¿Por qué las hojas se ponen cafes?

Las hojas de las plantas son órganos que permiten obtener los rayos del sol, pero también son tejidos por los que hay un intercambio de fluidos a lo largo del día. Las puntas de las hojas comienzan a ponerse marrones cuando hay pérdida de agua y esta no se repone de forma adecuada a la velocidad requerida.

Si quieres saber cuáles son, ¡presta atención!

Si es sólo de un color marrón más o menos parejo, puede estar causada por el sol o problemas de riego y/o humedad. Las manchas con bordes de colores suelen estar causadas por hongos y bacterias. Por ejemplo, si la mancha tiene un borde amarillo, es posible que se produzca por una infección bacteriana.

Cuando las puntas de tus plantas se empiezan a secar o adquieren tonos pardos y marrones, pueden deberse a algo tan simple como una secuencia de riego escasa, que hace que la planta no reciba el agua y los nutrientes que necesita en las cantidades adecuadas.

La razón más común por la que las hojas se vuelven amarillas o marrones es el riego excesivo o insuficiente .

Por feo que sea, lo mejor que se puede hacer con el crecimiento quemado es dejarlo así y proporcionar la mayor cantidad de agua posible a las plantas dañadas . Un riego profundo regular junto con una aplicación semanal de un tónico de algas (que no contenga fertilizante) ayuda a que las plantas se recuperen.

El crecimiento de la planta se detiene repentinamente y las hojas se vuelven amarillas y luego marrones, lo que indica que hay exceso o falta de riego. Examina las hojas: si están crujientes, probablemente estés regando poco; si están blandas al tacto, probablemente estés regando en exceso.

Incorpore materia orgánica y mantillo orgánico en sus sitios de plantación. El yeso de jardín también puede mejorar la compactación del suelo, especialmente en suelos arcillosos pesados, y ayudar a mantener las hojas verdes. Un pH inadecuado del suelo puede provocar deficiencias de nutrientes y hojas amarillas.

Las plantas utilizan el nitrógeno para un gran crecimiento de las hojas y un buen color verde.

Con agua destilada

Se limpia con agua tibia, un paño, pasando por cada una de ellas ysin dejar manchas de agua. El paño puede ser una toallita, una toalla de mano o un trapo de microfibra; lo más importante es que el material sea lo suficientemente suave para evitar que se raye la superficie de la hoja.

Al igual que las hojas se pueden quemar por el sol, también se pueden arrugar por el exceso de frío o escasez de agua. Cuando una planta muestra las puntas marrones en las hojas es muy habitual que le falte riego.

Las hojas con márgenes chamuscados pueden parecer poco atractivas, pero aún así ayudan a la planta con la fotosíntesis, creando alimento para que emerjan hojas nuevas y intactas. Resiste la tentación de quitar las hojas quemadas .

¿Qué es el chamuscado de hojas? El chamuscado de las hojas es un trastorno fisiológico que se presenta como tejidos descoloridos en los márgenes y, a veces, entre las nervaduras de las hojas de árboles y arbustos . En casos severos, toda la hoja se vuelve marrón, se arruga y se cae. La quemadura de las hojas es, de hecho, una reacción a un entorno desfavorable.

Seguramente has usado alguna vez bicarbonato de sodio porque es un gran antiácido natural. Pues es esta misma función la que trabajará como fungicida y te ayudará a terminar con las plagas de tu jardín de una vez por todas.

El amarillamiento irregular con posibles deformidades de las hojas suele deberse a una plaga o a una deficiencia de minerales. Si no se ven plagas, lo más probable es que se deba a una deficiencia de minerales, normalmente calcio o boro. La solución es fertilizar una vez al mes o trasplantar la planta para obtener tierra fresca para macetas .

Aunque los factores específicos pueden diferir entre las plantas de interior protegidas y las plantas expuestas en paisajes al aire libre, las puntas marrones surgen por las mismas razones básicas. Una vez que se vuelven marrones, esas células muertas de las puntas no pueden revivir , pero las correcciones rápidas ayudan a restaurar la salud del resto de la planta.

- Busca tornillos, clavos, tuercas y cualquier otro elemento de hierro, y mételos en una botella de plástico con agua. - Añade una pequeña cantidad de azufre para que reaccione con el hierro y el agua). Deja reposar. - Agita la botella varias veces al día.

Se dan en forma de manchas amarillas o marrones en las hojas, lo que a menudo provoca que se sequen y caigan. Por suerte, estas quemaduras son muy sencillas de tratar y rara vez llegar a ser peligrosas para la planta. Solo tienes que hacer lo siguiente: Si la tienes en maceta, retira la planta del sol.

Hojas marchitas, con bordes quemados o manchas. Caída masiva de hojas. Falta de crecimiento de la planta. Flores que no se abren.

La radiación infrarroja del sol transfiere energía e incrementa la temperatura. El calor excesivo causa daños al desarrollo de la planta y el fruto. Mayor calor produce más evaporación, menor absorción de agua y una planta más débil y con follaje menos denso, que a su vez expone a la fruta a más radiación.

Antes de regar, inspeccione el suelo. Si puede localizar la humedad del ciclo de riego anterior a 5 cm/2″ por debajo de la superficie del suelo, es posible que esté regando en exceso. Por otro lado, si el suelo está tan duro que no se puede atravesar con un destornillador, es posible que exista una falta de riego.

La buena noticia es que la mayoría de las plantas se recuperarán entre 7 y 14 días si reciben el cuidado adecuado (que incluye rehidratación).

Una buena opción para ayudar al drenaje es es agregar sustrato poroso en el fondo de la maceta: piedras, guijarros, piedra pómez… Una buena combinación podría ser: bolitas de arcilla, gravilla y perlita. El objetivo es que el exceso de agua salga del suelo rápidamente y no dañe las raíces.

Las hojas más oscuras absorben más luz , mientras que las hojas de colores más claros reflejan más luz. La reflectancia puede influir en el clima porque la luz transporta calor. Cuando las hojas absorben luz, atrapan ese calor.

La escuela de pensamiento general es que regar desde abajo es la forma más eficaz de regar las plantas en macetas. Empapa completamente toda la tierra, fomenta un fuerte desarrollo de las raíces y también puede ayudar a evitar muchas enfermedades fúngicas que se producen al regar desde arriba.

¿Por qué tus plantas se vuelven marrones? Al igual que el color amarillento, el oscurecimiento de las plantas indica un problema : riego insuficiente, excesivo, quemaduras solares o una deficiencia nutricional . Si las hojas marrones también se sienten secas y crujientes, es una señal casi definitiva de que la planta necesita más agua.