¿Cuál es la diferencia entre los ingresos ordinarios y extraordinarios?

- El criterio de la financiación: los ingresos extraordinarios deben financiar las inversiones públicas (básicamente, la deuda pública). Los ingresos ordinarios deben financiar los gastos corrientes del sector público.

Así, los ingresos ordinarios se entienden generados en el desarrollo común, habitual o normal del objeto social o actividad económica propia del contribuyente de renta, y los extraordinarios, a su vez, en fuentes distintas a ese giro ordinario.

II) Los ingresos extraordinarios, son recursos que no se obtienen de manera regular por parte del Estado, tales como: la enajenación de bienes nacionales; contratación de créditos externos e internos (empréstitos) o emisión de moneda por parte del Banco de México. i.

Ingreso extraordinario, este se refiere a, como lo menciona su nombre, una actividad extraordinaria, diferente dentro de lo habitual de nuestra empresa, puede ser desde que ganemos la lotería, hasta una cantidad de dinero no reembolsable.

Una entidad reconocerá los ingresos de actividades ordinarias cuando (o a medida que) satisfaga una obligación de desempeño mediante la transferencia de los bienes o servicios comprometidos (es decir, uno o varios activos) al cliente.

Los ingresos se clasifican en Ordinarios y Ganancias.

Para iniciar, los ingresos ordinarios son aquellos que provienen del giro ordinario de los negocios, y, por defecto, las ganancias son ingresos diferentes de los que provienen del giro ordinario de los negocios.

Los ingresos de actividades ordinarias se medirán al valor razonable de la contraprestación recibida (efectivo) o por recibir (derechos de cobro o cuentas por cobrar). A este valor se le deben sustraer cualquier descuento, bonificación o rebaja comercial que la entidad pueda otorgar (ver NIIF para las Pymes, párr.

Tipos de ingresos económicos

Ingresos extraordinarios: son los que no tienen que ver directamente con la actividad del negocio, también se les llama “ingresos atípicos”. Se dan de forma esporádica. En nuestro caso, por ejemplo vino con la venta de una furgoneta que aportamos al inicio del negocio y que luego no utilizábamos.

Los ingresos ordinarios/recursos comprenden solamente las entradas brutas de beneficios económicos o potencial de servicios recibidos y por recibir, por parte de la entidad, por cuenta propia.

Se consideran como gastos ordinarios los necesarios, previsibles y periódicos. Esta previsibilidad permite cuantificarlos a priori, y por tanto abonarlos por medio de la pensión alimenticia. Así, los gastos extraordinarios son aquellos que resultando necesarios no son previsibles o periódicos.

En la cuenta 759 "ingresos por servicios diversos", se registran los ingresos originados por la prestación eventual de ciertos servicios a otras empresas o particulares.

Existen dos tipos principales de ingresos de una empresa: operativos y no operativos. Los operativos son consecuencia de la actividad ordinaria de la empresa, es decir, de sus operaciones comerciales principales, como ventas de bienes o servicios.

Actividades ordinarias son todas las que la empresa emprende como parte de su comercio habitual, así como esas otras en que la empresa se implica porque surgen, se derivan o son una consecuencia de aquéllas, y que les permiten generar rentabilidad y beneficios.

Los ingresos son reconocidos contablemente en el periodo en el que se devengan.

La Norma Internacional de Contabilidad (NIC) 18 Ingresos (IFRS, 2017), establece los aspectos necesarios que deben ser observados por la entidad para llevar a cabo la medición, reconocimiento y revelación de los ingresos.

Si los ingresos y los gastos previstos coinciden, el presupuesto estará equilibrado. Lo normal es que los gastos sean superiores a los ingresos, es decir, que haya déficit presupuestario. La situación opuesta, con ingresos superiores a los gastos, es la de superávit.

Los ingresos representan cualquier cantidad de dinero que entre a formar parte de la economía de una persona y los egresos son las cantidades que salen y suponen un incremento (inversiones) o una reducción de dicho patrimonio (gastos).

El ingreso es el valor que se genera a través de la venta de algún producto o servicio, mientras que la ganancia es la cantidad que queda después de que al ingreso se le restan los costos, intereses e impuestos.

El ingreso total de la empresa es el resultado de multiplicar el precio por el número de unidades producidas y vendidas. El ingreso marginal es el aumento de los ingresos totales cuando se vende una unidad de producto más.

Ejercicio fiscal.

Periodo para la determinación de contribuciones o ejercicio de los recursos públicos que generalmente comprende del primero de enero al treinta y uno de diciembre.

Es una parte de los ingresos gubernamentales que obtiene el Estado haciendo uso de su poder coercitivo de forma unilateral; o bien por una contraprestación obligatoria; es decir incluyen los recursos que impliquen una obligación de deuda.

Ingresos No Acumulables

Son aquellos que no se consideran para efectos fiscales al momento de determinar la base gravable del contribuyente. Estos ingresos están exentos de pagar impuestos y, por lo tanto, no se suman a la declaración anual.

De esta forma, desde Hacienda explican que la cantidad máxima de dinero que podemos ingresar en ventanilla y sin justificar, según lo estipulado por la ley, son 3.000 euros. Si se ingresa una cantidad mayor, la Agencia Tributaria puede exigir los justificantes y los comprobantes del ingreso del dinero.

Según el Plan General de Contabilidad, es el resultado vinculado a operaciones atípicas o no habituales de la empresa. Tienen la consideración de resultados extraordinarios los que no guardan una relación con la actividad habitual y no se esperan, razonablemente, que ocurran con frecuencia.

La Cuenta Contable 678 denominada Gastos Excepcionales se refiere a aquellos gastos no recurrentes, no habituales y que se originan debido a eventos o situaciones inusuales que no forman parte de las actividades operativas normales de la empresa.

Gastos extraordinarios

Son aquellos egresos no habituales, excepcionales y no esperados que se producen a raíz de la actividad empresarial o que repercuten en ella. Hablamos de situaciones como un incendio, una inundación o la avería de maquinaria.