¿Cuál es la moraleja del cuento de la liebre y la tortuga?

La liebre, por primera vez en su vida, se sintió avergonzada y jamás volvió a reírse de la tortuga. Moraleja: en la vida hay que ser humildes y tener en cuenta que los objetivos se consiguen con paciencia, dedicación, constancia y el trabajo bien hecho. Siempre es mejor ir lento pero a paso firme y seguro.

Cuando despierta, la tortuga estába a punto de cruzar la meta y la tortuga acaba ganando la carrera. La moraleja de la historia, que constituye una crítica a la arrogancia, es "despacio se llega lejos".

Una Lección de Amistad y Humildad

La Liebre aprendió una valiosa lección ese día: la velocidad no lo es todo. A veces, la paciencia y la perseverancia son más importantes. Reconoció el esfuerzo y la determinación de la Tortuga, y se disculpó por haberse burlado de ella.

La técnica de la tortuga es un gran entrenamiento para que el niño pueda desarrollar su inteligencia emocional desde pequeño. Esta técnica, además de ayudar a los niños a regular sus emociones, les ayuda a buscar la causa de sus enfados y ponerles solución.

NARRADOR: ZORRO: NARRADOR: Mientras la liebre y la tortuga hablaban, apareció por allí un zorro.

Con una gran embestida, la tortuga estiró el largo pescuezo y tocó la corteza del olmo un momento justo antes de que la liebre, jadeante, la alcanzara. ¡Había ganado la carrera!

Los personajes son: Señor Tortuga, Señor Liebre, narrador, otros animales del bosque.

Mediante este cuento se enseña al niño cómo controlar sus impulsos en situaciones diarias de pérdida de control tanto en el colegio como en casa. Asimismo, ayuda a controlar las acciones, emociones y sentimientos disruptivos.

Una vez más el escritor uruguayo Horacio Quiroga deleita a sus lectores con una historia que, combinando elementos reales y fantásticos, invita a una reflexión acerca de la solidaridad, la gratitud y la voluntad. Un hombre se interna en la selva para curarse de una enfermedad.

En muchas culturas, se la asocia con la sabiduría y la paciencia. Se cree que la tortuga tiene la capacidad de vivir mucho tiempo y, por lo tanto, ha acumulado una gran sabiduría a lo largo de su vida. Representa la idea de tomarse las cosas con calma, tener paciencia y aprender de las experiencias.

Las liebres y conejos también pueden simbolizar el alma de los cristianos que es acuciada por los pecados y tentaciones de los que tiene que escapar lanzada en veloz carrera y así se puede interpretar en algunas escenas de caza donde huye de los lebreles que le persiguen o es apresada por algún rapaz como el águila.

Temas: Generalmente los temas que se abordan en las fábulas son vicios humanos como la arrogancia, la mentira, etcétera; ya que detrás de cada una de estas se muestra una intención de criticar los comportamientos y actitudes que se van desarrollando dentro de la historia.

Las fábulas, en el sentido asumido del texto, puede conferir una contemplación a la formación del individuo, en la medida en que posibilita al educando el contacto con si- tuaciones que se aproximan de la realidad humana, y muchas veces promueven reflexio- nes sobre las relaciones sociales, sus consecuencias, y de este ...

(1). Una tortuga y una liebre siempre discutían sobre quién era más rápida. Para dirimir el conflicto de opiniones, decidieron correr una carrera.

El cuento o, mejor dicho, la fábula de la liebre y la tortuga es una historia que se cree que fue escrita por Esopo. Un señor de la antigua Grecia al que le gustaba escribir pequeños relatos con una moraleja al final.

620 - 560 a.

Para ganar la carrera, la pequeña tortuga trazó un astuto plan. Viendo que tendría muy pocas posibilidades de vencer, pensó en poner a diferentes miembros de su familia (todos ellos muy parecidos entre sí) en una parte del camino por el que debía discurrir la carrera.

La historia tiene como protagonista a una liebre y una tortuga que compiten en una carrera para ver cuál de las dos llega primero a la meta. La liebre es la favorita por su velocidad y habilidad.

Al final es la tortuga la que, gracias a su persistencia, la que obtiene la victoria.

Este cuento es una fábula, ya que los personajes principales son animales y, al final del texto hay una moraleja.

La liebre era famosa entre los animales por ser muy veloz y se pasaba el día correteando de un lado a otro sin parar, mientras que la tortuga caminaba siempre con pasos lentos y cansados, pues además de tener que soportar el peso de su gran caparazón no era demasiado ágil.

La tortuga y el hombre tienen una relación solidaria y leal, pues ambos se salvan la vida. Este hecho hace que sientan agradecimiento el uno por el otro, y que el hombre no se quiera separar de ella.

Originalmente, las tortugas eran terrestres; 100 millones de años después de su aparición, algunas evolucionaron para ser acuáticas y 50 millones después evolucionaron para ser marinas. Se puede decir que las tortugas marinas evolucionaron de líneas de descendientes por más de 80 millones de años.

La tortuga, al ver lo sucedido, ayudó al hombre tal como él había procedido con ella. Cada mañana la tortuga buscaba raíces y agua para que el hombre no muriera de hambre ni de sed. El hombre comía y bebía sin darse cuenta de quién lo ayudaba porque tenía delirio con la fiebre.