¿Cuántos tipos de berro existen?

Existen 4 variedades de Berros:

Nombres vulgares en Madrid: Berros (Fuente el Saz de Jarama, Torremocha de Jarama, Robledondo, San Lorenzo de El Escorial, El Atazar, Patones, Villavieja de Lozoya, Rozas de Puerto Real, Navas del Rey, San Martín de Valdeiglesias).

A diferencia del berro, los canónigos son más grandes y además tienen un sabor más suave y menos picante.

Es un brote muy fácil de identificar debido a su vibrante color verde-clorofila y su peculiar forma. Posee un tallo largo y delgado que termina en una hoja lisa redondeada de una textura fina y tierna.

Este vegetal es ideal para combatir la anemia y depurar el organismo. Se cultiva en el cinturón verde de Mendoza y en algunas zonas nace junto a los canales. Se consigue fresco en esta época, porque en verano no resiste las altas temperaturas.

Al comprarlo se debe lavar bien y escurrir, como la lechuga. Luego se puede usar en ensaladas, sandwichs y hasta sopas. Los antioxidantes naturales, presentes en alimentos como el berro, pueden ayudar a prevenir el denominado estrés oxidativo que sufren todas las células del cuerpo con el paso del tiempo.

Otros nombres vulgares: berro de agua, berro de fuente, berra, berraza, berrera, mastuerzo de agua. Descripción: Planta acuática perenne, de 10-40 cm de altura, lampiña, de tallos tiernos y algo carnosos, huecos y con raíces en los nudos.

Los berros son ricos en yodo, hierro, y vitaminas A, C y E. Unos 100 gramos de berro tienen 3 mg de hierro, cantidad que supera levemente al contenido de de 100 gramos de carne, por lo que es ideal para combatir la anemia.

La rúcula, según la investigación, es más efectiva, ya que sus extractos inducen daños en las células cancerosas que las llevan a la muerte a bajas concentraciones. El canónigo, por su parte, induce a una reducción del número de células tumorales, aunque en menor grado.

Tienen un aroma característico y un sabor ligeramente picante pero con un punto de dulzura que recuerda en parte al sabor de la mostaza; aunque si los berros se recogen cuando están muy crecidos, sus hojas resultan demasiado picantes.

Aunque está disponible durante todo el año, el berro está en la máxima frescura de abril a septiembre y se puede encontrar en los mercados de muchos agricultores locales. Con un sabor picante similar a otros miembros de la familia de la mostaza, esta verdura puede agregar un gran sabor en ensaladas o platos con huevo.

Recolección. La cosecha se puede realizar a los 60 días del sembrado. Consiste en retirar los brotes laterales de la planta cuando sea necesario. Se cosecha a mano cuando las plantas tienen de 10 a 15 centímetros y cuando las hojas alcancen el tamaño máximo pero antes de endurecerse.

El berro (Nasturtium officinale) es una planta acuática que crece de forma silvestre en ríos, acequias y fuentes de aguas limpias de toda la península Ibérica y Baleares. Otros tipos de berro pueden cultivarse en la tierra o en maceta, como el berro de jardín (Lepidium sativum).

Los berros son ricos en yodo, hierro, y vitaminas A, C y E. Unos 100 gramos de berro tienen 3 mg de hierro, cantidad que supera levemente al contenido de de 100 gramos de carne, por lo que es ideal para combatir la anemia.

"Sumérgela en agua fría (después de separar las hojas) y déjala reposar hasta 20 minutos para que las partículas de tierra se suelten. Luego, extráela y enjuágala de nuevo", dice Schneideman.

Los antioxidantes naturales, presentes en alimentos como el berro, pueden ayudar a prevenir el denominado estrés oxidativo que sufren todas las células del cuerpo con el paso del tiempo.

Los preparados con berro, por vía interna, deben ser evitados por personas con gastritis, úlcera gastroduodenal e hipotiroidismo.

Las hojas del berro se consumen frescas en ensalada o como ingrediente de sopas y cremas de verdura. Los atributos curativos del berro son conocidos desde la Antigüedad.

Indicado como depurativo y remineralizante, para que resulte efectivo se recomienda tomar un litro o más al día de la decocción o del caldo de la planta hervida. También pueden tomarse unos 150 gramos del jugo de la planta fresca.

Crece y se desarrolla en casi cualquier tipo de suelos, pero lo hace mucho mejor si se cultiva en un sustrato franco arcilloso, con alto contenido de materia orgánica. La presencia de una buena dosis de humedad en la tierra es importante para una rápida germinación y crecimiento.

Hay dos formas de sembrar el berro: colocar las semillas en la tierra, o plantarlo en una maceta para luego trasplantarlo a un espacio húmedo. En cualquiera de los dos casos, se debe mezclar arena de piedra caliza, abono orgánico y tierra en iguales medidas.

Descripción: El berro es una planta completamente comestible, con una textura delicada de hojas color lima que generalmente se presentan en tres hojas en forma de lóbulos. Las hojas brotan de tallos finos y suculentos que todos se conectan a un racimo de raíces.

Beneficios de los canónigos para la salud

La medicina natural les reconoce efectos diuréticos, depurativos, digestivos, relajantes, fortalecedores del cabello y las uñas y protectores de la vista. Además los canónigos son útiles en la anemia y para los riñones, los huesos y los sistemas nervioso y cardiovascular.

El berro es una verdura que pertenece a la familia Brassicaceae, a la cual pertenecen otros alimentos como la col, el repollo, el brócoli o la col rizada. Por norma general, crece en arroyos poco profundos de Europa central y Asia y se cultiva mediante sistemas hidropónicos con agua rica en nutrientes.

La rúcula es una de las verduras más completas para cuidar de nuestra salud. Además de ser beneficiosa para nuestro sistema cardiovascular, también tiene propiedades anticancerígenas. Esta verdura de hojas alargadas y dentadas se emplea habitualmente en Italia como condimento para las pizzas después de ser horneadas.

La rúcula, además, posee una mayor cantidad de nutrientes y, concretamente, tiene el doble de ácido fólico del que posee la lechuga. Se trata de una sustancia importante en todos los grupos de población, pero especialmente en las embarazadas por su papel en la formación de nuevas células.

Su consumo puede ayudar a proteger el sistema cardiovascular y a prevenir enfermedades como el cáncer. También es un prebiótico natural que contribuye a mantener la buena salud de la microbiota, previene el estreñimiento y favorece el buen funcionamiento del sistema digestivo, reforzando las defensas del organismo.