¿Cuál es la temperatura del hidrógeno?

En condiciones normales el hidrógeno es un gas incoloro, inodoro, insípido e inflamable. De hecho, el hidrógeno es la sustancia más inflamable conocida. Su punto de ebullición se encuentra en los -257,9ºC y su punto de fusión en los -259,2 ºC.

Es el único gas combustible que no contiene ningún átomo de carbono. H2 tiene la conductividad térmica más alta de todos los gases. Combinado con oxígeno, la llama de hidrógeno alcanza una temperatura de 2834 ° C..

Cuando el hidrógeno se combina con un agente oxidante y luego se enciende, el proceso de combustión puede ser explosivo. Si este proceso se lleva a cabo en una sala cerrada, con un aumento rápido de presión, puede ser muy destructivo, y tiene lugar a causa del calor generado.

Esto hace que la ignición sea menos probable, pero otra diferencia es que el hidrógeno se enciende y arde más fácilmente que la gasolina o el gasóleo. De hecho, incluso una chispa de electricidad estática procedente del dedo de una persona es suficiente para desencadenar una explosión cuando hay hidrógeno.

Extremadamente inflamable. Muchas reacciones pueden producir incendio o explosión. Las mezclas gas/aire son explosivas. Evitar las llamas, NO producir chispas y NO fumar.

Es necesario un volumen de 11.2 Nm³ (volumen del maletero de un gran vehículo utilitario o comercial) para almacenar solo 1 kg de hidrógeno, que es la cantidad que se requiere para recorrer aproximadamente 100 km.

Por otro lado es uno de los combustibles más ligeros; 1 litro de hidrógeno líquido pesa solo 0,0708 kg, lo que equivale a una densidad de 70,8 kg/m³ (a 20 K).

Pero no se utiliza como combustible doméstico por varias razones: el hidrógeno no está fácilmente disponible y el coste de producción es alto. A diferencia de otros gases, el hidrógeno no está fácilmente disponible en la atmósfera. Requiere procesos como la electrólisis del agua para su producción. Este es un proceso muy costoso y que requiere mucho tiempo.

La combustión no puede ocurrir en un tanque que contiene solo hidrógeno. Para que se produzca la combustión se necesitan oxígeno (o aire) y una fuente de ignición . El hidrógeno arde con una llama azul pálida que es casi invisible a la luz del día. La llama puede aparecer amarilla si hay impurezas en el aire como polvo o sodio.

El hidrógeno es un gas combustible pero no favorece el proceso de combustión. Cuando se acerca la vela a la boca de un frasco que contiene Hidrógeno con la ayuda del Oxígeno de la atmósfera. Al empujar la vela dentro del frasco, se corta el suministro de oxígeno y, por lo tanto, el fuego se extingue.

Difícil de almacenar: Uno de los principales hándicaps del hidrógeno es que es un gas muy ligero, que se almacena, distribuye y consume en estado gaseoso, lo que dificulta su almacenamiento y transporte.

El hidrógeno es altamente inflamable

El hidrógeno es muy inflamable, difícil de almacenar y supone un riesgo para la seguridad en caso de accidente. Sin embargo, fabricantes de automóviles como Toyota insisten en que los coches eléctricos de pila de combustible son tan seguros como los vehículos convencionales.

Los experimentos de laboratorio indican que la velocidad de propagación de la llama del hidrógeno es mayor que la del metano, y que una explosión de hidrógeno/aire sería más intensa que una explosión de metano/aire , tanto con respecto a la presión de explosión como a la fluctuación de presión 61.

La combustión de hidrógeno puro produce, exclusivamente, calor y agua. Al no generarse carbono y debido a la presencia del vapor de agua (que absorbe calor), un fuego producido por hidrógeno tendría menor poder de dispersión de calor que el fuego producido por un hidrocarburo.

Las mezclas de hidrógeno y aire explotan con bastante normalidad con presiones iniciales de hasta 500 atmósferas , pero a 750 atmósferas la detonación se produce con suficiente violencia como para dañar el aparato. Se han hecho explotar con éxito mezclas de monóxido de carbono y aire a presiones iniciales de hasta 1.000 atmósferas.

No puede ocurrir una explosión en un tanque o en cualquier lugar contenido que contenga solo hidrógeno. Un oxidante, como el oxígeno, debe estar presente en una concentración de al menos un 10 % de oxígeno puro o un 41 % de aire .

En cuanto al consumo de agua, se necesitan nueve litros para producir un solo litro de hidrógeno. Se está investigando con agua desalada o incluso con depuradora para buscar otras fuentes alternativa sal agua potable, pero ¿será un problema producir hidrógeno en un país con estrés hídrico ?

Debido a su baja densidad, el hidrógeno es un gas difícil de almacenar.

El hidrógeno verde hoy:

Se necesita agua ultrapura para producir hidrógeno verde.

Es muy fácil combinar el hidrógeno y el oxígeno (quemar hidrógeno) para obtener energía: 33,33 kWh por kilogramo de hidrógeno. Es decir, la energía que precisa una cocina de 1 kW funcionando 33,33 horas, o la de un coche de 66 kW marchando a toda potencia una media hora.

Un vehículo de pila de combustible puede albergar entre 6 y 7 kilogramos de hidrógeno en su depósito, y tiene un consumo aproximado de 1 kilogramo por cada 100 kilómetros. Así, el vehículo dispondría de una autonomía aproximada (dependiendo del modelo), de entre 600 y 700 kilómetros.

En la actualidad el hidrógeno se almacena en estado líquido —en tanques especiales a temperaturas muy bajas— o a alta presión.

Los automóviles con celda de combustible funcionan con gas de hidrógeno comprimido que se alimenta a una pila de celda de combustible a bordo que no quema el gas, sino que transforma la energía química del combustible en energía eléctrica. Esta electricidad luego alimenta los motores eléctricos del automóvil.

Los coches de hidrógeno son demasiado caros

El proceso de almacenamiento, extracción y transporte necesario para producir hidrógeno es más complejo y costoso que el combustible fósil. En Estados Unidos, el precio inicial de un coche de hidrógeno oscila entre 49.000 y 56.000 dólares, lo que es mucho más caro que los vehículos híbridos y eléctricos normales.

Es muy ineficiente energéticamente . El hidrógeno comienza con la electricidad necesaria para generarlo. Luego hay que comprimirlo, licuarlo, transportarlo en camiones, gasificarlo, recomprimirlo y luego el coche tiene que volver a convertirse en electricidad. Pierdes la mitad de la energía.

El contacto con la piel puede producir irritación y descoloramiento pasajero de la piel y el cabello. El contacto con soluciones concentradas puede causar graves quemaduras de la piel y ampollas.

El hidrógeno también se puede utilizar como combustible para impulsar automóviles y calentar edificios. El beneficio más importante de utilizar hidrógeno como combustible es que cuando lo quemas, el subproducto es solo agua . El hidrógeno también se puede utilizar como forma de almacenar energía, y este uso tiene el potencial de tener un gran impacto en nuestro futuro.