¿Cuál es la parte dura de los espárragos?

La parte inferior del espárrago es mucho más dura y leñosa que la punta, pero no por ello se debe desechar. Su sabor y su aroma perduran en cualquier preparación en la que se utilice este tallo.

Pelar los espárragos es muy fácil, conviene apoyarlos sobre una superficie o tabla firme y comenzar a pelar por debajo de la yema hacia el final . Pelamos una vez todo el espárrago y de la mitad hacia abajo pelaremos una vez más ya que la parte de abajo del espárrago es más leñosa.

Salvo que sean espárragos fresquísimos y muy jóvenes, como los silvestres recolectados por nosotros mismos, normalmente tendremos que cortar una parte del extremo inferior del tallo.

Para cortar los espárragos cogemos todo el manojo y por la parte en la que el cuchillo se hunda sin hacer demasiada presión cortamos la parte inferior. De esta forma todos tendrán el mismo tamaño.

No te preocupes porque es súper sencillo. En primer lugar, debes limpiarlos con agua, para eliminar posibles restos de tierra. Puedes hacerlo manualmente, bajo el grifo, o colocarlos dentro de un escurridor o colador y pasarlos por agua. El segundo paso es secarlos con un trapo de cocina o un poco de papel de cocina.

Así, estos son los tallos que se comen más utilizados en la cocina: Espárragos: son uno de los mejores tallos comestibles, siendo además recomendados en muchas dietas para bajar y mantener el peso porque tienen pocas calorías y están formados en su mayoría por agua.

Los espárragos verdes y blancos son la misma planta, solo que en diferentes etapas de su maduración. El espárrago de color blanco corresponde al brote en su etapa más joven. Se trata del tallo que ha crecido dentro de la tierra y todavía no ha salido al exterior.

Si se sirven en aperitivo, se pueden coger con los dedos (o con los palillos, si tu alma torera se regodea en ello y tienes pulso firme). Si están en una ensalada, siempre con el tenedor. El hueso no se escupe, se recoge con los dedos y se deja en el borde del plato o en el recipiente que haya.

Los espárragos pueden comerse crudos, cocidos al vapor, hervidos, a la parrilla, asados o incorporados en guisos, sopas y ensaladas. El consumo de espárrago es ideal para dietas que requieren poco sodio y alto contenido de fibra, así como de vitaminas A, C y hierro.

✔︎ Poner en una cazuela ancha, agua abundante con dos cucharadas soperas de sal, dos cucharadas soperas de aceite de oliva virgen y una cucharada de azúcar, que nos sirve para quitar el amargor del espárrago. Cuando empiece a hervir ponerlo a fuego suave y que cueza durante 10 minutos.

Para cortar los espárragos verdes, lo más lógico es buscar con el cuchillo la zona en la que, sin hacer mucha presión, éste se hunda ligeramente. De esta forma más o menos tendrán todos el mismo tamaño y habremos desechado la parte más dura.

Esta agua se puede añadir a cualquier sopa de verdura, pescado o fumet para aumentar la intensidad, pero también a todo tipo de guisos en los que, sencillamente, queramos potenciar el sabor. Si hay una receta donde el líquido de nuestros espárragos aporta un extra de sabor, es en las de cremas o vichyssoises.

Conservar. Lo más adecuado es consumir los espárragos lo antes posible después de comprarlos. Es recomendable guardarlos en la nevera enrollados en un paño húmedo. Los espárragos se pueden conservar en la nevera entre tres días y una semana, y un día en un lugar fresco.

Una manera de que aguante un manojo de espárragos en condiciones óptimas en el frigorífico es envolverlo en una gasa grande, humedecida con agua y escurrida, y dejarlo en el frigorífico. Las gasas se compran en la farmacia, se lavan bien y sirven para varias veces.

Para conservar al máximo sus propiedades, los espárragos deben guardarse en la nevera envueltos en un paño húmedo o en un envase.

Pártelo por la mitad y muerde uno de los extremos recién cortados. Cuanta más agua suelte, más fresco será. No descartes un espárrago blanco fresco por tener vetas moradas. Significa que esa zona ha estado expuesta al sol, pero no que se haya echado a perder.

Espárragos - 5 al día.

Espárragos. No más de un kilogramo por persona y día en el caso de frutos y plantas, como por ejemplo los espárragos verdes.

Los espárragos trigueros tienen muy pocas calorías y, además, son una gran fuente de fibra, que evitan el estreñimiento y favorecen la eliminación de toxinas. Por último, sacian el apetito. Por todo ello, los espárragos son ideales para incluir en una dieta de adelgazamiento.

Se trata de una verdura alargada, característica por un intenso sabor, especialmente si son trigueros, es decir, aquellos que nacen de forma silvestre.

En los espárragos verdes destacan, como todas las hortalizas, por su gran contenido en agua, aunque son unas de las verduras que más proteínas aportan y son ricas en fibra. Vitaminas antioxidantes C, E y provitamina A, además de folatos. Vitaminas del grupo B.

La primera de las razones es una cuestión básica de oferta y demanda: se produce poco y en poco tiempo. La temporada dura meses escasos: desde finales de marzo, hasta mayo o junio, dependiendo de la zona.

Lavar bien los espárragos y cortarles el tallo gordo. Luego, hervir agua en una olla grande y añadir 1 cucharadita de sal. Cuando el agua esté en su punto de ebullición (tirando burbujas) poner los espárragos y cocer por 4 minutos. ni más ni menos..

Espárragos en crudo

Para ello os recomiendo utilizar un pelador o una mandolina y cortar tiras finísimas. También podéis picarlo con el cuchillo en una brunoise fina. Este espárrago crudo tiene un sabor muy intenso y funciona muy bien en recetas como ensaladas de tomate o en gazpachos, usado como tropezón crujiente.

Espárragos: Lo más correcto es tomarlos con las manos. Se cogen por la parte del tallo con los dedos, se mojan en la salsa, si es que hay, y se meten en la boca dando un bocado y jamás chupando.

Espárragos verdes

Son los más conocidos en todo el mundo por su característico color verde intenso el cual lo obtiene de la clorofila. Los espárragos verdes tienen un sabor suave y herbáceo haciendo que sean el ingrediente ideal para utilizarse como entrante, guarnición, cremas o salsas.

Desde mediados de marzo a junio, la temporada del espárrago blanco es esperada por muchos para poder disfrutar de una de las mayores bondades de la huerta navarra.