¿Cuánto dura la temporada de orugas?

Las orugas se alimentan en invierno de las acículas de pinos y cedros, provocando que éstas se sequen y caigan. El daño más importante lo hacen desde el final del invierno hasta mitad de primavera, cuando las orugas son más grandes y voraces.

Aunque las mariposas de procesionarias se aparean en verano y las orugas nacen entre los meses de septiembre y octubre, es ahora, entre marzo y abril, cuando por fin bajan de los árboles y son realmente peligrosas.

Fase 3 Oruga o Larva: A los 30 ó 40 días nacen las larvas u orugas , suele ser en los meses de Septiembre y Octubre. Estas desarrollarán pelos urticantes a proximadamente a los 30 días de su nacimiento, creando también su bolsón definitivo que le servirá de resguardo en las noches y en los meses de invierno.

La reacción tras el contacto con la procesionaria del pino es inmediata: se produce hipersalivación, se inflama la lengua y aparece una coloración roja o amoratada, aparecen ampollas con líquido y úlceras que pueden producir pérdidas de alguna parte de la lengua.

Al final del invierno, las orugas que ya han completado su desarrollo larvario bajan en fila, una detrás de otra, (de ahí su nombre común de procesionarias) por el tronco del pino para buscar el lugar donde enterrarse y crisalidar. Esto ocurre de marzo a junio, justo el periodo en el que hay que extremar la precaución.

Endoterapia. Este método es nuestro preferido y consiste en colocar unas inyecciones en el tronco del pino a la altura del pecho. Estas inyecciones introducen un insecticida en el árbol que se va a distribuir por él, envenenando y matando a las orugas cuando se alimenten de las hojas del pino.

Podemos combatir a este insecto con trampas de feromonas, poda de bolsones, tratamientos insecticidas y barreras físicas. La mejor manera de evitar la proliferación de la procesionaria del pino (Thaumetopea pityocampa) son las acciones preventivas.

Los depredadores más efectivos de la Procesionaria del pino son los carboneros y los herrerillos, dos aves insectívoras especialmente voraces con estas orugas.

Una buena forma casera para eliminar las orugas es mediante el jabón de la vajilla. Mezcla en un pulverizador agua con un poco de jabón y rocía con el líquido las plantas que hayan sido afectadas por la plaga. No te pases, si le tiras demasiado podrías dañar las plantas y sería peor el remedio que la enfermedad.

Puede lavarse la zona con agua y aplicar frío local para calmar la sensación de picor o ardor. Las lesiones suelen durar 24 horas. Si transcurrido este tiempo le sigue molestando, puede acudir a una farmacia o un centro de salud y le recomendarán algún fármaco.

Cuando nos encontramos con una procesionaria, un nido o un desfile de las mismas en el suelo, lo primero que debemos evitar es tocarlas. Por supuesto, no hay que acercarse a los nidos, ni retirarlos por nuestra cuenta y vigilar a nuestra mascota o a los niños en el caso de que vayamos acompañados de ellos.

Síntomas de intoxicación por procesionaria en perros

Si tu pequeño peludo ha estado en contacto con esta oruga, debes acudir inmediatamente a un veterinario porque el riesgo para su salud es tan elevado que su vida corre peligro: puede sufrir un shock alérgico o necrosis en las zonas afectadas de su cuerpo.

Contacto con Procesionaria del pino, síntomas en perros

Irritación de patas y zonas que se han puesto en contacto. Irritación ocular. Daños inflamatorios en la lengua de leves a graves. Dificultad para respirar y shock.

Durante todo el invierno las orugas se refugian en los bolsones, saliendo a alimentarse durante la noche. En primavera, justo antes de enterrarse, es cuando la oruga es más grande y realiza los mayores daños.

la fumigación se puede realizar entre los meses de agosto a octubre, ya es cuando las larvas eclosionan y se alimentan del árbol y es aquí cuando se puede fumigar bien con insecticida o con producto biológico.

Signos de infestación de procesionaria del pino

La mariposa resultante de las larvas de procesionaria es la Thaumetopoea pityocampa, una mariposa nocturna. Éstas harán su aparición a mitad del verano, momento en el que saldrán de la tierra y, tras la cópula, realizarán una nueva puesta de larvas de procesionaria en las ramas de los pinos.

Identificación: Las orugas comunes tiene una serie de patas verdaderas y pseudopatas o “patas falsas” carnosas que apoyan el movimiento desde la cabeza hasta la cola. Por el contrario, las orugas geomensoras tienen patas verdaderas en el frente y pseudopatas en la parte posterior con un espacio sin patas en el medio.

Se llama procesionaria porque estos insectos desfilan en procesión. Anidan en estos árboles en una especie de bolsa y cuando ésta se rompe (parte del ciclo para completar su metamorfosis), las orugas bajan al suelo en fila india, asemejando una procesión.

Las orugas tienen muchos enemigos naturales.

Los depredadores comunes incluyen: pájaros, chinches asesinas, crisopas, escarabajos depredadores de tierra y arañas. Enfermedades naturales causadas por virus, bacterias u hongos con frecuencia matan orugas.

ANTIORUGAS Insecticida para orugas es un piretroide de amplio espectro a base de Deltametrin, con acción por contacto e ingestión, para su uso en diversos cultivos, eficaz especialmente contra orugas (como procesionaria o heliotis).

Para hacer un insecticida casero con leche deberás hacer lo siguiente:

Lava con abundante agua fría la zona afectada. No frotes o toques la zona afectada del perro, ya que puedes provocar más fricción del vello de la oruga liberando más sustancias tóxicas en el organismo del perro. Acude lo más rápido posible a un centro veterinario.

La procesionaria y los perros

Si las huelen, las lamen o incluso si las comen, el contacto con la lengua, la boca o la nariz les provoca serias reacciones alérgicas, al igual que inflamación y problemas respiratorios.

Si ves una procesionaria es mejor que te alejes; si las pisas, puedes hacer que todos esos pelos floten hacia arriba y te provoquen una reacción alérgica tras inhalarlos. Además, impregnarás la zapatilla de la sustancia urticante llevándola a casa, otro peligro más para tu mascota.

Durante el clima cálido, las orugas abandonan el nido y marchan en largas filas para encontrar tierra suave y seca para excavar bajo la tierra. Durante esa marcha y a medida que se mueven, sus pelos se caen y niños, perros o otros animales en contacto con el suelo pueden recibir irritaciones en la piel.