¿Dónde aparecieron los primeros molinos de viento?

La primera máquina eólica conocida por la historia aparece en el año 1700 a.C. en Babilonia, usándose para bombear agua, aunque parece que en la antigua Persia se utilizaban ya molinos de eje vertical para moler grano.

El primer molino de viento fue ideado por Herón (c. 20-62 d.C.) y servía para mover los fuelles de un órgano. Los persas, a partir del siglo VII, ya poseían molinos para riego y molienda, formados por alas montadas sobre un palo vertical, cuyo extremo inferior movía una molienda.

En cuanto a los molinos europeos, las primeras referencias de la existencia de molinos de viento de eje horizontal, son del s. XII, tanto en Francia (en Bretaña) como en Inglaterra. En los Países Bajos, las primeras referencias son del s. XIII.

Los molinos más antiguos eran de mano y se usaban para moler muchos tipos de tubérculos,​ pero su expansión es característica del Neolítico, la fase económica caracterizada por la extensión de la agricultura.

Filón de Bizancio podría haber descrito por primera vez un molino de agua, lo que supondría que su invención habría podido ocurrir hacia mediados del siglo III a.C. en el mundo helenístico (Lewis, 1997).

Actualmente tenemos aerogeneradores instalados por todo el mundo, tanto en tierra (onshore) como en mar (offshore), gracias a que el científico estadounidense Charles F. Brush (1849-1929) construyó en 1887 lo que hoy se considera que fue la primera turbina eólica de funcionamiento automático para generar electricidad.

Por dos años, los animales de la granja trabajaron para construir un molino de viento que ayudaría con su trabajo. La primera tentativa fue destruida por una tormenta debido a sus paredes delgadas, pero el líder Napoleón declaro que fue saboteado por Snowball.

Los aerogeneradores tienen una vida media superior a 25 años. La rápida evolución de la tecnología del viento ha propiciado el aumento de la durabilidad de los aerogeneradores.

En España hay 1.298 parques eólicos presentes en 857 municipios, con 21.574 aerogeneradores instalados. Asimismo, hay más de 250 centros de fabricación en dieciséis de las diecisiete comunidades autónomas. En 2021, se generaron 60.485 GWh eólicos, un 10,2% más que en 2020.

Medidas: la torre puede rondar los 60 metros de altura, el rotor los 8 metros de diámetro y las aspas hasta los 40 metros.

La primera forma de molino fue un artilugio manual. Estos estaban compuestos de dos muelas, una que actuaba como la base, que quedaba fija, y otra que era móvil. La máquina funcionaba gracias a la fuerza física, que inicialmente aportaba el hombre y, posteriormente, los animales.

El molino tenía dos partes: la piedra inferior (el meta) y la piedra superior (el catillus), ambas de dura roca volcánica. La superior era cóncava, tenía forma de reloj de arena y era girada por asnos. Tenía un agujero en el centro y una tolva en la parte superior por la cual el molinero vertía el grano.

Adm. Máquina para moler cuyo movimiento es producido por el viento, que en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha forma parte del patrimonio etnográfico y puede ser declarado conforme a alguna de las categorías de protección que contempla la legislación de esta comunidad autónoma.

La evolución del molino: la electricidad

Hasta ahora todos los molinos eran manuales, hasta 1898 cuando la compañía estadounidense con sede en Ohio, Hobart, creó el primer molino eléctrico.

Vale destacar también el uso de la brújula, la imprenta, el microscopio y el telescopio durante este periodo. Como así también, el empleo de las armas de fuego, gracias a la invención de la pólvora.

Es un rueda que en todo su diámetro externo tiene una serie de cucharas denominadas álabas. Sobre estas cucharas sujetas a la rueda cae el agua desde el bocín del cubo, hace girar la rueda y acciona con ello el molino.

El uso de las turbinas de viento para generar electricidad comenzó en Dinamarca a finales del siglo XIX. Pequeñas turbinas de viento generaron electricidad hasta el desarrollo de las redes de distribución, fundamentalmente en Estados Unidos, en la década de los 30 – 40.

La energía eólica es aquella que se obtiene a partir de la fuerza del viento. ¿Cómo? A través de un aerogenerador que transforma la energía cinética de las corrientes de aire en energía eléctrica.

Puedes consultar las principales desventajas en esta lista:

-Bien parece -respondió don Quijote- que no estás cursado en esto de las aventuras: ellos son gigantes; y si tienes miedo, quítate de ahí, y ponte en oración en el espacio que yo voy a entrar con ellos en fiera y desigual batalla.

-Non cobardes y viles criaturas, que un solo caballero es el que os acomete. Levantóse en esto un poco de viento, y las grandes aspas comenzaron a moverse, lo cual visto por don Quijote, dijo: -Pues aunque mováis más brazos que los del gigante Briareo, me lo habéis de pagar.

La lucha de Don Quijote con los molinos de viento

En la embestida el caballero no sale bien parado, pues “dándole una lanzada en el aspa, la volvió el viento con tanta furia, que hizo la lanza pedazos, llevándose tras sí al caballo y al caballero, que fue rodando muy maltrecho por el campo”.

Hoy ya sabemos que los molinos de viento fueron creados en el Medio Oriente. Pero alrededor de 1180 D.C., de repente, una nueva forma de molino de viento surgió en el norte de Europa. La primera fuente de energía en Europa antes de los molinos de viento fueron los molinos de agua.

En Holanda se pueden ver alrededor de mil molinos, que ya no funcionan, pero han sido conservados como elementos característicos del paisaje holandés, y son considerados un símbolo de la lucha que el país mantiene con el agua.

- El Perelló (Tarragona) alberga, desde el jueves, el molino de viento terrestre más grande fabricado en España.

En la región de Castilla - La Mancha se encuentran los molinos con más historia de España y puede que del mundo: los molinos de viento que aparecen en “El Quijote”.