¿Dónde está el punto más profundo del océano?

El lugar se encuentra en la fosa de las Marianas, a casi 11 kilómetros por debajo del nivel del mar (más de 2000 metros de diferencia con la altura del Monte Everest, que es de 8849 metros), lo que lo convierte en el punto más profundo del océano. Y del planeta. El buque de guerra de la marina británica H.M.S.

La fosa de las Marianas alcanza en su punto más profundo los 11.034 m, en el abismo de Challenger. Se extiende a lo largo de unos 2.550 kilómetros con una anchura de 69 en forma de media luna. Si metiéramos el monte Everest en su interior, todavía quedarían miles de metros por cubrir.

En concreto, bajaron hasta una zona conocida como el abismo Challenger, al sureste de la isla de Guam en las Marianas. Llegaron hasta los 10.916 metros de profundidad. El cineasta James Cameron, director de Titanic, también batió un récord en las Marianas.

Tal vez el lugar más intrigante sea la Fosa de las Marianas, un abismo en el Océano Pacífico occidental que abarca más de 2.540 kilómetros y que es el hogar del Challenger Deep. El también conocido como el punto más profundo del planeta se ubica a más de 11.000 metros bajo el agua.

Océano Pacífico: abismo Challenger, con 10.924 metros de profundidad. Océano Índico: fosa sin nombre cerca de Java, con 7.187 metros de profundidad. Océano Antártico: abismo de Factorian, con 7.432 metros de profundidad. Océano Ártico: abismo de Molloy, con 5.551 metros de profundidad.

Por cada 10 metros que nos sumergimos en el océano, la presión aumenta 1 atmósfera. Si descendieras 1000 metros en el mar, sentirías una presión 101 veces mayor que la presión atmosférica a la que estás acostumbrado.

A partir de los 30 metros de profundidad, comienza a manifestarse un fenómeno conocido como «narcosis de nitrógeno». El aire comprimido que respiramos aumenta la cantidad total de nitrógeno en los tejidos, lo que interfiere con los procesos metabólicos normales. De manera particular, esto afecta al cerebro.

La colisión se produjo en el lado de estribor a las 23:40 del 14 de abril,​ lo que provocó el hundimiento del barco en menos de tres horas, a las 02:20 del 15 de abril.

Emprendió en un viaje documentado hasta el fondo de la Fosa de las Marianas, a bordo de un sumergible llamado DeepSea Challenger, capaz de soportar la presión a 11 mil metros de profundidad."

La fosa de las Marianas, en el océano Pacífico, con casi 11.000 metros de profundidad.

40. El océano es el lugar más grande sin explorar de nuestro planeta; se ha explorado menos del 5%. La próxima generación de exploradores e investigadores encontrará grandes oportunidades de descubrimiento, innovación e investigación.

1. El Mar Arabigo. Con una superficie total de 3862 millones de kilómetros cuadrados, el Mar Arabigo es el más grande de todo el mundo. También se le conoce como Mar de Arabia y de Omán y forma parte del Océano Índico.

En el momento de la destrucción del Titanic la temperatura del agua era de aproximadamente -2° Celsius (28 °F), por lo que quienes se arrojaron al mar con chalecos salvavidas pueden haber sufrido hipotermia o ataques cardíacos, advierte la empresa encargada del salvamento del naufragio.

Los más probables que se pueden encontrar a la profundidad en la que se encuentran los restos del Titanic, son el Pez pelícano y el Pez-ballena flácido.

El pecio del RMS Titanic, transatlántico británico de la White Star Line, reposa a 3821 m de profundidad en la parte norte del océano Atlántico, a algunos kilómetros del emplazamiento donde naufragó el 14 de abril de 1912 a las 2:20 de la mañana.

Punta Rasa es el límite exterior del río y el inicio del océano y, debido a eso, presenta un ecosistema especial, en el cual conviven playas, dunas costeras y zonas bajas o marismas. Punta Rasa fue declarada reserva natural e incorporada a la lista de Humedales de Importancia Internacional en 1997.

El primero está limitado al oeste por el canal de Ibiza, de unos 800 m de profundidad, y al este por el canal de Mallorca, de 700 m de profundidad. Al sur del canal de Mallorca se abre la depresión de Formentera, de 1.000 m de profundidad.

Un mar, por su parte, es una extensión de masa de agua salada mucho más reducida que los océanos, por lo que el tamaño es una de las principales diferencias entre ambos. De hecho, los mares son una parte pequeña del océano y generalmente están parcialmente acotados por tierra, incluyendo bahías y golfos.

El cuerpo humano soporta, normalmente, 1 atmosfera de presión, decimos que hay 1 atmósfera sobre el nivel del mar. En Medicina Hiperbárica aumentamos esa presión hasta 3 veces, algo muy leve en comparación con lo que llega a soportar una persona haciendo buceo, hasta 20 atmósferas.

"A esa profundidad, la presión es brutal, de 400 kilogramos por centímetro cuadrado".

Como sabemos, el agua tiene una densidad superior a la del aire, y esto implica en que una columna de aire y otra de agua de un mismo tamaño ejerzan presiones diferentes. Por cada 10 metros que nos sumergimos en el océano, la presión aumenta 1 atmósfera.

Esto le pasa al cuerpo humano a 3000 metros de profundidad. Ahí se evidencia cómo el cuerpo se comprime completamente y una vez que ocurre una implosión, tanto la materia como el cuerpo se “achican” y terminan por desaparecer o desvanecerse por completo.

Fuentes del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) explican que una vez que el cuerpo se encuentra en el agua, flota unos tres o cuatro días, especialmente si se trata de agua salada, pero pasado ese tiempo, se va al fondo.

En condiciones normales, los submarinos están diseñados para soportar la presión externa sin perder la presión interna, manteniendo así su estabilidad. Sin embargo, cuando la presión externa es demasiado intensa, como ocurre en grandes profundidades, se puede producir una implosión catastrófica.

Eva Hart tenía 7 años cuando embarcó en el Titanic y 91 cuando murió, en 1996. Fue la última superviviente con recuerdos de la tragedia en morir.

Al fin y al cabo es probable que solo unas semanas después del accidente del RMS Titanic el iceberg acabase derritiéndose y diluyéndose en el Atlántico por el abrazo de las aguas de la Corriente del Gofo.