¿Cuál es la carne más saludable para el consumo humano?

Las carnes de conejo, pollo y pavo son magras casi en su totalidad y son las más recomendadas por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición , mientras que la cantidad de magra en la carne de vacuno, de cordero o de cerdo depende del corte.

Carne magra de cerdo

De hecho, el lomo de cerdo es una de las carnes más magras que existen, en algunos casos incluso más que el pollo. También son consideradas carnes magras la paleta y el solomillo de cerdo. Piezas, además, que están riquísimas.

Según un estudio de la UBA, el cerdo es más sano que el pollo o la carne de vaca. Una investigación realizada por docentes de la Universidad de Buenos Aires (UBA) reveló que "100 gramos de porción comestible de cerdo aporta menos calorías y grasas totales que la misma porción de carne de pollo o de vaca".

Cordero, ternera y cerdo: las menos saludables

Los nutricionistas recomiendan no consumir carne roja más de una o os veces a la semana. Si bien hay que tener en cuenta que, por ejemplo en el caso del cerdo, no es lo mismo comer un corte magro como el solomillo (3% de grasa) que una graso como el secreto.

“La recomendación de consumo de carne es moderada para la blanca (pollo) y poco frecuente para la roja (vacuno mayor, animales de caza y vísceras)”, exponen los expertos en The Conversation.

¿Qué alimentos debo evitar comer? Algunos alimentos tienen más probabilidades de causar enfermedades transmitidas por alimentos que otros. Es mejor evitar: Carnes rojas, carne de aves, pescados, mariscos (incluido sushi) y huevos que estén crudos o semicrudos, y sustitutos de la carne, como tempeh y tofu.

Por la investigación realizada, se pudo confirmar que un gran número de personas relaciona el consumo de carne de cerdo con enfermedades e infecciones graves como la cisticercosis y la triquinosis; estas infecciones surgen por consumir carne contaminada de las larvas Taenia solium y Trichinella spiralis que causan, en ...

La de conejo encabeza la lista con 33 gramos de proteínas por cada 100 aproximadamente, seguida del pavo, 29, pollo, 27, cerdo, 27, y ternera, 24. Así que punto para la carne de conejo.

En este sentido, es conveniente saber que: 100 gramos de ternera contienen 11 gramos de grasa y 70 de colesterol. 100 gramos de cerdo, 25 de grasa y 72 de colesterol.

La carne de conejo es la carne con menos grasa, la más saludable y amigable con el medio ambiente. Comparada con la carne de res, cerdo, pollo, pavo, cordero, la carne de conejo tienen más proteína, menos grasa y menos calorías por kilo.

Las carnes con menor cantidad de colesterol son las blancas sin piel: pollo, conejo y pavo. Vísceras de pescado y huevas. Carne del pescado blanco sin cabezas ni vísceras (merluza, lenguado, rape, dorada…) y azul. (atún, emperador, caballa, bonito, sardina, salmón…)

Los productos de origen vegetal contienen más nutrientes, más fibra y menos calorías y están asociados con mayores beneficios para la salud según la ciencia.

Si quieres comer carne por la noche, es mejor que optes por otros tipos, como el pollo o el pescado. Además, la carne roja tiene muchas calorías, por lo que las opciones de carne blanca son una opción mucho mejor para mantenerse en forma.

La cuestión es que las evidencias científicas actuales confirman que el huevo no eleva el nivel de colesterol en sangre. Aunque antes se decía que no era recomendable comer más de dos o tres huevos a la semana, hoy se puede decir que incluso pueden comerse diariamente.

No obstante, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir, al menos, un huevo al día para la población en general y unos tres o cuatro a la semana en personas que tienen el colesterol alto. (Siga leyendo: ¿Le ha salido un huevo con doble yema? Esta es la razón por la que sucede).

Por su parte, la doctora en Nutrición y profesora de la Universidad de Málaga, Julia Wärnberg, durante una entrevista en 'COPE' explicó que es “recomendable comer pasta dos o tres veces por semana”.

Tiene un alto contenido de fibra, vitaminas y otros nutrientes. Además, las personas que no comen carne (vegetarianos) por lo general consumen menos calorías y menos grasa y tienden a pesar menos. También, corren un riesgo más bajo de tener una enfermedad cardíaca en comparación con los no vegetarianos.

10 alimentos que ayudarían a combatir la grasa abdominal

Enumeramos para ti cinco sustitutos de carne para inspirarte:

“Hablamos de que debemos tener mucho cuidado con las comidas grasosas. Por ejemplo, la carne de cerdo nunca puede ir combinada con alimentos que contengan mayonesa, sino mejor con ensaladas de vegetales crudos”, explica Rodríguez.

En este contexto, los expertos recomiendan un consumo de carnes magras, como es la carne de cerdo, de 3 a 4 raciones por semana. Para la población general todos los derivados cárnicos procedentes del cerdo pueden incluirse en el contexto de una dieta equilibrada siguiendo las recomendaciones de consumo adecuadas.

De hecho, y como ya hemos dado a entender, determinadas partes del cerdo no tienen mucho colesterol. Respecto a los cortes extramagros, las partes del cerdo ibérico con menos grasa y colesterol son el lomo, la paleta y el solomillo.

Para los conocedores de carnes no es un secreto que la carne Wagyu es considerada la mejor carne del mundo. Esta carne tiene siglos de producción, proviene de Japón y es el país en el que más se produce en la actualidad.

1. - La carne de conejo es sumamente rica en proteínas, excelente alimento para el desarrollo muscular. 2. - Es conocida como carne magra, contiene140 calorías por cada 100 gramos.

El pollo es una de las carnes más recomendadas por los especialistas en nutrición debido a su menor contenido en grasas y en colesterol. Además, junto con el cerdo es una de las carnes más ricas en ácido linoleico cuya carencia puede provocar la caída de cabello, anemia, deshidratación de la piel…

Entre los más peligrosos se encuentran las cigalas, las gambas o la langosta. Sin embargo, siempre podemos optar, de vez en cuando, por otros tipos de marisco como mejillones, almejas o berberechos, ya que cuentan con un menor aporte de colesterol a nuestro cuerpo.

Los sesos constituyen muy buena fuente de minerales: hierro, magnesio, zinc, potasio, selenio. El hierro y el zinc son es de elevada biodisponibilidad.