¿Cuántos años puede durar una ventana de PVC?

En líneas generales, podemos decir que la vida útil de las ventanas de PVC es de hasta 50 años. Pero para ello debemos prestar cierta atención a las partes móviles de la ventana, los herrajes, ya que engrasar estos elementos una vez al año garantiza que funcionarán correctamente durante una vida tan prolongada.

El aluminio es más resistente, pero requiere más mantenimiento y es menos aislante térmico. Por otro lado, el PVC es más fácil de mantener y tiene mejor aislamiento térmico, especialmente si se utilizan calidades de PVC de alta calidad.

Las ventanas de aluminio y PVC suelen tener una vida útil de alrededor de 20-25 años, mientras que las ventanas de madera pueden durar más, pero requieren más mantenimiento para prolongar su vida útil.

En primer lugar, el PVC es un material 1.100 veces más aislante que el aluminio, por lo que las ventanas de PVC ofrecen un mayor aislamiento térmico y acústico. Esto se traduce en un mayor confort, ahorro y eficiencia energética.

Hay muchos modelos y marcas de ventanas de uno y otro material pero, por ofrecer una cifra realista, una ventana de aluminio RPT de 70 mm de profundidad puede tener un precio un 30% mayor -o incluso más- que el de una ventana de PVC de la misma profundidad y mismas prestaciones.

En primer lugar, el PVC es un material 1.100 veces más aislante que el aluminio, por lo que las ventanas de PVC ofrecen un mayor aislamiento térmico y acústico.

La mejor época del año para sustituir las ventanas suele ser el otoño o la primavera, ya que las temperaturas no son demasiado bajas ni demasiado altas, lo que también facilita el trabajo del equipo de instaladores en el exterior.

¡El Otoño es la mejor época para cambiar las ventanas!

Además, las horas de luz todavía son suficientes para poder desempeñar este trabajo de manera efectiva. Si decides renovar las ventanas de tu hogar en esta época del año conseguirás evitar contratiempos ocasionados por las inclemencias meteorológicas extremas.

Las ventanas de PVC y de aluminio tienen una vida útil similar - aproximadamente 50 años en iguales circunstancias de mantenimiento. Sin embargo, en las zonas costeras las ventanas de aluminio se ven afectadas por el ambiente salino, lo que favorece la aparición de corrosión.

El PVC posee excelentes propiedades aislantes tanto acústicas como térmicas debido a su naturaleza “no conductora”. De esta manera, se reduce notablemente el ruido del exterior a la vez que desciende el consumo energético en comparación a hogares con ventanas fabricadas en otros materiales.

Además de dejar pasar la luz, las ventanas de PVC dan muy buenos resultados en aislamiento térmico y acústico. El aislamiento térmico viene garantizado por la baja conductividad del plástico y sus sistemas de cierre, muy herméticos.

Las desventajas del PVC en la construcción incluyen: su estabilidad. Otra desventaja es que el cloruro de polivinilo emite humos tóxicos cuando se derrite o se somete a un incendio. En las instalaciones no es muy resistentes y puede presentar roturas o rasgaduras.

El HDPE es conocido por su flexibilidad, estabilidad química y alta relación resistencia-densidad. El HDPE ofrece un sistema sin fugas a través de juntas de fusión térmica. Mientras que el PVC es un material más fuerte y rígido, es adecuado para enterramiento directo e instalación sin zanjas.

La capacidad de aislamiento térmico de una ventana se calcula mediante una fórmula matemática cuyo resultado es el 'valor U'. Cuanto más bajo es este valor, más aislante es una ventana. El aluminio presenta un valor U de 3,2 a 5,7, mientras el PVC ronda el 2.

En este apartado, el claro vencedor es el PVC. Las prestaciones aislantes que nos ofrece este material son muy superiores a las del aluminio, de hecho, el perfil de aluminio sin rotura de puente térmico (RPT) no ofrece ninguna dificultad al paso del flujo de calor o frío entre el ambiente interior y el exterior.

PVC vs. Aluminio: ¿Qué material es más pesado? En términos generales, las ventanas de aluminio son más pesadas que las de PVC. El aluminio es un material más denso que el PVC, lo que significa que una ventana de aluminio tendrá más peso que una ventana de PVC de tamaño y características similares.

La Rotura del Puente Térmico es un material aislante que se inserta en las ventanas de aluminio entre la capa interior y exterior para evitar la conductividad del metal y que se escape el calor a través de nuestras ventanas.

Las mejores ventanas para aislar ruido y frío son aquellas que incluyen varios vidrios acústicos, de espesor mínimo de 6 mm y en las que su marco está fabricado con materiales aislantes como PVC o aluminio con rotura de puente térmico.

Ventanas aislantes acústicas

Los sistemas abatibles u oscilobatientes, en lugar de los sistemas de corredera tradicional, los vidrios son los factores clave a la hora de conseguir ventanas insonorizadas para un óptimo aislamiento acústico.

Coloca contraventanas: las contraventanas de madera protegen la casa de los cambios de temperatura, la lluvia o la ventisca. Pon cortinas para evitar el aire: otro método para evitar que entre frío por las ventanas es añadiendo un forro térmico a las cortinas.

Por lo tanto, la próxima vez que llueva y no haga frío, tómate unos minutos para abrir las ventanas de tu hogar y dejar que el "olor a lluvia" inunde tus espacios. Respirar ese aire oxigenado y purificado te brindará una sensación de frescura y renovación, beneficiando tanto tu hogar como tu bienestar.

¿Cuánto se tarda en cambiar las ventanas de una casa? En un piso estándar, cambiamos todas las ventanas en 2-3 días. Una ventana se cambia en un día y llegamos a cambiar hasta 4 ventanas en un día. El cambio de ventanas en una casa grande suele tardar una semana.

Abrir las ventanas durante la lluvia permite que este efecto se potencie, permitiendo que el aire interior se renueve y que las viejas energías salgan para dar paso a las nuevas con la lluvia.

Un cambio de ventanas ayuda a la reducción de emisiones de CO2, contribuyendo así a la conservación del medio ambiente, a la reducción de la entrada de agentes contaminantes y a la mejora tanto del aislamiento acústico, como la seguridad del hogar.

¿Cómo hacerlo correctamente? Debes bajar las persianas y cerrar las ventanas durante las horas de más calor para así mantener la casa en penumbra hasta la caída del sol. De esta forma, si a las 7 de la mañana el mercurio del termómetro ya se acerca a los 20 grados, debes cerrar las ventanas aunque pierdas claridad.