¿Cómo y de qué manera se utiliza la brújula en la navegación?

Colocá la brújula sobre una superficie plana (la palma de la mano o una tabla), para permitirle a la aguja moverse libremente, y parate frente al objeto o el lugar al cual querés dirigirte. La aguja imantada comenzará a oscilar. Al detenerse, la aguja imantada marcará el norte magnético .

La brújula es un instrumento que sirve para orientarse, por medio de una aguja imantada que señala el Norte magnético, que es ligeramente diferente para cada zona del planeta, y distinto del Norte geográfico. Utiliza como medio de funcionamiento el magnetismo terrestre.

El astrolabio, en tanto, permitía calcular la altura de las estrellas, cosa importante para poder determinar la latitud geográfica. Gracias a estos instrumentos, los marinos pudieron estimar mejor su posición en el mar, el rumbo a seguir y el tiempo que tomaría su periplo.

Mantenga la brújula plana con la flecha de dirección de viaje apuntando en dirección opuesta a usted y directamente al punto de referencia. Ahora gire el bisel hasta que la aguja magnetizada esté dentro de la flecha de orientación. Mire la línea de índice para leer el rumbo que acaba de capturar.

Todos los barcos contienen una brújula, que es un dispositivo que sostiene un imán del tamaño de una aguja con su extremo norte pintado o marcado de alguna manera . Este extremo de la aguja siempre apunta al polo norte magnético de la Tierra.

La brújula, que permitía a los navegantes saber la dirección en la que navegaban, ha sido siempre uno de los instrumentos de navegación más importantes.

Entre los instrumentos utilizados en la navegación medieval se encuentran la calamita, como antecedente de la brújula, el astrolabio que evolucionó hacia una versión simplificada de uso en navegación, el cuadrante náutico, la ampolleta o reloj de arena, la ballestilla, el nocturlabio y las tablas astronómicas.

Los cuadrantes con brújula, introducidos en el siglo XV, fueron los primeros relojes de sombra portátiles. La brújula servía para apuntar el cuadrante hacia el norte y el gnomon (un trozo de cuerda o un triángulo plegable) se bajaba o subía, para acomodarlo a la latitud en que se utilizaba la brújula.

Brújula, para orientar el mapa

La líneas de la cuadrícula del mapa son líneas norte-sur. La aguja imantada de una brújula señala el norte también. Para orientar el mapa, colocaremos la brújula sobre el mapa y el conjunto de ambos lo más horizontal posible.

Gire el mapa y la brújula hasta que la aguja roja de la brújula se alinee con las líneas de cuadrícula norte-sur del mapa, con la aguja roja apuntando hacia la parte superior del mapa . El mapa ahora está orientado para reflejar las características que le rodean. Tómate tu tiempo para seguir haciendo coincidir las características que ves a tu alrededor con lo que ves en el mapa.

La orientación de un mapa es la clave para conciliar el mapa con el terreno. Para orientar el mapa, coloque la brújula en el mapa y gírelo para alinear la aguja de la brújula magnética con las líneas de la cuadrícula del norte en el mapa, asegurándose de que el extremo rojo de la aguja apunte hacia el norte en el mapa.

El cambio en el color de las aguas, diferentes pautas de oleaje, formaciones de diferentes tipos de nube, observación de las especies de peces en cada momento, así como los pájaros que sobrevolaban la zona constituían otras referencias que los marineros usaban para ubicarse.

Los marineros utilizaban mapas de la Tierra y de los cielos, además de cuadrículas para posicionarse. Aun así, no era fácil hallar las coordenadas necesarias porque aunque el sol, la luna y las estrellas ayudaran a determinar la latitud, la longitud era un hueso duro de roer.

Los navegantes viajaban durante muchos días y noches. Para orientarse, usaban las estrellas, el sol, la luna y las nubes. También observaban el oleaje del mar y el viento.

Un catalejo es un instrumento óptico monocular empleado para ver de cerca objetos lejanos. Comprende un objetivo óptico y otro ocular, generalmente colocados en un tubo corredizo.

El astrolabio: Es un instrumento antiguo utilizado por los marineros que representaba la forma circular de la Tierra. Su función era establecer el lugar en el cual se encontraban los navegantes en el mar, gracias a la observación de la posición de las estrellas y el Sol en el horizonte.

A lo largo de la antigüedad y la Edad Media los marinos se guiaban durante el día con ayuda del Sol y en la noche observaban la estrella polar para conocer su posición en el mar.

Los astrolabios fueron utilizados desde la antigüedad para medidas astronómicas, topográficas y horarias. Reproduciendo, por giro de la araña, la posición de las estrellas en el cielo con respecto a la proyección de la esfera terrestre (el horizonte de esa latitud) se podía conocer la hora.

El campo magnético es una zona donde la fuerza actúa a lo largo de líneas imaginarias. Desde el polo sur magnético hasta el polo norte magnético, esta fuerza influye en todos los objetos magnetizados, como por ejemplo la aguja de una brújula. Bajo el efecto del campo magnético terrestre, la aguja siempre apunta hacia el polo norte magnético .

Para orientarte por el Sol te tienes que colocar con los brazos en cruz y con el brazo derecho señalando por donde sale el Sol, así sabrás que delante de ti está el Norte, detrás el Sur y a tu izquierda el Oeste. Si te fijas bien por donde sale el Sol cada mañana ya sabrás orientarte en cualquier lugar de la Tierra.

Entonces, como la Tierra es un imán con su polo sur magnético en el Norte geográfico, la brújula se orienta con su polo norte hacia el polo magnético opuesto de la Tierra (el polo sur) que es precisamente el Norte.

Estos puntos cardinales se pueden ubicar por medio de una brújula gracias al campo magnético que genera la Tierra. Están establecidos como Norte (N), Sur (S), Oriente (E) y Occidente (W).

Conceptos básicos de la brújula

No necesita pilas, funciona con cualquier mapa e incluso funciona sin mapa . Si bien se han escrito libros completos sobre la navegación con una brújula, todo nuevo usuario de una brújula necesita conocer los conceptos básicos.

Emplea una brújula

Otra manera de dar con esta información es utilizando una brújula. Como bien sabes, su aguja apunta siempre al norte, así que ponte en paralelo con la pared más larga de la casa y fíjate en qué dirección toma. Si apunta directamente al norte, la orientación será norte-sur.

Usando el anillo del bisel de su brújula, ajuste la flecha de orientación hasta que apunte al valor de declinación local. Luego, gire la brújula hasta que la aguja se alinee con la flecha; la dirección de la flecha de desplazamiento de la brújula señalará el norte verdadero.

A esto se le llama orientar su mapa. Coloca la brújula en el mapa. Gire el mapa hasta que la aguja del norte magnético de la brújula se alinee con las líneas del norte magnético del mapa ; ahora está orientado en la misma dirección que el suelo.

Piezas de brújula de orientación

Como muestra la figura 1, una brújula de orientación normalmente consta de tres partes principales: una aguja magnética, una carcasa de brújula giratoria y una placa base transparente . El extremo norte de las agujas magnéticas está pintado de rojo y el extremo sur de blanco.