¿Cuáles son las tres propiedades de la luz?

Aunque imperceptible para el ojo humano, la luz no viaja en línea recta, sino que se propaga en ondas que giran sobre su propio eje. La luz tiene otras propiedades ya conocidas como la longitud y la intensidad, además de las ya mencionadas refracción y reflexión.

La luz presenta tres propiedades características: Se propaga en línea recta. Se refleja cuando llega a una superficie reflectante. Cambia de dirección cuando pasa de un medio a otro (se refracta).

La luz es una emisión ondulatoria y corpuscular de fotones, es decir, al mismo tiempo se comporta como si estuviera hecha de ondas y de materia. Se desplaza siempre en línea recta, a una velocidad definida y constante.

En este post os proponemos que profundicemos juntos en las cuatro propiedades de la luz con las que todos los fotógrafos debemos estar familiarizados: la calidad, el color, la dirección y la intensidad.

PROPIEDADES DE LA LUZ

PROPIEDADES DE LA LUZ

Algunas de sus características son: Es una forma de energía que proviene de fuentes naturales y artificiales. Posee características tales como: Se propaga en todas direcciones, Viaja en línea recta. Los cuerpos ante la luz pueden ser: Transparentes, translúcidos y opacos.

Una investigación liderada por físicos de la Universidad de Salamanca ha demostrado que la luz puede forzar una torsión sobre sí misma en ausencia de fuerzas externas. Esta propiedad, descrita por primera vez, podría ser usada en el futuro para manipular nanoestructuras y átomos en escalas de tiempo ultrarrápidas.

Cuando no pasa y rebota, se llama Reflexión. Cuando la luz pasa a través de un objeto se llama Refracción. Hace posible que veamos objetos que no emiten luz propia. Esta propiedad es muy notoria en las superficies pulidas y lisas, como los espejos, la superficie del agua en reposo y el piso brillante.

Modelo onda-partícula

Sin embargo, la luz también puede ser considerada como por partículas, llamadas fotones, por lo que, en parte, Newton también tuvo la razón. Por ello, el modelo que actualmente explica la luz se llama onda- partícula o modelo dual.

Los tipos de iluminación son cuatro: general, puntual, ambiental y decorativo. Cada uno destinado a un uso distinto según lo que se quiera iluminar y te lo explicaremos a continuación.

Luz frontal: situada delante del objeto. Luz lateral: situada a un lado del objeto. Contraluz: situada detrás del motivo. Luz cenital: situada desde arriba.

La luz se produce en las fuentes de luz. Hay dos tipos de fuentes de luz: Naturales: como el Sol y el fuego. Artificiales: como las ampolletas, las velas, los fósforos, los tubos fluorescentes, etc. La mayor parte de las fuentes de luz artificiales funcionan con energía eléctrica.

La luz entra en forma de onda por nuestro cristalino y se refracta, ya que el cristalino hace la función de una lente. Y la luz, ya como partícula, interacciona con las células receptoras que se encuentran en nuestra retina.

El comportamiento de la luz.

A fines del siglo XVII se conocían dos teorías sobre la naturaleza de la luz, la Teoría Corpuscular de Isaac Newton y la Teoría Ondulatoria de Christian Huygens.

Concretamente, la luz es energía y el fenómeno del color es un producto de la interacción de la energía y la materia. Las ondas electromagnéticas existen como consecuencia de dos efectos: Un campo magnético variable genera un campo eléctrico; un campo eléctrico variable produce un campo magnético.

Un espejo es un cuerpo opaco con una superficie lisa que refleja casi la totalidad de la luz que recibe. En aquellos que son planos, los rayos lumínicos rebotan y se desvían de tal forma que forman imágenes claras, del mismo tamaño del objeto reflejado. Por esta razón, nos vemos reflejados cuando miramos un espejo.

La luz es una onda, y como toda buena onda, posee propiedades ondulatorias como frecuencia, longitud de onda y amplitud. Las ondas electromagnéticas son ondas transversales, pues los campos eléctricos y magnéticos oscilan perpendicularmente en relación con la dirección de propagación de la onda.

Como todo el mundo sabe, la luz blanca es el resultado de la suma de los siete colores del arco iris. Los distintos colores son sólo ondas electromagnéticas con distintas longitudes de onda. A menor longitud de onda, más cerca del violeta estará el color, y a mayor longitud de onda, más cerca del rojo.

La refracción se origina en el cambio de velocidad de propagación de la onda. Un ejemplo de este fenómeno se ve cuando se sumerge un lápiz en un vaso con agua: el lápiz parece quebrado. También se produce refracción cuando la luz atraviesa capas de aire a distinta temperatura, de la que depende el índice de refracción.

La refracción es el fenómeno por el cual la luz que se propaga en forma de onda cambia de velocidad al pasar de un medio material a otro distinto, por ejemplo, cambiar del aire al agua.

La luz viaja en línea recta y se refleja en las cosas.

El ala del sombrero impide que el sol nos pegue en los ojos. La luz se refleja en los objetos y nos permite ver. Algunos objetos reflejan muy bien la luz, como espejos y papeles blancos. Otros objetos, como el papel de construcción marrón, no reflejan tanta luz.

Aunque, el uso de la electricidad tal y como se conoce en la actualidad es el resultado de muchas investigaciones y años de desarrollo, el invento se le atribuye a Thomas Edison (1879), puesto que consiguió iluminar una bombilla incandescente con energía.

Las fuentes luminosas naturales son las que emiten luz propia y se encuentran en la naturaleza. Por ejemplo, el Sol, las estrellas y algunos insectos como las luciérnagas.

En los tiempos en que los filósofos griegos se planteaban las primeras teorías sobre la luz, se cree que en Nínive, capital de la antigua Asiria (en lo que hoy es Irak), se empleaban cristales de roca con apariencia de lentes, lo mismo que en China (500 a.C.), donde Confucio hizo referencia al empleo de una “lente”.

Algunos ejemplos de reflexión de la luz son los siguientes: Los destellos de la luz solar en las paredes, cuando impactan sobre la pantalla pulida de un celular o un reloj de pulsera. La posibilidad de vernos en un espejo, cuya superficie muy pulida permite devolver los haces de luz hacia nuestros ojos.

Vemos objetos porque emiten su propia luz o la luz se refleja en los objetos y entra en nuestros ojos. La luna es un ejemplo interesante. No produce su propia luz; podemos ver la luna porque refleja la luz del sol. Si un objeto no reflejara ninguna luz, no podríamos verlo.