¿Cuántas veces al mes hay mareas vivas?

Una vez aclarados estos términos es cuando podemos definir lo que son las mareas vivas, como un fenómeno cíclico que se produce dos veces al mes coincidiendo con las lunas nueva y llena y cuando el Sol, la Luna y la Tierra se encuentran alineados.

Septiembre-octubre y febrero-marzo son época de grandes mareas vivas. Esta semana se registrarán algunas las cotas extremas anuales tanto en pleamar como en bajamar. Las previsiones señalan que la pleamar más importante tendrá lugar el miércoles alrededor de las cinco de la mañana, con niveles de 4,84 metros de altura.

Este fenómeno de mareas vivas y muertas ocurre una vez en cada ciclo lunar, esto es, 13 veces al año. Ahora bien, el fenómeno que estamos viendo en estos días ocurre en septiembre y también en el mes de marzo, es decir, en las cercanías de los equinoccios.

Sube y baja dos veces al día, cada seis horas. Ese movimiento se debe a la fuerza de atracción del Sol de la Luna sobre la Tierra: de la Luna, porque está cerca del Sol porque tiene mucha masa.

Al día se producen dos ciclos de marea alta o pleamares y esto ocurre cada 12 horas.

Sube y baja dos veces al día, cada seis horas. Ese movimiento se debe a la fuerza de atracción del Sol de la Luna sobre la Tierra: de la Luna, porque está cerca del Sol porque tiene mucha masa.

Las mareas equinocciales son las más intensas del año.

Exactamente el tiempo que transcurre entre pleamar y bajamar es de 6 horas y 12,5 minutos y 12 horas y 25 minutos entre cada marea alta. Si os preguntáis por qué en vez de cada 12 horas, tarda 12 horas y 50 minutos, es porque el día lunar tiene 24 horas 50 minutos y 28 segundos más que en La Tierra.

Bajamar es el momento más bajo de una marea (marea baja), el agua ha llegado a su punto inferior, no pudiendo bajar mas. Al periodo de descenso del agua lo llamamos reflujo o marea decreciente.

Movimientos periódicos y alternativos de ascenso y descenso del nivel del mar producidos por la atracción gravitacional que ejercen sobre la tierra la Luna y el Sol principalmente.

El Mediterráneo, como ha explicado Mónica López, es un mar interior, es decir, un mar cerrado cuya comunicación con mares exteriores sólo se da a través de los 13 km del estrecho de Gibraltar, por lo que las masas de agua no pueden desplazarse de un mar a otro tan rápido. Por ello, el Mediterráneo no tiene mareas.

El tiempo aproximado entre una pleamar y la bajamar es de seis horas, completando un ciclo de veinticuatro horas y cincuenta minutos (dos pleamares y dos bajamares).

Cuando las mareas causadas por el Sol y las causadas por la Luna se combinan, se producen mareas vivas. Cuando las dos mareas se oponen, se producen mareas muertas. La diferencia entre la altura de las pleamares y las bajamares diarias constituyen la amplitud de la marea.

Exactamente el tiempo que transcurre entre pleamar y bajamar es de 6 horas y 12,5 minutos y 12 horas y 25 minutos entre cada marea alta. Si os preguntáis por qué en vez de cada 12 horas, tarda 12 horas y 50 minutos, es porque el día lunar tiene 24 horas 50 minutos y 28 segundos más que en La Tierra.

La luna atrae a la tierra con más fuerza que al agua del lado más distante de la tierra, ya que el agua dista más de la luna. Así pues, cuando en cualquier sitio hay marea alta, también hay marea alta en el otro lado de la tierra. Esto quiere decir que tenemos dos mareas altas en veinticuatro horas.

La Bahía de Fundy, en Nueva Escocia, Canadá, es conocida por tener las mareas más altas del mundo.

Cuando la Luna y el Sol se alinean con la Tierra (coincidiendo con la luna llena o nueva) se produce una mayor fuerza de atracción sobre el agua. Esto genera que tanto la pleamar como la bajamar sean de mayor intensidad. Además, la pulsión es mayor incluso con la luna nueva.

Principalmente por el efecto gravitatorio de la Luna y también del Sol. Las mareas varían principalmente por el cambio de la hora del pasaje de la Luna, que se atrasa todos los días. También influye la posición de la Tierra en su órbita, y la inclinación del eje de la Tierra de ese momento.

La marea diurna, tiene una marea alta y una marea baja cada día lunar. La marea semidiurna, tiene dos mareas altas y dos mareas bajas con altura casi igual diariamente. La marea mixta se caracteriza por una evidente desigualdad diurna en la elevación de las pleamares y bajamares entre ciclos de marea sucesivos.

Sube y baja dos veces al día, cada seis horas.

Marea viva, alta o sizigia: son las mareas que se producen con la luna llena y la luna nueva, cuando el Sol, la Luna y la Tierra se encuentran alineados.

La fuerza gravitacional de la Luna tira de los océanos y dirige las mareas. La Luna tira de los océanos hacia ella y hace que la Tierra se abulte ligeramente: este abultamiento crea las mareas. Pero las mareas que tenemos se deben a que la Luna está donde está.

Marea muerta, baja o de cuadratura: Son las mareas que se producen durante las fases de Cuarto Creciente y Cuarto Menguante, cuando las posiciones de la Tierra, el Sol y la Luna forman un ángulo aparente de 90º.

El Mediterráneo, como ha explicado Mónica López, es un mar interior, es decir, un mar cerrado cuya comunicación con mares exteriores sólo se da a través de los 13 km del estrecho de Gibraltar, por lo que las masas de agua no pueden desplazarse de un mar a otro tan rápido. Por ello, el Mediterráneo no tiene mareas.

CICLO DE LAS MAREAS

El tiempo que transcurre entre cada marea alta y cada marea baja es de 6 horas y 12,5 minutos.

El agua de mar penetra en zonas cada vez más alejadas de la costa, lo cual puede generar consecuencias catastróficas como la erosión, las inundación de humedales, la contaminación de acuíferos y de suelo agrícola, y la pérdida del hábitat de peces, pájaros y plantas.

La diferencia máxima entre la pleamar y la bajamar en un arenal del Mediterráneo apenas llega a 30 centímetros. Una cifra insignificante frente a los más de cuatro metros que alcanza en las playas de la comunidad.