¿Cuándo se dice gloria?

El Gloria en la misa Se canta o se dice en voz alta los domingos fuera de los tiempos de Adviento y de Cuaresma, en las solemnidades y en las fiestas, y en algunas celebraciones peculiares más solemnes.

El Gloria se canta o se recita los domingos, fuera de los tiempos de Adviento y Cuaresma, en las solemnidades y fiestas y en algunas celebraciones de particular solemnidad.

Esta oración “se canta o se dice en voz alta los domingos” en Misa; con excepción de los domingos de “Adviento y de Cuaresma” y tampoco en “las solemnidades y en las fiestas, y en algunas celebraciones peculiares más solemnes”.

Canto del Aleluya fuera del tiempo pascual

El canto del “Aleluya” no es exclusivo del tiempo pascual “sino todo el año, aunque con menos frecuencia, con la excepción del tiempo de Cuaresma, en que se omite totalmente y sin excepción, desde el Miércoles de Ceniza hasta el Sábado Santo”.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Después de la lectura que precede inmediatamente al Evangelio, se canta el Aleluya u otro canto establecido por las rúbricas, según las exigencias del tiempo litúrgico.

El comulgante debe responder de manera audible "Amén", indicando, por su respuesta, su creencia de que este pequeño pedazo de pan y el vino de este cáliz son en realidad el cuerpo y la sangre de Cristo, el Señor.

En el tiempo de Cuaresma, “se sustituye la palabra “Aleluya” por una expresión equivalente, que encontramos en un apéndice al final de los leccionarios“, algo que se detalla en las rúbricas, como por ejemplo: “Gloria y honor a ti, Señor, Jesús…”.

No es que la Iglesia quiera que dejemos de alabar a Dios durante ese tiempo, de ningún modo. Suprimimos el Aleluya porque, desde mucho antes de la venida de Cristo, esa palabra pertenecía especialmente a la temporada pascual, a la temporada de la Pascua judía.

Luego, de pie, vuelto hacia el altar, el sacerdote dice en secreto: El Cuerpo de Cristo me guarde para la vida eterna, y con reverencia consume el Cuerpo de Cristo. Después toma el cáliz diciendo en secreto: La Sangre de Cristo me guarde para la vida eterna, y con reverencia toma la Sangre de Cristo.

Como lo dijo un perceptivo ministro músico: La iglesia no canta estas grandes canciones durante la Cuaresma por la misma razón que la iglesia no canta Jesucristo ha resucitado hoy, sino hasta que llegamos a ese momento en la liturgia.

Aleluya (←Alleluia_(latín)←ἀλληλούϊα_(griego)← הַלְּלוּיָהּ_(hebreo) '¡Alabad a Yahveh! ')​ es una interjección de júbilo y gratitud muy común en la Biblia , que se adoptó para uso litúrgico en el judaísmo y en el cristianismo.

Aleluya significa “¡Alabado sea el Señor!” y resuena a lo largo de todo el año, excepto durante la Cuaresma. No es que la Iglesia quiera que dejemos de alabar a Dios durante ese tiempo, de ningún modo.

Fue una canción patriótica que se popularizó en la época de 1811 con la declaración de Independencia y que se cantaba en la realización de actos revolucionarios de aquel entonces. Fue escrita originalmente por Vicente Salías y su música es de Juan José Landaeta.

El Gloria es un antiquísimo y venerable himno con el que la Iglesia, congregada en el Espíritu Santo, glorifica a Dios Padre y al Cordero y le presenta sus súplicas. El texto de este himno no puede cambiarse por otro.

Se recita un gloria antes de la siguiente cuenta grande. Se anuncia el primer misterio del rosario de ese día y se recita un padrenuestro. En cada una de las diez siguientes cuentas pequeñas (una decena) se recita un avemaría mientras se reflexiona en el misterio. Se recita un gloria luego de las diez avemarías.

Hosanna es nuestra súplica a Dios de que nos salve; aleluya expresa nuestra alabanza al Señor por la esperanza de la salvación y la exaltación. En el hosanna y el aleluya reconocemos a Jesucristo viviente como la esencia de la Pascua de Resurrección y de la Restauración de los últimos días.

Cada celebración de la Eucaristía tiene cuatro partes principales: Ritos iniciales, Liturgia de la Palabra, Liturgia Eucarística y Ritos de conclusión.

2803. Después de habernos puesto en presencia de Dios nuestro Padre para adorarle, amarle y bendecirle, el Espíritu filial hace surgir de nuestros corazones siete peticiones, siete bendiciones.

Si la Comunión se recibe en la mano, las manos deben estar completamente limpias. Si uno es diestro, la mano izquierda debe descansar sobe la mano derecha. La hostia será luego depositada sobre la palma de la mano izquierda y luego tomada por la mano derecha hasta llevarla a la boca.

El sacerdote empieza: En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. El pueblo responde: Amén.

Cosas que no debes hacer en Misa y tal vez no lo sabías…

A continuación, damos a conocer las seis prácticas que debe evitarse durante la Cuaresma:

Por eso, entre otras cosas, para reflejar el carácter de penitencia de la Cuaresma se prohíbe adornar el altar con flores (que pueden ser sustituidas por plantas ornamentales), así como en la misa católica se canta “Gloria” como siempre se hace al final del acto penitencial, entre otras costumbres.

Los Cristianos de Occidente y las Iglesias Ortodoxas de Oriente. En primer lugar, la costumbre de no cantar el Aleluya durante la Cuaresma es una costumbre de la Iglesia Occidental.

Se recita solo en domingos y solemnidades, mas puede también decirse en peculiares celebraciones más solemnes. ​ En ocasiones, se omite después de la profesión de fe expresada en una renovación de promesas bautismales.

El Aleluya es una aclamación a Cristo, y por tanto un tipo concreto de oración, festiva y exultante. El gesto típico de oración para la asamblea es estar de pie, como hemos visto, por ejemplo, en la oración colecta, y volveremos a ver en múltiples oraciones a lo largo de la misa. Por eso el Aleluya se canta de pie.