¿Cuándo dos bienes son complementarios?

¿Y qué son los bienes complementarios? Son bienes que satisfacen conjuntamente un mismo tipo de necesidad y hacen que su demanda fluctúe a la par, ya que dependen uno de otro. Así, por ejemplo, cuando el precio de un producto complementario sube notablemente, es probable que baje la demanda de ambos productos.

El concepto hace referencia a todos aquellos productos que dependen unos de otros. Es decir, se encuentran tan estrechamente ligados, que el comportamiento de uno incide de forma inevitable en el comportamiento del otro. El ejemplo clásico de bienes complementarios es el de los coches y la gasolina.

El café y el azúcar son ejemplos de bienes complementarios, y como consecuencia el alza en el precio del azúcar afecta negativamente el consumo del café.

Los bienes sustitutivos son perfectos cuando se pueden utilizar exactamente de la misma manera y con exactamente los mismos resultados; en este caso el consumidor elegirá uno u otro por otros motivos, pero no por sus diferencias de uso o, dicho de otro modo, no existe ninguna razón para elegir uno u otro porque su uso ...

Dos bienes son independientes si su consumo o uso no está relacionado. El uso de cepillos de dientes, por ejemplo, no está relacionado con el consumo o uso de motocicletas. Los bienes independientes son bienes que no dependen en modo alguno de cómo se usa el otro bien.

Dos bienes son complementarios si la variación en el precio de uno de ellos provoca una variación en la dirección opuesta de la cantidad demandada del otro. Dos bienes son sustitutivos si la variación en el precio de uno de ellos provoca una variación en la misma dirección de la cantidad demandada del otro.

Un bien complementario es aquel que se debe utilizar conjuntamente con otro para poder satisfacer la demanda del consumidor. Es decir, dos (o más) bienes complementarios son capaces de cubrir una necesidad de manera conjunta. Pero por separado no generan la misma utilidad (incluso esta puede ser nula).

Bienes de primera necesidad: su demanda se suele mantener constante, ya que son bienes básicos como el pan.

Ejemplos de bienes de consumo son: Alimentos. Frutas, lácteos, carnes, pescados, pollo, leche, consumibles en general.

Bienes perecederos: Productos de vida útil corta y susceptibles de deteriorarse ante ciertas condiciones ambientales. Son los que deben tratarse con cuidado y los que poseen un tiempo finito para consumirse. Ejemplos: Frutas, productos lácteos, verduras, moluscos, peces, carnes y alimentos procesados.

Llamamos bien Giffen a todo aquel bien que incumpla la Ley Normal de la Demanda, es decir, aquellos que ven su demanda aumentar en las situaciones donde su precio también aumenta.

– Bienes privados

Tienen un dueño (persona o institución privada) que puede acceder a ellos y disfrutarlos de forma exclusiva, porque al comprarlo obtuvo un título de propiedad. Por ejemplo, una vivienda.

El bien sustituto es aquel que puede satisfacer la misma necesidad que otro. De esta forma, a ojos del consumidor, el bien sustituto puede reemplazar la función de otro, sean o no iguales en cuanto a sus características o precio.

Medio de cambio, porque es intercambiable por otros bienes y servicios.

Los bienes económicos o bienes escasos, por oposición a los bienes libres, son aquellos que se adquieren en el mercado, generalmente pagando un precio por ellos y que satisface directa o indirectamente una necesidad.

¿Y qué son los bienes complementarios? Son bienes que satisfacen conjuntamente un mismo tipo de necesidad y hacen que su demanda fluctúe a la par, ya que dependen uno de otro. Así, por ejemplo, cuando el precio de un producto complementario sube notablemente, es probable que baje la demanda de ambos productos.

Un bien normal es todo aquel bien que al sufrir un cambio en el ingreso aumenta la demanda de este. Entre los bienes normales se puede encontrar la comida como la carne, si tenemos un ingreso de 10.000 al mes y con eso compramos 2kg de carne, al tener 20.000 al mes nuestra demanda de carne podría aumentar a 4kg.

Esto es debido a que, aunque aumente el precio del bien inferior, si sigue siendo de menor precio que otros posibles sustitutivos, su consumidor seguirá estando obligado a consumirlos porque seguirá siendo más barato y asequible que los bienes normales, así que seguirá consumiéndolo aunque suba de precio.

Las curvas de Engel son funciones que describen cómo el gasto de un consumidor en un bien o servicio está relacionado con su ingreso total, manteniendo los precios constantes.

Para determinar si los bienes son complementarios o sustitutos tomamos como base la elasticidad precio cruzada: si la elasticidad precio cruzada es positiva, los bienes son sustitutos; si la elasticidad precio cruzada es negativa, los bienes son complementarios.

Ejemplos de bienes sustitutos

Automóvil, motocicleta, bicicleta y transporte público. Manteca y margarina. Te y café. Bananas y manzanas.

Servicios Sustitutivos 2: Dos servicios son sustitutivos cuando los consumidores consideran que son “parecidos” y pueden sustituir unos por otros. Servicios complementarios 3: Dos servicios son complementarios cuando los consumidores desean consumirlos a la vez.

Ejemplos de bienes muebles son el mobiliario de un lugar, objetos decorativos como obras de arte, vehículos, aparatos electrónicos, joyas, papel moneda o libros, entre otros.

Bienes económicos: Son bienes a los que no todo el mundo puede acceder, dadas sus características. Por ejemplo, el petróleo.

Ejemplos de bienes transables: autos, café, textiles, maquinaria, productos químicos, trigo, teléfonos etc.

El adquirir bienes de conveniencia no nos supone ni tiempo ni esfuerzo para compararlos con otros, ya que si no los encontramos los sustituimos rápidamente por otro con facilidad. Un ejemplo de este tipo de bienes pueden ser los alimentos en general, la gasolina, los refrescos…

BIENES PERECEDEROS

Es decir, perder su utilidad en muy poco tiempo y dentro de este grupo de bienes entran los alimentos.