¿Dónde se utilizan medidores de radiación?

La radiación puede ser medida en diferentes formas, como partículas alfa, beta, gamma, neutrones, entre otras. Estos instrumentos son ampliamente utilizados en diferentes áreas, como la medicina nuclear, la investigación, la industria, la seguridad pública y la protección ambiental.

El medidor de radiación es un dispositivo para medir campos magnéticos. Este medidor de radiación es apto para medir campos magnéticos estáticos y dinámicos. Gracias a que el rango de medición del medidor de radiación alcanza los 2400 mT, puede usar este dispositivo en muchos sectores.

La radiación solar directa se mide por medio de pirheliómetros. Merced al empleo de obturadores, solamente se mide la radiación procedente del sol y de una región anular del cielo muy próxima al astro. En los instrumentos modernos, esta última abarca un semiángulo de 2.5º aproximadamente a partir del centro del Sol.

Para poder identificar si se trata o no de una fuente radiactiva será necesario utilizar detectores de radiación especializados, los cuales son capaces de indicar el nivel de radiación existente a una determinada distancia de la fuente radiactiva.

Medidores y analizadores de radiaciones electromagnéticas de alta frecuencia

– La única manera de saber si hay niveles elevados de radón en su hogar es examinándolo. Los niveles de radón son comunmente medidos en picocunes por litro de aire (pCi/L). La Agencia de Protección Ambiental recomienda tomar acción para corregir si el nivel de radón en su hogar es 4pCi/L ó más alto.

Después de pasar por la web de la BfS, en Android se dispone de esta información desde los ajustes del teléfono. Simplemente hay que dirigirse a acerca del teléfono, luego a información legal y se verá exposición a radiofrecuencia.

Hay dos tipos de radiación: radiación ionizante y radiación no ionizante.

Este se conoce como uranio enriquecido y es el más radiactivo. Aunque el principal uso del uranio es como fuente de energía, este elemento también tiene otras aplicaciones en diversos sectores, como la industria y la medicina.

La radiación ionizante tiene suficiente energía para afectar los átomos de las células vivas y, por consiguiente, dañar su material genético (ADN). Afortunadamente, las células de nuestro cuerpo son extremadamente eficientes para reparar dicho daño.

La piel puede tardar entre unas semanas y varios años para sanar por completo. El tiempo que requiere la piel para sanar depende de la dosis de radiación que recibió. Las personas que reciben una alta dosis de radiación en todo, o en parte del cuerpo pueden presentar caída temporal del cabello.

Un dosímetro es un aparato utilizado en radioterapia, para medir la cantidad de radiación (rayos X, ionizantes, ultravioleta), que el paciente recibe o puede recibir en cada sesión del tratamiento.

Dos usos: El medidor EMF puede probar la radiación del campo electromagnético y la temperatura al mismo tiempo. El medidor EMF puede ofrecer una medición precisa de electrodomésticos: TV, aire acondicionado, cocina de inducción, arroz, nevera, ordenador, cables eléctricos, etc.

Esta medición se realiza mediante medidores de banda ancha. A fin de distinguir el servicio principal, la medición se debe complementar con un acustímetro, que convierte las ondas electromagnéticas en ruido y que el ingeniero distingue.

Muchos equipos de casa generan en realidad radiaciones electromagnéticas: Lámparas de bajo consumo, pantallas de televisión u ordenadores, radiadores eléctricos e incluso las mantas eléctricas. Todos estos objetos de la vida cotidiana generan campos eléctricos o magnéticos y/o funcionan gracias a ellos.

Por eso algunos especialistas recomiendan este tipo de medidas dentro de la casa:

Estar expuesto a una gran cantidad de radiación durante un corto período de tiempo, como durante una emergencias causadas por la radiación, puede causar quemaduras en la piel. También puede conducir al síndrome de radiación aguda o "enfermedad por radiación". Los síntomas incluyen dolor de cabeza y diarrea.

También se ha descubierto que la radiación ionizante (una forma de radiación de mayor energía que la emitida por los teléfonos celulares) causa algunos cánceres de encéfalo. Se hicieron muchos estudios diferentes para investigar si el uso de los celulares es peligroso para la salud humana.

Los teléfonos más radioactivos

El modelo Edge de Motorola es el teléfono móvil que más radiaciones emiten, con una tasa de 1,79 vatios por kilogramo. A continuación, aparecen en la lista: ZTE AXON 11 5G, OnePlus 6T, SONY Xperia XA2 Plus y los Pixel 3 y 4 de Google.

​ Los teléfonos móviles usan radiación electromagnética en el rango de las microondas, lo cual según algunos sería perjudicial para la salud humana. ​​​ Una gran cantidad de investigación existe, tanto epidemiológica como experimental, en animales no humanos y en humanos, que no demuestran efectos peligrosos.

Las señales de los teléfonos móviles, el Bluetooth, el Wifi y las televisiones inteligentes son fuentes de radiación no ionizante (radiofrecuencia) y no presentan riesgos para la salud. La radiación no ionizante tiene un rango de frecuencia y energía muy bajo para causar daños al ADN.

Algunas de las aplicaciones más significativas de las radiaciones ionizantes en la industria son la esterilización de materiales; la medición de espesores y densidades o de niveles de llenado de depósitos o envases; la medida del grado de humedad en materiales a granel (arena, cemento, etc.)

La radiación natural puede producirse por muchos materiales distintos: en el suelo, el agua y el aire hay más de 60 materiales radiactivos naturales. Por ejemplo, la principal fuente de radiación natural es el radón, un gas natural que emana de las rocas y la tierra.

El plutonio es un metal radioactivo de color blanco-plateado. Generalmente se encuentra combinado con otras sustancias. La mayor parte del plutonio existente se ha producido en reactores nucleares; sin embargo, cantidades muy pequeñas ocurren en forma natural.

Si alguien toca material radiactivo sufrirá cáncer en diferentes niveles así como quemaduras dependiendo del material y sus condiciones.

El arsénico es uno de los elementos más tóxicos que se encuentran en la naturaleza. Los seres humanos pueden ser expuestos al arsénico a través de la comida, agua y aire.

Dúchese con agua tibia y lávese el cuerpo suavemente con mucho jabón. No se escalde, refriegue ni rasque la piel. La piel ayuda a proteger la parte interna del cuerpo del material radiactivo. Lávese el cabello con champú o jabón.