¿Dónde ponen sus nidos las ardillas?

Las ardillas establecen su nido en los huecos de los arboles o en un hueco del ramaje, y en ocasiones, en los nidos desocupados de algún grajo (pájaro parecido al cuervo), urraca o ave de rapiña.

Los nidos son esféricos, de un tamaño aproximado de 22 cm., y suelen tener 2 orificios de acceso para facilitar la huida, uno mayor que otro, pudiendo ser taponados desde el interior. Suelen estar colocados entre ramas de los árboles y su interior está tapizado de musgo, hojas, ramitas, paja o líquenes.

Muchas ardillas grises hacen nidos para sus pequeños en agujeros en los árboles. Durante primavera, verano y otoño algunas ardillas grises construyen casas en las ramas de los árboles. Usando ramitas, cortezas y hojas, construyen una pelota grande con musgo y pasto. A esta pelota hueca se le llama nido de ardilla.

A partir de lo que acabamos de explicaros tenemos que decir que las ardillas grises, rojas y las del tipo zorro duermen en nidos que construyen empleando ramas y palos, que rellenan con musgo, tiras de cortezas de árbol, hierba y hojas.

Como ya sabemos, las ardillas que hibernan son las terrestres, por lo que estas lo hacen enterradas en el suelo, en las madrigueras que cavan hasta 1 metro o más de profundidad, donde no solo pasan por este tiempo de inactividad, sino que también se resguardan de depredadores, descansan y crían.

Usa plantas aliadas: Disuadir a las ardillas rodeando tu parcela con variedades de plantas es una buena idea, a su nariz no les gusta los olores como las capuchinas, caléndulas, menta o mostaza.

Cuando llueve, las ardillas se refugian debajo de las hojas y enrollan sus colas para evitar la lluvia. También se observaron ardillas construyendo nidos con desechos plásticos. Recogen bolsas de plástico, hilos de plástico y colillas de cigarrillos en lugar de ramas, hojas secas y hierba.

Al vivir en zonas boscosas, las semillas, bayas y frutos del bosque son el principal alimento de ardillas. A veces también recurren a huevos de pájaros que encuentran en nidos, o lombrices e insectos pequeños que trepen por los árboles. Pero lo que más les gusta son las semillas y frutos.

Las ardillas son roedores pertene- cientes a la familia Sciuridae, que se encuentra ampliamente distribuida por todo el mundo y sólo están au- sentes en Australia, Madagascar, las regiones polares, el sur de Suramé- rica y algunas zonas áridas del vie- jo mundo.

Son dispersores de grandes cantidades de semillas y finalmente, son una importante fuente de proteína para reptiles, aves y otros mamíferos. Sin embargo, cuando sus poblaciones se elevan en exceso y provocan daños a cultivos, son consideradas como plaga.

Por la noche se esconden y no salen para evitar ser atacadas por estos depredadores nocturnos. Sobre todo se alimentan de frutos caídos de los árboles, semillas o cortezas, pero también pueden cazar pequeños insectos que se encuentren cerca de su madriguera o incluso pueden robar huevos tanto de aves como reptiles.

Viven en colonias dentro de un sistema de madrigueras donde duermen, descansan, crían, almacenan alimento y evitan peligros. Son activas durante el día, sobre todo desde media mañana hasta avanzada la tarde, especialmente durante días cálidos y soleados.

Habitante habitual de los bosques de coníferas, aunque también está presente en otras formaciones arbóreas, la ardilla necesita 14 horas al día de descanso.

Las ardillas

Les encanta vivir en los bosques, trepando a los árboles, escarbando y royendo todo lo que encuentran. Son curiosas y muy inquietas, necesitan correr libres y estar activas. Cada vez es más común tener uno de esos animalitos en casa.

Las ardillas de los árboles se pueden encontrar en bosques y también en parques de las ciudades. A pesar de ser expertas escaladoras, suelen bajar al suelo para buscar alimento como frutos secos, bellotas, bayas y flores. También comen corteza, huevos o pájaros pequeños.

recolectan nueces y semillas durante el otoño y las entierran en la tierra o las esconden en sus nidos. Cuando llega el invierno, las ardillas encuentran las nueces y semillas que habían enterrado y se las comen.

Otro consejo sobre cómo evitar que las ardillas se coman los cables del automóvil es proteger al motor que entra. Puede dar un paso más utilizando una pantalla de alambre para cerrar cualquier apertura que puedan usar las ratas.

Lo cierto es que las ardillas se comunican mediante complejos sistemas de chirridos de alta frecuencia y movimientos de la cola.

Normalmente cuando todavía son muy pequeñas se les suele alimentar con leche en polvo, yogur natural y alimentos muy suaves. Pero si ya está destetada y puede comer alimentos sólidos estas son las comidas preferidas por las ardillas: Frutas crudas y secas. Brócoli.

Las ardillas se adaptan al medio en el que viven y también a la época del año; en verano y primavera eligen alimentos ligeros, mientras que en los meses más fríos optan por los más energéticos para poder hacer frente al invierno.

Su distribución mundial se expande por toda Europa y el norte de Asia, excluyendo las islas del Mediterráneo. En Gran Bretaña e Irlanda, la población de ardilla roja ha bajado drásticamente durante los últimos años, en parte a causa de la introducción de la ardilla gris (Sciurus carolinensis) de Norteamérica.

Estas amigas peludas sienten atracción por las hayas grandes de nogal americano. Y no es para menos; este árbol le brinda nueces y flores comestibles. Sin embargo, los álamos, los pinos y los sauces también son ideales para atraer ardillas.

Algunas de las frutas que puede comer tu roedor son manzana, plátano, uvas, fresas, cerezas, melón o melocotón, entre otros. Se debe prestar atención a las pepitas de las frutas ya que, por ejemplo, en la manzana no se recomienda su ingesta.

La longitud del cuerpo y cabeza es de 23 a 30 cm. la cola de 19 a 25 cm. y el peso del adulto varía entre 400 y 600 g. Al igual que muchos miembros de la familia Sciuridae, la ardilla gris es acaparadora; atesora numerosos alimentos en pequeños almacenes para su posterior recuperación.

En España ocupa de manera continua la región euro- siberiana, desde Cataluña a Galicia, y el Sistema Ibérico septentrional. Notable aumento del área de distribución en Galicia donde en los años 80 sólo habitaba los Ancares y la linde con Asturias.

Las ardillas de tierra árticas pueden hibernar hasta ocho meses, pero aumentan sus tasas metabólicas y la temperatura corporal durante períodos de 12 a 14 horas cada 20 días aproximadamente.