¿Cuántas veces al día se debe hidratar la piel?

Según cuenta la Dra. Ríos, lo ideal es hidratar el rostro por lo menos 2 veces en el día: en la mañana temprano y en medio día. Ahora bien, si la piel es más seca, se vive en un clima seco o se transpira mucho, pueden ser 3 veces al día.

Como regla general, se recomienda aplicar una crema hidratante al menos dos veces al día, una vez por la mañana después de limpiar la piel y otra vez por la noche antes de acostarse.

La hidratación se recomienda varias veces al día con cremas que contengan activos hidratantes, lubricantes, regenerantes y reparadores y protectores solares para evitar la aparición de manchas en el dorso de las manos”, añade Alcalde.

Exceso de sequedad: aunque parezca contradictorio, la hidratación excesiva puede hacer que la piel no puede formar una barrera cutánea eficaz, lo que acaba en sequedad continua.

El mejor momento para hidratar el cuerpo es después de una ducha o de un baño, porque es el momento en el que la piel absorbe mejor todos los ingredientes hidratantes. El uso regular de un hidratante como NIVEA Body Loción Aloe Vera antes de irte a dormir te dejará la piel radiante y suave.

La piel seca se beneficia de las cremas hidratantes formuladas con humectantes como la glicerina o el ácido hialurónico. La piel sensible se beneficia de las cremas hidratantes sin alcohol ni perfume. La piel grasosa es la más adecuada para las fórmulas hidratantes no comedogénicas y sin aceites.

Si tu piel es opaca es posible que esté deshidratada, así que es momento de aplicar una hidratante. Si tu piel tiende a estar seca al tacto, es probable que necesite una buena dosis de humectante. Otro dato clave: las personas pueden tener piel hidratada pero seca, o piel deshidratada pero humectada.

Si tu piel está tirante, enrojecida y falta de suavidad después de una ducha, un paseo al aire libre con tiempo frío y seco o en una habitación con calefacción, es muy probable que esté sufriendo deshidratación. Prueba una crema hidratante específicamente formulada para pieles deshidratadas.

Con este paso ayudas a reparar, calmar, hidratar, restaurar firmeza y dar suavidad. Mientras dormimos la piel absorbe mucho mejor los activos que apliques sobre ella. Considera utilizar tu hidratante, tanto en el rostro como en el cuello y escote.

La hidratación para la cara mejora su aspecto

Por lo tanto, es importante hidratar la piel del rostro para eliminar la retención de líquidos que se acumula en los párpados, evitar la aparición de imperfecciones y, sobre todo, devolverle su brillo natural.

Aplicarlo antes de dormir multiplica su efecto y ayudará a regenerar la piel en zonas tan visibles. No se debe poner crema de noche si la piel es muy grasa y con tendencia a granos. Las mascarillas faciales son otra vía para limpiar tu cutis de impurezas y ayudar a hidratar la piel.

Debes aplicar la crema y esperar unos 15 minutos, aproximadamente, mientras te vistes, desayunas o preparas tus cosas. De esta manera te aseguras de que la piel ha absorbido por completo la crema y no sientes que la sobresaturas de producto.

La Dra Giselle Claros, dermatóloga y asesora de La Roche- Posay, aclara que no hay ningún impedimento para usar cremas juntas, siempre y cuando tengan una función diferente cada una y no se anulen entre sí. Lo importante es tener siempre en claro que se aplican de la más liviana a la más espesa.

Por otra parte, hay estudios que aseveran que es más efectivo usar cremas nutritivas por la noche ya que la renovación celular que se produce mientras descansamos es mayor, potenciando sus efectos.

La vitamina A es ideal frente a la piel seca. Contribuye a la renovación celular, es regeneradora y deja un aspecto muy suave. Alivia problemas como la psoriasis, el acné y los eccemas.

Beber suficiente agua es la clave para conseguir una piel sana. Cuando estás bien hidratada, no sólo por fuera con tus cremas sino también por fuera, tu piel tendrá un brillo natural y saludable. Asegúrate de beber al menos ocho vasos de agua cada día para obtener resultados óptimos.

Guía completa para tener una piel hidratada todo el tiempo

Cuando la piel se encuentra hidratada, se muestra más luminosa, flexible, suave y elástica.

La mejor forma de hidratar la cara sin cremas es llevar una alimentación sana y equilibrada, beber suficiente agua a lo largo del día (al menos 2 litros) y evitar la ducha con agua demasiado fría o demasiado caliente.

Rutina facial de noche: estos son los pasos a seguir para cuidar la piel antes de dormir

La Crema Hidratante JOHNSON'S^® Baby Antes de Dormir fue desarrollada para ser usada dentro de la rutina del sueño y ayudar al bebé a dormir más rápido y por más tiempo*. Rutina clinicamente comprobada.

Si no te limpias la cara, tus poros permanecerán obstruidos por la suciedad y el maquillaje. Esto causará brotes y conducirá al envejecimiento de tu rostro. Si no te limpias bien la cara, se quedará aceitosa, se acumulará y se oscurecerá con el tiempo. Esto puede provocar arrugas y un aspecto apagado en el rostro.

Pueden existir diversas causas para tener una piel deshidratada y éstas dependen de la persona, de su entorno, del ambiente al que su piel haya estado expuesta, como el clima, la contaminación, la exposición a rayos UV, ingesta de tabaco y alcohol e, incluso, a procesos hormonales.

En cuanto al momento de aplicación, realmente la mejor opción es aplicar el serum tanto por la mañana como por la noche. Si dejamos más de 8 horas entre cada aplicación, la piel absorve sin problemas todos las propiedades regeneradoras y te proporcionará rápidamente unos asombrosos resultados rejuvencedores.

Puede utilizarse como exfoliante para pieles sensibles y, al ser tan nutritivo, también ofrece beneficios antienvejecimiento para suavizar la apariencia de las líneas de expresión y las arrugas', además de ser rico en antioxidantes, que cuidan la piel de los daños causados por los radicales libres.

Descuidar el cuidado de nuestra piel puede tener consecuencias, pues, si no se mantiene hidratada, se pierde elasticidad y los folículos pilosos pueden taparse, lo que hace que se vea apagada, sin brillo, seca, acelerando la aparición de líneas de expresión.