¿Cuál es la mejor hora del día para broncearse?

En este post te compartiremos consejos para que tu exposición solar sea la más saludable y que logres conseguir el bronceado perfecto. ¿Cuál es la hora ideal para estar bajo el sol? La mejor hora para estar bajo el sol es justo cuando va saliendo y antes de bajar, es decir, a primera y última hora de luz.

De 12 de la mañana a 5 de la tarde.

¡Cuidado! Durante estas horas es cuando hay más riesgo de quemaduras importantes y de sufrir un golpe de calor, que puede ser muy peligroso porque la temperatura corporal supera los 40 grados y se incrementa el peligro de deshidratación.

Lleva a cabo una exposición solar progresiva

Pero, ¿cuánto tiempo tomar el sol? El primer día se recomienda un bronceado de no más de 20 minutos. Tu piel estará muy sensible, por lo que corres el riesgo de sufrir quemaduras e incluso erupciones. Aumenta progresivamente el tiempo de exposición 15 minutos más cada día.

Entre las 10:00 a.m. y las 5 p.m., el sol se encuentra en su punto más alto en el cielo, y la intensidad de los rayos UVB es mayor. Este es el horario pico y el momento más peligroso para tomar el sol, ya que aumenta significativamente el riesgo de quemaduras solares y daño a la piel.

La mejor hora para estar bajo el sol es justo cuando va saliendo y antes de bajar, es decir, a primera y última hora de luz. A esta hora la intensidad es baja y es cuando el sol está más resplandeciente. Gradualmente estarás cogiendo color y un bronceado saludable.

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Los mejores consejos para conseguir un excelente bronceado

20 minutos diarios es más que suficiente. El bronceado se realiza de manera gradual, no sucede todo en un solo día de sol, ser cautelosos y precavidos. Para proteger el rostro del exceso de sol, utilizar sombrero y protector solar.

Por lo tanto, cuanta más melanina produzca nuestro cuerpo, más morena estará nuestra piel pero se debe tener en cuenta que el bronceado se ha de adquirir de forma progresiva. Una vez se activa la producción de melanina, la piel tarda en broncearse entre unas 36 y 48 horas.

La luz solar puede mejorar nuestro estado de ánimo, disminuir la presión arterial, fortalecer nuestros huesos, músculos e incluso nuestro sistema inmunológico. Y una breve exposición es suficiente para cosechar todos estos beneficios.

Las personas de piel de tipo 1 y 2, que son las de tez más clara, rara vez llegan a broncearse sino que, por lo general, suelen quemarse. En cambio, las personas de piel de tipo 3 y 4, la piel de oliva, se broncean muy rápido.

¿Qué alimentos que potencian el bronceado?

Esto responde a la creencia de que estando en el agua, el bronceado será mayor. La realidad es que el agua refleja la radiación solar y actúa a modo de espejo; lo mismo ocurre en la piscina. De esta forma, corremos más riesgo de quemaduras solares.

Las zonas de piel pálida se deben a una cantidad muy pequeña de melanina o a actividad insuficiente de los melanocitos. Las zonas de piel más oscura (o una zona que se broncea más fácilmente) ocurren cuando usted tiene más melanina o hay hiperactividad de los melanocitos.

El quinto día empezarás a notar que tu piel está ligeramente bronceada. ¡No te confíes! Aunque te veas más morena, no descuides tus hábitos de protección, sigue aplicándote la crema solar de manera habitual para evitar daños. Sábado: dieta rica en carotenos.

Esto ocurre porque “cada uno producimos una cantidad y una calidad diferente de melanina. La melanina es el pigmento que producen nuestras células que se encuentran en la capa basal de la piel” explica la Dra. Puig. Estas células que producen melanina se llaman melanocitos.

Podemos favorecer la producción de melanina mediante el consumo de alimentos ricos en carotenos como pueden ser: zanahoria, verduras de hoja verde, calabaza, melocotón, albaricoques, cerezas, melón, espinacas y pimientos verdes entre otros.

Le relacionamos a continuación una serie de consejos a la hora de tomar el sol: No exponerse al sol entre las 12 y las 16 horas, puesto que las radiaciones son más intensas y, por lo tanto, más peligrosas.

Se vuelve más quebradizo y las puntas se rompen con mayor facilidad. Si el cabello está teñido, el sol oxida y deteriora el pigmento ya sea natural o artificial. Puede producir irritación en el cuero cabelludo.

Es mejor comenzar por exposiciones muy cortas (de 10 a 15 minutos como máximo los primeros días) para que la piel se acostumbre a los rayos solares, y asolearse en las primeras horas de la mañana o en las últimas de la tarde, cuando los rayos no caen de forma directa y son menos dañinos.

Las piernas y la parte interior de los brazos también son más lentas en broncearse, al contrario de los hombros o la cara externa del brazo.

Hay un lugar que ocupa el primer puesto en el ranking de registros más elevados de radiación ultravioleta: los Andes bolivianos, a 2.400 metros de la línea ecuatorial.

Es uno de los mitos más difundidos y es completamente falso: la crema solar no impide que te pongas moreno. Todo lo contrario, la piel se bronceará de forma más equilibrada, saludable y duradera cuando usas protector solar.

Tras la depilación puede resultar ideal para aliviar la irritación de la piel y recuperarla de sus estragos. También después de tomar el sol te ayuda a rehidratarla y aliviar el posible enrojecimiento. Por lo tanto, es capaz de convertirse en un apañado after sun en el caso de no tener uno a mano.

Ocurre lo mismo con el abdomen, que es la zona del cuerpo con menos concentración de melanocitos. Así pues, las piernas son una de las partes del cuerpo que más tardan más en broncearse debido a que tienen una concentración de melanocitos.