¿Qué asteroide se acerca a la Tierra 2023?

El asteroide 2023 DZ2, descubierto con el telescopio Isaac Newton situado en el Observatorio del Roque de los Muchachos (La Palma) no chocará con la Tierra a pesar de que sus órbitas intersectan porque está afectado por una resonancia secular con el planeta Júpiter que reduce drásticamente la probabilidad de una ...

Según el Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS), de la NASA, que detalló la velocidad estimada del asteroide, el 2023 CL3 pasará muy cerca de nuestro hogar, a 7.23 millones de kilómetros, lo que equivale a 19 veces la distancia entre la Tierra y la Luna, el día miércoles 24 de mayo, a las 09:53 ...

Este miércoles, 2 de agosto, se consumirán todos los recursos que el planeta puede renovar en un año y a esta fecha se le conoce como el Día del Sobregiro de la Tierra. Es decir, que hoy agotamos los recursos naturales que deberían haber alcanzado para todo el 2023, señala la Red Global de la Huella Ecológica.

Designado como BU 2023, el asteroide se acercará al extremo sur de América del Sur alrededor de las 4:27 p.m. PST (7:27 p. m. EST) a solo 3.600 kilómetros sobre la superficie del planeta y dentro de la órbita de los satélites geosincrónicos.

El asteroide 2023 BU pasará cerca de la Tierra, pero no es motivo de preocupación. Aunque fue detectado por primera vez hace unos días, 2023 BU se acercará a unos 3540 kilómetros de la superficie de nuestro planeta antes de continuar su trayectoria.

Según unas nuevas estimaciones, el asteroide Apofis, de unos 300 metros de diámetro, podría alcanzar nuestro planeta en 2068. Eso sí, las probabilidades continúan siendo extremadamente bajas, exactamente de una entre 150.000. Representación del acercamiento del asteroide Apofis a la Tierra en 2029.

El asteroide no volverá a cruzarse en nuestro camino hasta 2026. Aunque en un principio parecía existir la posibilidad de que chocara contra la Tierra, los científicos lo han descartado.

La NASA logra traer a la Tierra una muestra de un asteroide por primera vez en su historia. Los científicos esperan que proporcione información única sobre el origen de la vida y sobre la formación del sistema solar hace unos 4500 millones de años.

Todas las masas de tierra serían expulsadas; cualquier cosa que no estuviera adherida al lecho rocoso saldría despedida, por lo que tanto los árboles, las rocas, los edificios... todo sería arrastrado hacia la atmósfera (nosotros también). Las rocas y los océanos en movimiento provocarían terremotos y tsunamis.

El 14 de octubre de 2023, un eclipse solar anular cruzará Norteamérica, Centroamérica y Sudamérica. Será visible en partes de Estados Unidos, México y muchos países de Centroamérica y Sudamérica. Millones de personas del hemisferio occidental podrán experimentarlo.

12P/Pons-Brooks alcanzará su punto más cercano a la Tierra el 21 de abril de 2024. Aunque su nombre pueda parecer intimidante, su presencia no representa una amenaza para la integridad del planeta.

Nelson, profesor de ciencias terrestres en la Universidad de Tulane, hizo el intento en un artículo publicado en 2014, donde calculó que la probabilidad de morir por el impacto local de un meteorito, asteroide o cometa es de 1 en 1 millón 600,000.

Sin embargo, su próxima aproximación en 2029 situará al asteroide a un paso de la Tierra, a menos de una décima parte de la distancia que nos separa de la Luna y muy cerca de las órbitas de algunos satélites geosíncronos de la Tierra.

Características de Venus

Parte de la intensidad del brillo de Venus es debido a la cercanía con la Tierra, ya que se trata del planeta que más próximo se encuentra de nosotros.

Asteroides próximos a la Tierra y potencialmente peligrosos

1999 AN10 (también conocido como 137108 o Gog) está clasificado dentro de los grupos de asteroides conocidos como Próximos a la Tierra y Potencialmente Peligrosos.

Los astrónomos han confirmado que en el llamado punto de Lagrange L4, un segundo asteroide troyano orbita alrededor del Sol en la misma trayectoria que la Tierra.

Los científicos de la NASA calculan que se necesitaría un asteroide de unos 100 kilómetros de ancho para acabar totalmente con la vida en la Tierra.

La caída de asteroides de roca o hierro mayores de 50 m de diámetro sucede con un intervalo medio de cien años, lo que puede producir catástrofes locales y maremotos. Cada varios cientos de miles de años, asteroides de más de un kilómetro causan catástrofes globales.

Con una masa de más de 46 millones de toneladas, si llegara a impactar contra la Tierra en 2068 liberaría el equivalente a 1.151 megatones de TNT, como si explotaran cerca de 50 bombas atómicas.

Debido a su período orbital es de 70 años, después de su paso en 2024, la próxima oportunidad para observar el Cometa Diablo será en 2095. Por lo tanto, este evento representa una oportunidad para los aficionados y científicos de todo el mundo para estudiar y maravillarse con este fenómeno celestial excepcional.

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Mediante los datos recopilados por la misión Cassini de la NASA, un equipo internacional de científicos ha descubierto fósforo —un elemento químico esencial para la vida— atrapado dentro de los granos de hielo ricos en sales que fueron expulsados al espacio desde Encélado.

Con estos dos ya conocemos 7 en sistemas planetarios bastante cercanos al Sol”, explicó Alejandro Suárez Mascareño, del IAC y primer autor del estudio publicado en la revista Astronomy & Astrophysics. Los dos nuevos planetas, GJ 1002b y GJ 1002c, se encuentran a unos 16 años luz de distancia.

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Cambios climáticos extremos: La inversión en la rotación influiría en los patrones climáticos, desencadenando condiciones meteorológicas y climáticas extremas en todo el mundo. Nuestro planeta se formó hace aproximadamente 4.54 mil millones de años, poco después del nacimiento del sistema solar.

Si la trajéramos a la Tierra, su densidad sería un millón de veces menor a la del aire. Por lo que en el momento que esta pieza tocara nuestra atmósfera a nivel de mar, sería destruida por la presión atmosférica de la Tierra y explotaría.

Esta destrucción podría realizarse debido a un bombardeo atómico o por el impacto de un gran asteroide. Si la Luna fuera destruida una de las consecuencias más importantes es que los mares y océanos perderían su regulación, por tanto, las aguas crecerían y decrecerían de forma bestial.