¿Cuál es la mejor tierra para sembrar fresas?

En definitiva, un suelo catalogado como arenoso o franco-arenoso (Perlita, vermiculita, fibra de coco) y homogéneamente profundo (igual o mayor a 15 cm de profundidad) se acercaría al ideal para nuestro cultivo.

Requiere de suelos con pH preferentemente neutros, suelos equilibrados, ricos en materia orgánica pero nunca suelos salinos, estos deben presentar buen drenaje y ser aireados, con textura arenosa, para mejorar la filtración y evitar así enfermedades de la raíz y la corona.

Por lo tanto, debemos usar un sustrato ácido y específico para cultivo fuera de suelo, normalmente hecho a base de corteza de pino, fibra de coco y turba, que aportan la densidad y el drenaje adecuados para el desarrollo correcto de las plantas.

Lo ideal es sembrar a finales de invierno o durante la temporada de primavera. El cultivo de la fresa se cumple en un periodo de 10 meses, posterior a la siembra. En cuanto al lugar para sembrar fresas, podemos decir que ellas se adaptan bien a cualquier lugar, solo requieren de mucha exposición solar.

A las fresas les gusta el sol, así que escoge un lugar soleado, con unas 7 horas de luz solar directa. Sin embargo, aunque es una gran amante del sol, tolera bastante bien a sombra, eso sí, su producción será mucho menor.

Por lo general, alrededor de 1-2 veces por semana (teniendo en cuenta las lluvias si el Minigarden está instalado en el exterior). Durante la primera semana después de la plantación, regar las fresas diariamente al final del día cuando el sol ya ha bajado de intensidad. Cuanto más agua, más crecerán las fresas.

Ciclo total 150 días (5 meses).

Para cultivar fresas en casa solo necesitas semillas y una maceta, un semillero o una mesa de cultivo, además de un buen sustrato para plantación. La profundidad en el recipiente es suficiente que sea de entre 15 y 20 centímetros. Deberás colocar entre dos o tres semillas en el semillero y regar en abundancia.

7 consejos para cuidar de tu planta de fresa

Poda de Invierno (cultivar día corto y neutro)

Valle Central: A fines de invierno (Agosto-Septiembre) en zonas con heladas tardías. Zona Costera: A mediados de invierno (Julio-Agosto) en zonas de clima templado, con el objetivo de adelantar la entrada en producción en primavera.

Coloca tus macetas de fresas en un espacio con buena luz

Para poder florecer y dar frutos, la fresa necesita entre seis y nueve horas diarias de sol. Si las cultivamos dentro de casa, la ubicación ideal será junto a una ventana. Y sí: pueden recibir sol directo, incluso en meses de calor.

Temperatura. Para lograr un fecundación ideal es imprescindible obtener una temperatura ambiente de 12°C y 25°C, con una humedad al 60 y 80%. Dependiendo de la variedad de fresa, se debe procurar un clima mínimo vegetativo de 2°C y máxima de 40°C, ya que un valor mayor a ese puede estar afectando la fructificación.

En el caso de las plantas frescas, el traslado desde el semillero al terreno de asiento definitivo se produce en los meses de octubre o noviembre, justo cuando la fresa ha entrado en ese período de latencia.

Para llevar a cabo su control y disminuir los daños en las plantaciones, aconseja colocar mallas en las patas de los túneles y cerrar el paso cada cinco túneles, ya que puede disminuir riesgos. Por último, señala que «es muy importante evitar pequeños huecos en las mallas.

Exceso de riego

Reducción en la producción de flores. Florescencia prematura, caída de la fruta y muerte de la vegetación. Patógenos. Utilización inadecuada de los nutrientes del suelo, los cuales pueden aumentar la susceptibilidad al daño por las plagas, enfermedades y la reducción de fructificación.

Micronutrientes: Además de los macronutrientes, las fresas necesitan una variedad de micronutrientes, incluyendo hierro, manganeso, cobre, y zinc. Estos son necesarios en cantidades menores, pero son igualmente importantes para el crecimiento saludable de las fresas.

Ácido salicílico (hojas) es el que ayuda a la inducción de la floración ya que intensifica el esquema de defensa natural de las plantas, evitando el estrés de las mismas.

Los fresales florecen desde finales de invierno hasta comienzos del verano, y sus frutos maduran durante toda la primavera hasta finales de verano.

La siembra de los fresones se realiza en primavera y verano, preferentemente en suelos algo arenosos o que permitan un buen drenaje y en los que no se produzcan acumulaciones de agua.

CÓMO SEMBRAR UNA PLANTA PASO A PASO

Habitualmente y por norma general, los tomates se siembran en primavera (entre marzo y mayo). En cambio, si somos de los que nos gusta ir a lo sencillo y compramos plantones de tomate, se aconseja plantar durante los meses de abril a junio.

Las fresas de día largo producen flores durante tres períodos y fruta durante la primavera, verano y otoño.

La planta de fresón es perenne, aunque se haya convertido en anual en el cultivo, es decir, que no se mantienen en explotaciones para el segundo año. Las fresas duran más, entre 3 y 4 años antes de tener que reemplazarlas por jóvenes plántulas que se desarrollan en el extremo de los estolones largos.

Se da una clara separación profesional y geográfica entre empresas productoras de plantas (viveristas) y productoras de fruto; las primeras se encuentran muy concentradas en algunas provincias de Castilla y León y las segundas en la zona costera de la provincia de Huelva.

Mide 8 centímetros de largo, 4de grosor y 34 de circunferencia. Lo avala el récord Guiness que ha logrado. Este tipo de fresa, llamada Ilan, tiende a crecer mucho y la temperatura afecta mucho su crecimiento. El récord anterior lo ostentaba un agricultor japonés con una fresa de 250 gramos en su cosecha de 2015.

La temperatura óptima para la fructificación se sitúa en torno a los 15-20ºC. Temperatura mínima vegetativa de 2ºC, y máxima de 40ºC, dependiendo de la variedad. Temperatura óptima para la fecundación entre 12ºC y 25ºC, a partir de esos valores resulta defectuosa o nula. Humedad relativa en torno al 60-80%.