

La lengua azul es una enfermedad vírica, de la familia Reoviridae, que afecta a los rumiantes tanto domésticos como salvajes (afecta principalmente a ovinos además de bovinos, caprinos, bufálidos, antílopes, cérvidos, camélidos, entre otros).