¿Cuál fue el profeta que hizo más milagros en la Biblia?

Los milagros de Eliseo Eliseo efectuó muchos grandes milagros en los que demostró su compasión por la gente y confirmó aún más el hecho de que era el verdadero sucesor de Elías el Profeta.

La narrativa de Reyes también registra el doble de milagros en Eliseo con respecto a Elías (14 vs 7). Algunos expertos especulan que estas diferencias eran parte de la respuesta de Dios para garantizar la “doble porción” del espíritu de Elías (2Reyes 2:9).

Así fue como Isaías se convirtió en uno de los más grandes Profetas de Dios, anunciando al pueblo de Israel que un día el Mesías salvaría a su pueblo y le traería la Paz y la Justicia para siempre. Vivió en Jerusalén y fue consejero y asesor de los reyes Jotam, Ajaz y Ezequías.

Elias el Profeta fue un hombre así, un hombre de poder, de milagros; un profeta tan digno que fue trasladado y recogido de la tierra en un carro de fuego. No es de maravillarse que Elias haya llegado a ser uno de los grandes personajes en la historia de Israel.

Eliseo fue un profeta que hizo milagros (con el poder de Dios), que predijo el futuro (con el poder de Dios) y también sabía leer las mentes de otros (con el poder de Dios). El agua de Jericó era mala. Eliseo tiró sal al agua, como Dios le mandó hacer y el agua ha sido pura desde entonces.

Él apartó las aguas del río Jordán, sanó las aguas de Jericó, multiplicó el aceite de la viuda, revivió a un muchacho, sanó a la gente que había comido un guisado envenenado, dio de comer a muchos hambrientos, sanó la lepra de Naamán, hizo flotar un hacha y guió a los reyes en la guerra.

Eliseo hace el milagro del aceite, levanta a un joven de los muertos y sana la lepra de Naamán.

“Se presentó la pregunta por motivo de lo que dijo Jesús: 'Os digo que entre los nacidos de mujeres, no hay mayor profeta que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de Dios es mayor que él' Lucas 7:28.

Moisés. El profeta más importante por su papel como liberador de los judíos y como el encargado por Dios de comunicar la ley escrita cristiana.

Moisés, un profeta del Antiguo Testamento, guió a miles de personas de su pueblo, sacándolas del cautiverio en Egipto y llevándolas hasta la tierra prometida. Él fue quien escribió los primeros cinco libros del Antiguo Testamento y quien registró los Diez Mandamientos.

Samuel actuó como último juez de Israel durante toda su vida y fue el primer profeta. Se quitaron todos los dioses extranjeros, el pueblo se convirtió y adoraba sólo a Dios.

En Apocalipsis 15 se nos dice que Juan vio siete ángeles salir del templo en la presencia de Dios.

¿POR QUÉ TUVO ELÍAS QUE ORAR SIETE VECES?

Si alguien nos preguntara cuál fue el primer milagro que hizo Jesús, no dudaríamos en responder que fue el del agua convertida en vino durante una fiesta de bodas, en la ciudad de Caná de Galilea.

La resucitación del hijo de la viuda de Sarepta es un milagro del profeta Elías registrado en la Biblia hebrea, 1 Reyes 17, que tiene lugar en la ciudad fenicia de Sarepta.

“Un milagro es un acontecimiento extraordinario causado por el poder de Dios. Los milagros representan un elemento importante en la obra de Jesucristo. Incluyen las sanidades, la restauración de la vida a los muertos y la resurrección. Los milagros forman parte del evangelio de Jesucristo.

Jehová pidió a Elías el Profeta que regresara a casa y preparara a otro profeta; el nombre de ese nuevo profeta era Eliseo.

De hecho, Kings nos dice que el profeta no murió, sino que entró al cielo con vida "por fuego", "en un torbellino", llevado en un carro de fuego. Junto a Enoc y la Virgen María, él es el único otro personaje bíblico llevado corporalmente al cielo.

La historia de Eliseo empieza en 1 Reyes 19:14-21 cuando Dios le dice a Elías que unja a Eliseo como el profeta que lo reemplazará. En este pasaje leemos que Elías encuentra a Eliseo arando un campo con un par de bueyes e inmediatamente arroja su manto sobre Eliseo como invitación a seguirle.

Eliseo pidió a Jehová que le mostrara al joven lo que Eliseo veía. Jehová le mostró un ejército celestial con caballos y carros de fuego para protegerlos. El ejército sirio fue enceguecido por el poder de Dios. Ya no volvieron a luchar contra los israelitas.

9 Y aconteció que cuando hubieron pasado, Elías dijo a Eliseo: Pide lo que quieras que haga por ti, antes que yo sea quitado de ti. Y dijo Eliseo: Te ruego que una doble porción de tu espíritu sea sobre mí. 10 Y él le dijo: Cosa difícil has pedido. Si me ves cuando sea quitado de ti, te será concedido; pero si no, no.

20 Y murió Eliseo y lo sepultaron. Ya entrado el año, vinieron bandas armadas de moabitas a la tierra. 21 Y aconteció que al sepultar unos a un hombre, he aquí que vieron una banda armada y arrojaron al hombre en el sepulcro de Eliseo; y cuando cayó el muerto y tocó los huesos de Eliseo, revivió y se puso de pie.

Moisés vio a Dios cara a cara en una montaña que se desconoce después de haber hablado con el Señor en la zarza que ardía y antes de ir a liberar a los hijos de Israel de Egipto (véase Moisés 1:1–2, 17, 25–26, 42; véase también Éxodo 3:1–10).

Mateo 1:18–23: Se cumple la profecía de Isaías. Isaías 9:6: Isaías profetiza que Jesucristo vendrá como un niño; se describe a Jesús con varios nombres.

Juan el Bautista es el último personaje del Antiguo Testamento y el último de los profetas que anuncia que ese reencuentro de Dios con el hombre está cerca y por eso pide a la gente de su tiempo que se convierta y cambie su vida. El Reino de Dios está cerca.

Isaías nació probablemente en Jerusalén hacia 765 a. C. y fue asesinado (aserrado), según se cree, por el rey Manasés en 695 a. C.

Hijo de santa Isabel y, por lo tanto, primo de Jesús, Juan es considerado el último profeta antes de la llegada del Mesías y, por este motivo, de le denomina "Precursor".