¿Dónde está la esencia de las cosas según Platon?

A través del Mundo sensible percibimos las cosas, pero en realidad esas cosas no son más que una copia del original. El original reside en el Mundo de las ideas, donde todo es perfecto e inmutable. El Mundo de las ideas aloja “las esencias” que existen aunque no sean percibidas por las personas.

La esencia es aquello invariable y permanente que constituye la naturaleza de las cosas. El término proviene del latín essentia, que a su vez deriva de un concepto griego. Se trata de una noción que hace referencia a lo característico y más importante de una cosa.

«La esencia es lo mismo que lo que es» (Metaph., 1030a 3). Lo que es, en la teoría aristotélica se refiere a la substancia y a los accidentes. Sin embargo los accidentes no podrán ser considerados ser en sí mismos sino únicamente en tanto que son en otro.

Lo que ARISTÓTELES quiere señalar aquí es que la esencia de ningún ente consiste en ser, sino en la de ser tal o cual ente. La esencia de las cosas no reside en ser cosas, sino en ser tales cosas.

La Teoría de las ideas es el núcleo de toda la filosofía platónica. Si bien no se encuentra formulada en una sola obra, su desarrollo y profundización puede encontrarse a lo largo de varios textos como “La República” y “Fedón”.

Hartmann se vincula así a la teoría platónica de las ideas: «En cuanto a su modo de ser, los valores son ideas platónicas.

La esencia de las cosas no reside en ser cosas, sino en ser tales cosas. Por ello, el ser no constituye la esencia de ninguna cosa, pues la esencia de los seres es- triba en ser tales o cuales seres, y no simplemente en ser.

En definitiva, la esencia de una persona se constituye a partir de factores biológicos, psicológicos y sociales. De esta manera, todos tenemos cierta predisposición a que nuestra identidad dependa de los genes.

"La verdadera esencia de la vida reside en encontrar la realidad de los sentimientos. Aprender a diferenciar si lo que sientes es real o un flash pasajero, eso es para mí conocer la esencia", comenta.

Para los existencialistas, los seres humanos, a través de su conciencia, crean sus propios valores y determinan un significado para su vida porque el ser humano no posee ninguna identidad o valor inherente. Esa identidad o valor debe ser creado por el individuo.

Para Platón, la filosofía es el cuidado del alma a través del cual se logra una existencia ordenada y guiada por la razón; la filosofía acerca a la idea de Dios, a la racionalidad absoluta. Por tanto, para Platón, la filosofía nunca es sólo un asunto teórico, sino también una vida completamente práctica.

Platón estuvo convencido que el conocimiento puede alcanzarse, ya que el conocimiento debe ser certero e infalible, además, debe tener como objeto lo que es en verdad real, porque lo que es real tiene que ser fijo, permanente e inmutable, no obstante, lo real lo consideraba como lo ideal; lo cual se opone al mundo ...

La esencia de una persona hace referencia al conjunto de peculiaridades o rasgos que definen a un individuo y que le permite diferenciarse del resto. Estas características no son variables, pero esto no significa que permanezca intacta con el paso de los años, pues ningún ser humano es el mismo a los 20 o a los 40.

El término esencia se puede considerar también desde el punto de vista lógico: en este caso se considera que la esencia es un predicado mediante el que se define una cosa, o se dice lo que es.

la Teoría de las Ideas (con el mito de la caverna), la Teoría Antropológica (con el dualismo y el mito del carro alado), la Teoría del Conocimiento (con las diferentes formas de conocer que propone), la Teoría Política y Social (con el modelo de Estado que propone)

En Platón. Platón distingue dos mundos o conjuntos de fenómenos, siempre poniendo como ejemplo el mito de la caverna: el mundo sensible y el mundo inteligible.

Platón introdujo las Ideas como entidades distintas a las cosas materiales. Esto dio como resultado una duplicación que, según Aristóteles, en lugar de simplificar la realidad, la complejizó.

Immanuel Kant (1724-1804) fue un filósofo prusiano de la Ilustración.

En los diálogos de madurez (como Fedón, La República y Fedro), Platón sostiene que las Ideas son un conjunto de entidades inteligibles que se caracterizan por ser: Únicas. Las Ideas tienen sus propias características, no hay dos iguales. Por ejemplo, la belleza no es igual a ninguna otra Idea.

En la filosofía tradicional la esencia ha sido considerada como la propia e indisoluble identidad de las cosas frente a la apariencia fenoménica de la experiencia, lo que situaba a la esencia en una realidad metafísica. Actualmente, no se considera la metafísica dentro del ámbito de la ciencia.

Si los seres humanos no podemos conocer la esencia de la realidad, al menos podemos conjeturar, qué es, cómo es, sus características, función, finalidad, clasificación, problemática; es decir, realizar un mapeo sobre todo aquello que podamos expresar sobre cualquier fenómeno.

Por su parte, la sustancia conjuga dos elementos constitutivos: la esencia, que hace que la cosa sea lo que es, y la existencia, que permite la facticidad, la realidad efectiva de la cosa.

La esencia no existe fuera de las cosas, sino en ellas y a través de ellas, como su principal propiedad general, como su ley. El conocimiento humano va asimilando gradualmente la esencia del mundo objetivo, cada vez ahonda más en él.

La esencia constituye, para ARISTÓTELES, lo que la cosa actual es, en tanto que para la escolástica tardía, la esencia indica la pura posibilidad de un ente, sin su existencia actual.

Lo esencial del hombre es el amor y ha sido Cristo su mayor encarnación histórica. Con Él, el amor se presenta como "síntesis de los opuestos" (p. 86), como algo "activo y contemplativo, es palabra y silencio, es mirada y gesto"; por ello, el "amor escapa a toda definición" (p. 87).

La pieza está dividida en cuatro movimientos según las cuatro esencias (agua, tierra, fuego, aire).