¿Por qué comer sardinas?

Su alto contenido en fósforo favorece el estado de los huesos y los dientes, mantiene el pH de la piel y mejora funciones biológicas del cerebro. Por último, su componentes grasos omega 3, presentes en todos los pescados azules, son saludables para el corazón, gracias a sus efectos antiinflamatorios y anticoagulantes.

- Previene la anemia (disminución de hemoglobina) al ser baja en calorías y poseer vitaminas A, B y D, además de minerales: calcio, fosforo, potasio, zinc, yodo, hierro y magnesio. 4. - Al contener vitamina B12, combate problemas estomacales. Asimismo, contiene vitamina B6, que reduce la depresión y asma.

Este nutriente también reduce la presión arterial y contribuyen a mantener el funcionamiento normal del cerebro, previniendo el deterioro cognitivo. Además, las sardinas son ricas en vitaminas como la B-12, esencial para mantener sano el sistema nervioso, para el metabolismo de proteínas y para formar glóbulos rojos.

Un estudio sugiere que comer dos latas de sardinas a la semana tiene un efecto muy positivo en la salud porque previene una de las enfermedades más comunes y graves. Las sardinas son fuente de omega 3, taurina, calcio y vitamina D.

Para el cuerpo humano, cien gramos de atún aportan aproximadamente los mismos nutrientes que cien gramos de sardinas.

Es por ello un alimento muy recomendable, aunque esta aseveración tiene sus matices: el contenido de colesterol (100mg/100 g) es elevado; aunque, la capacidad de los pescados para aumentar el colesterol sanguíneo es inferior a la de otros alimentos de origen animal (embutidos, mantequilla, quesos curados, tocino, etc.) ...

Sin embargo, de estas marcas previamente analizadas, la mejor es Aurrerá, ya que es una de las que contiene el mayor número de proteína, y al mismo tiempo es la que menos grasa y calorías aporta a tu organismo. Ya que conoces las marcas de sardinas más saludables ¿qué esperas para agregarlas a tu lista del súper?

Gracias a su alto contenido de omega 3, comer pescado estimula la producción de la melatonina, hormona que regula los ciclos del sueño, lo que permite un buen descanso nocturno.

¡Con 3 mg de hierro por 100 g, las sardinas no tienen nada que envidiar a la carne! Trae tanto como el solomillo o el entrecot. El hierro es esencial para la formación de glóbulos rojos, glóbulos de los cuales aproximadamente una cuarta parte de las mujeres tienen un déficit.

Más calorías y grasas

En las sardinas en lata el contenido de Omega 3 es superior a los productos frescos. Esto se debe al empleo de aceite para poder garantizar su conservación pero, no hay que dejar de lado que esto supone que son alimentos que sufren de un aumento de calorías, colesterol y grasa.

Proteínas, ácidos grasos poliinsaturados (con predominio de los omega 6), selenio, fósforo, calcio, vitamina B12, niacina y vitamina D. Como las sardinas frescas, las sardinas en aceite tienen un alto valor nutritivo. Es un pescado azul con gran contenido en proteínas de alto valor biológico.

Los tomates por su parte contienen gran cantidad de carotenos con función antioxidante y poseen también vitamina A, ambos micronutrientes son absorbidos con mayor facilidad con ayuda de las grasas, lo cual en este caso lo brinda la sardina que posee grasas saludables para el organismo.

Desde el punto de vista nutricional, el salmón es el claro ganador de la competencia de los pescados más saludables.

Según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, si comparamos los valores nutricionales de 85 gramos de cada uno de los pescados, podremos decir que, con respecto a las calorías, el salmón tiene muchas más que el atún (177 contra 93).

En cuanto a la cantidad recomendable de consumo, los expertos en nutrición cuentan que podríamos consumir hasta tres raciones de pescado azul a la semana, preferiblemente los de pequeño tamaño, como las sardinas, y la ración variará dependiendo de la persona, pero una ración estándar sería de 125 -150 gramos.

Como parte de una dieta saludable para el corazón, coma al menos 2 raciones de pescado cada semana. Los pescados grasos (también llamados azules), los cuales contienen ácidos grasos omega 3, son los mejores para el corazón. Estos pescados incluyen el salmón, la caballa, la trucha de lago, el arenque y las sardinas.

Los contenidos mínimo y el máximo de mercurio fueron 0.18 a 4.52 y 0.14 a 4.74 mg/kg, con valores promedios de 1.23 y 0.74 mg/kg, para atún y sardina, respectivamente.

Sardina, atún, caballa, chicharro, bonito, salmón y tantos pescados grasos tiene que tener presencia regular en nuestra dieta para que sus ácidos grasos poliinsaturados Omega-3 nos protejan del colesterol malo al ser vasodilatadores arteriales.

Entre sardina y sardinilla no hay diferencia en la especie, tan solo en el tamaño del pescado, siendo la sardinilla de un tamaño mucho menor.

Pero recuerdan que, “de todos modos, el aporte de calorías de las sardinas en aceite es bajo: 210 calorías cada 100 gramos”.

Si se adquiere fresca, la consistencia de su carne debe ser firme al tacto, ojos brillantes y que no estén hundidos, de un olor marino poco pronunciado y que la escama esté pegada al pescado. Puesto que se deterioran con facilidad, no conviene guardar las sardinas más de dos días.

Beneficios de comer atún en conserva

El atún es un alimento muy saludable. Se trata de un pescado azul y, por tanto, es rico en ácidos grasos omega-3. Además contiene proteínas de gran calidad. También es rico en vitaminas liposolubles, como la A y la D, y en vitaminas del grupo B, como la B2, B3, B6, B9 y B12.

¿Cuánto dura la temporada de sardinas? Aunque se pueden pescar sardinas todo el año, de acuerdo con el calendario de Adepesca la temporada comienza en mayo y se puede alargar hasta octubre.

Los pescados grasos son los que más contienen ácidos grasos omega 3 y parecen ser los más beneficiosos para la salud del corazón. Algunas buenas opciones de pescado rico en omega 3 son estas: Salmón. Sardina.

Reducen los triglicéridos, un tipo de grasa en la sangre. Reducen el riesgo de desarrollar latidos cardíacos irregulares (arritmias). Disminuyen la acumulación de placa, una sustancia que comprende grasa, colesterol y calcio, que endurece y bloquea las arterias. Ayudan a bajar ligeramente la presión arterial.

Para la población vulnerable se precisa de recomendaciones más estrictas específicas para las 4 especies identificadas con un alto contenido en mercurio: Pez espada/ Emperador, Atún rojo (thunnus thynnus), Tiburón (cazón, marrajo, mielgas, pintarroja y tintorera) y Lucio.